Capítulo 24

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"Está... Enojada"

Cuando llegamos al lago, lo primero que hice fue que los demás arreglaran el sitio para poner a Roth ahí y también el sitio de Fernando.
Al bajar, de inmediato lavé mis manos porque, bueno, la toqué. No me pude resistir a que mis dedos entraran en ella.
La dejé acostada y me asomé a ver la vista al lago. Al frente está la casa de Esteban. Podré ver hacia donde va.
Es un buen sitio.
Entro y saco un café y me sirvo.
Me siento a beber de él. Miro de reojo a Roth. Tengo una vista espectacular de su trasero.
Bebo otro sorbo Y voy donde está Roth y me acuesto a su lado acariciando su hombro.
No ha despertado, creo que ésta vez me pasé.
Maldición, ¿Por qué no me habrá dicho lo del paseo? Si ella supiera el gran problema al que se metió... Por mi culpa.
Continuaba acariciando su hombro, siento que se mueve.

-¿Despertaste Roth? -pregunté.

Sí, despertó.

-S... sí... ¿Dónde estamos? -respondió.
-Ya llegamos al lago Roth...
-¿Y Fer?... ¿Dónde está Fer?
-Él está en su carpa...

Vas a dormir esta noche conmigo.
No dejaré que te vayas a un sitio desprotegido.

-Entonces... Voy a mi carpa... -dijo sentándose.
-No. Vas a dormir conmigo Roth...
-(...) -ríe de manera falsa -No.
-Quieras o no.
-Matt... Basta de involucrarte en mi vida de ésta manera....
-¿Por qué? ¿Me quieres lejos de tu vida?
-No es eso... Sólo que... No me dejas respirar como yo quiero.
-Lo siento, pero... Quizás eso cambie en unos años más...
-¿Por qué dices eso?
-A tus 23 años...
-¡Basta!... ¡No!

La miro con detenimiento.
Mis palabras la lastiman. Una parte se siente feliz por conseguir eso. Pero la otra parte, me da golpes en la cabeza con un bate de béisbol.

-¿No qué? -continué.
-¡No voy a ser tuya Matt!
-¿Quién dice?
-¡Yo!
-(...) -bebo un sorbo de café que estaba en la mesa y suspiro -... No puedes huir Roth.
-¿Huir de qué?

Está a la defensiva.
Que tierna.

-Huir de mí...
-¿POR QUÉ ME DICES ESO?
-Porque es la verdad.

Mantén la calma Matt. No tienes por qué gritarle.

-Adiós Matt. -dijo dando media vuelta.
-No.

Siguió caminando. Pero odio que me desobedezcan. Tomé su brazo de forma bruta y no la solté.

-¡Matt me duele!
-He dicho que te quedarás acá.
-Suéltame o grito.
-Si gritas, te castigaré.

Grita por favor.
Quiero hacer callar esa boquita.

-Suéltame por favor. Quiero ir a ver a Fer.
-Luego vuelves... O te iré a buscar.
-... L... luego vuelvo...

La tiré hacia mí y la besé a la fuerza.
La solté y salió.
Debo intentar hacer que mi "amigo" se baje.
Me siento y termino de tomar café.
Escucho pasos venir hacia mí.
Levanto mi mirada del libro y veo que es Fer.
Genial, ¿Qué quiere ahora?

-Vine por tí. -me dijo.
-¿Viniste a agradecer lo de la carpa? No es nada.
-No, no vine por eso.
-¿Entonces?
-Vine por Roth.

Río de manera falsa.

-Debes de estar bromeando. -retomo.
-¿Tengo cara de bromear?
-Siempre.

Él se acercó como si me fuera a golpear.
Me levanto y nos quedamos frente a frente.
En una pelea entre los dos, seguramente él quedaría con una pierna rota.

-No te pases de listo conmigo Matt. Deja a Roth tranquila.
-No puedo.

Suspiré y fui a la entrada a ver si venía Roth.
Él sigue mirándome.
Le tendré que contar.

-Fer, toma asiento por favor.

Él se sentó sin dejar de mirarme.
Suspiro con aún más fuerza.

-Yo, eh... Metí a Roth en un problema.
-¿QUE HICISTE QUÉ?
-Calma. Fue cuando nos conocimos.

Comencé a contarle hasta cierto punto. La otra parte se lo contará la madre de Roth cuando sea el momento.

-Pero, ¿No crees que te pasas cuando le hablas a Roth?
-Bueno, es que ella me gusta mucho. Además, la debo tener bien cerca por Esteban.
-Claro...

Creo que no le convence lo suficiente.
Escuchamos unos pasos. Es Roth.

-Fer... Tengo tu cuaderno... -dijo.
-Gracias Roth...
-¿En dónde estabas? -pregunté.
-Fui a comprar el cuaderno en el pequeño negocio... ¿A caso me lo vas a prohibir?
-Sí. -respondí seco.
-¿Con qué derecho Matt? -respondió con tono firme.
-Con el derecho de protegerte.
-Matt... Detente...

Fer sujetaba del brazo de Roth.
Al parecer se pone como una fiera cuando se enoja.

-¿No entiendes que te quiero demasiado?
-Si entiendo... Pero... ¡Déjame!... Quiero respirar con libertad Matt...
-(...) -suspiro -Fer... Tú ya sabes... ¿Puedes irte y dejarme con Roth?

Asintió y salió.

-¿Qué es lo que sabe Fer? ¡Dime Matt!
-Primero, cálmate. Segundo, no te diré. Y tercero, no te quiero lejos de mi. ¿ENTENDISTE?
-No, no te entiendo Matt...

Antes de poder hablar, Roth estaba dispuesta a salir de aquí.
Oh querida, tengo dos gorilas afuera.
Me levanté y tomé con fuerza su brazo y le hablo a los guardias.

-No quiero que la dejen salir de aquí, y si lo hace, ustedes la seguirán. La única forma de que ella salga, será con mi autorización. ¿Entendido?
-Sí señor Matt.

Se quedaron en la puerta.
La hice entrar. Pobrecita.
Intentaré evitar que conozcas a Esteban.
Todo lo que hago es por su bien... Creo.

Donde tú vayas... iré [Visión Matt Cortez] IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora