El jefe de Rolls Royce (Editando contenidos)

Visita inesperada

3

En la mañana siguiente me desperté por el alarma del móvil. Marcaban a las 8:00.
Recordé la noche anterior, hoy me sentía bien.
Miré a un lado y él no estaba ahí. Recordé que tenía trabajo así que pensé que se fue por eso.
Me levanté de la cama y fui a darme una ducha, me cambié y salí. Yo no desayuno por la mañana, ya sé, es la comida más importante del día, pero no me he acostumbrado.

Caminé las frías calles de Londres hasta llegar a mi destino. John's restaurant. Suspiré antes de entrar, no sé por qué pero sentía que hoy iba a ser un día duro.
Me saludaron los compañeros, por la mañana habían personas que venían para desayunar.
Dejé mis cosas en mi taquilla y me puse el delantal. Hora de trabajar pensé mientras suspiraba.

-Cai, ven un momento. -dijo una de mis compañeras sujetando el teléfono del restaurante- Alguien quiere hablar contigo. -suspiré y cogí el teléfono-

-¿Diga? -dije con la voz muy débil, estaba cansada-

-Buenos días señorita Hunt. -escuché su voz ronca- No quería despertarla esta mañana por que sé que tiene un horario diferente al mío. -hizo una pausa- Como sabe, estoy en la oficina. Y... -se paró y se escucharon voces- Luego me paso. -colgó-

¿Sólo quería decirme eso? Vaya pérdida de tiempo. No me dijo ni: "Ayer estuviste genial" menudo soso estaba echo este chico.
Dejé el teléfono en su sitio y suspiré de nuevo.

-Ey Cai! -dijo Ryan, el camarero de la barra- ¿Cómo estás? -sonreí débil-

-Cansada... -suspiré de nuevo-

-¿No dormirste? -negué- Bueno, tranquila. Tómate un café, a lo mejor te despierta. -sonreí al igual que él-

-No, estoy despierta, pero gracias. -él dudó un poco pero asintió y se fue-

Ordené a las porcas personas que habían hoy. Más o menos eran, cuatro o tres personas desayunando.
Estaba sentada en el taburete de la barra escondiendo mi rostro con las manos.

-Cai... -dijo Ryan en un susurro- Debes estar atenta, el jefe vendrá.

Cuando dijo que el jefe iba a venir me desperté por completo. Ese viejo amargado tenía un caracter fuerte y si me veía así me podría despedir.
Me levanté del taburete derecha, y oí unas risas por parte de Ryan y lo fulminé con la mirada mientras lavaba unos vasos.

Miré por la puerta y ví a entrar unos empresarios. Suspiré, más trabajo.
El último en entrar era Harry. Sonreí al verlo pero el no me vió. Se sentaron por grupos, y justo cuando la puerta se iba a cerrar, entra mi jefe. ¿Esto que es? ¿Una reunión de empresarios o que pasa?

-Perdóne señorita... -me pidió un chico con sus compañeros-

Me acerqué a ellos. Tenía que tener buena presentación, el jefe amargado tendría en cuenta eso.

-¿Que desean caballeros? -fui amable-

-Yo quiero un café con leche descafeinado de sobre. -asentí mientras apuntaba-

Los empresarios me dijeron cada uno lo que quería y se lo puse en la mesa a Ryan. Él lo cogió y rápidamente comenzó.
Tardaría un poco ya que eran muchos pedidos.

Ví una mano levantada para que fuera, y fuí. En ese grupo estaba Harry.

-Señorita Hunt. -dijo interrumpiendo a uno que iba a hablar, sólo lo sonreí- No te he escuchado decir buenos días señor.

-Buenos días señor. -dije y algunos empresarios se miraban entre sí- ¿Que desean?

Tomé cada uno lo que quería.