El jefe de Rolls Royce (Editando contenidos)

Tarde y noche con Harry

Capítulos anteriores...

-Acostúmbrate. -sonrió-
-No, no. -suspiré- Enserio, no me siento bien Harry. -volví al intento-
-Señorita Hunt, váyase a casa y póngase otras bragas. No es difícil. -dijo con un tono serio-
-Harry... -él se acercó a mí-

4

-No. -dijo juntando nuestros labios-

Me aparté. Puede que sea como una niña pequeña, pero me he enfadado con él. Enserio, es tan rudo.
Cuando me separé me miró. ¿Estaba enfadado por haberme separado de él?
Volvió a ese enorme escritorio y se sentó, con las manos entrelazadas en su boca.
Nos quedamos mirándonos y buen rato hasta que picaron a la puerta, se abrió y era un empresario que lo ví en el restaurante esta mañana.

-Perdonad por interrumpir. -dijo nervioso- Harry, te están esperando en la reunión. -miré a Harry y se levantó-

-Ahora salgo James. -James asintió y cerró la puerta- Toma. -me dió las braguitas y se fue-

Estaba enfadado, lo sé. Me dejó en su despacho y oí de nuevo su voz.

-Por favor, salga y váyase. -lo miré algo triste y asentí-

Caminé rescto y bajé las escaleras, paso de ir por el ascensor.
Respiré hondo y caminé a mi casa.

*Minutos después*

Llegué a mi casa cansada, me duché y me puse un chandal ancho de color gris y una camiseta de tirantes blanco. Claramente tenía puesto un sujetador. En fin, me tumbé al sofá. ¡Dios! No he comido en todo el día y sigo sin tenerlo. Me aburrí en casa sola sin hacer nada, miraba la televisión. Mis amigas estaban de viaje por que no tenían trabajo o ya le habían dado las vacaciones de Navidad. Tan sólo somos 20 de Dicimbre y sigo sin tener vacaciones. Suspiré, y dormí en el sofá.

Después de la siesta que me pegué miré el reloj. ¡Joder! Las 18:30! Me tenía que cambiar ya, pero ya, ya, ya! Tenía que quedar con Harry en el restaurante a las siete en punto, y estaba lejos.
Me cambié, me puse unos jeans ajustados negros, unas Timberland y una chaqueta color verde, que en la capucha tenía como pelitos.
Me puse una bufanda y cogí el bolso. Corrí, llegaría tarde.
Cuando llegué, Harry estaba esperando.en la puerta con las manos dentro de su chaqueta.
¿Se había vestido? Llevaba unos jeans negros, un tipo de botín (para hombre) de color negro, una camiseta blanca y un abrigo tejano grande, que por dentro era suave.

-Dios, Harry! Lo siento, me quedé dormida. -él suspiró, dejando ver su nariz roja-

Lo abracé, no quería que estubiera enfadado conmigo. Él mo me respondió el abrazo.

-¿Sigues enfadado?
-Hunt, ¿sabes que hora es? Te he esperado unos 20 minutos.

Eso me entristeció, 20 minutos esperándome. Ni se fué, se quedó ahí.
Joder, ¿tarde tanto? Si cuando me levanté eran y 30! Eres idiota Caitlin!

-Se me ha quitado las ganas de hacer cosas contigo hoy. -suspiró-

Hacía frío, no hacía viento si no el hambiente. Lo sé por que cuando Harry suspiraba se podía ver el humo que sacaba por la boca.

-Lo siento Harry... -se dió la vuelta para irse- No, no... -tenía ganas de llorar-
-Maldita seas! Cuando te digo que vengas a las siete en punto, vienes a las 19:00! -dijo casi chillando- Pero no, tu te quedas dormida sin importar que hace frío. ¿Que quieres? ¿Que me muera de frío? -me sentía pésima, una mala persona-

El me decía siempre que no me olvidase lo de esta tarde, pero Caitlin! Tú siempre tienes que ser tan imbécil! Joder...
Mis lágrimas empezaron a caer lentamente, y me las sequé. El me miraba enfadado y triste a la vez.