Renacer

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Las entrañas de Gaia rugían, irritadas,
y las nubes lloraban con amargura;
mientras los cuerpos emergían del círculo,
y los árboles miraban con expresión dura
aquel festival de maldad y sufrimiento,
aquel escenario a los pies de la luna.

El viento soplaba con un aullido pavoroso,
azotando a las almas que contra él se vieran;
los cuervos chillaban en un concierto horroroso,
observando vilmente el surgir de las fieras.

Una orquesta maldita dirigía la noche, tocando sus notas al compás de vaivén
de ramas sin hojas que la brisa movía, amenazando con sus garras sombrías.
A estos desgraciados, ¿quién se atrevería ver?

Dedos y huesos crecían cual árbol,
deseosos de la carne y venas roer.
Bestias sedientas de sangre y gritos,
nacidas para morir y muertas para renacer.

Almas expulsadas del reino de la infamia
corrían sobre la Tierra para angustias esparcir.
Demonios encarnados del ayer en el hoy
dirigían la cruzada que a todos haría sufrir.
De estos desgraciados, ¿quién lograría huir?

Poemas de GuerraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora