Déjate Amar

30 Final

Ultimo Capítulo

Conocí a todos los integrantes de mi familia, mi padre se llama Jorge, mi hermana mayor Dora, y mis dos hermanas menores Amber y Sofia y por supuesto mi madre Patricia, me la pase muy bien con todos, ya los quería y podía sentir que ellos también me querían a mí.

En la noche decidí que tenía que irme, Sofia protesto un poco pero le dije que volvería mañana. Cuando estaba en el auto me dirige al apartamento de Flor, había pasado todo el día sin verla y no podía estar tanto tiempo lejos de ella. Cuando estuve al frente de la puerta toque dos veces y unos segundos después salió Flor y ella me abrazo.

--Te extrañe –Me dijo, yo la abrace y la cargue.

--Yo también te extrañe mi vida –La bese en los labios.

Estuvimos un rato hablando y le conté todo lo que había pasado hoy, ella estaba sentada en mis piernas y constantemente le daba besos, pero esos besos de un momento a otro se volvieron más intensos y apasionados, tome a Flor y la lleve hasta la habitación principal, la recosté sobre la cama y comencé a besar su cuello, ella llevo sus manos a mi camisa y la quito, yo hice lo mismo con la de ella, bese todo su cuerpo y con suma delicadeza, sentía que se podía romper ante mí en cualquier momento, ella eran tan delicada que me daba miedo herirla con algún paso en falso.
Seguimos con besos hasta que ambos quedamos sin ninguna prenda encima y con el mayor cuidado del mundo la hice mía, totalmente mía. Cuando terminamos nos dormimos abrazados y sentía que ella estaba bien.

Narra Florencia

Me desperté y sentí un dolor en mi parte baja, sabia porque era y me reí, no me arrepiento, amo a Gonzalo y esta fue la mejor manera de demostrarlo, me intente mover pero no pude ya que un brazo pasaba por mi cintura, me di la vuelta y lo vi, se veía tan lindo, pase mis dedos por su mejilla y sus labios, el abrió los ojos lentamente y me miro sonriendo.

--Mataría por despertar así cada día de mi vida –Él dijo y yo me reí y lo bese.

--No es necesario que mates, yo estoy dispuesta a despertar cada día así.

Estuvimos toda la mañana jugando, riendo y hablando, pero de la nada me vino una idea a la cabeza, algo que seguro a Gonzalo le gustaría.

--Gonza.

--¿Si?

--Hace un tiempo estaba leyendo sobre las asociaciones que hay para el cáncer, leí unas de otros países y aquí no hay muchas, y no son asociaciones como tal, y estaba pensando en por qué no hacer una, un lugar donde se ayuden a personas de bajos recursos que no puedan comprar los medicamentos, que no tienen dinero y se ayuden allí. --Gonzalo se me quedo mirando un rato y luego hablo.

--Me parece una idea grandiosa, lo había pensado también, pero no tenía muy claras mis ideas.

--Sí, es que de verdad quiero que otros niños, otras personas tengan oportunidad de vivir.

--Si, por eso te amo, eres el ser más hermoso del mundo –Me abrazo y me beso.
–Por supuesto que vamos a hacer eso, suena grandioso, ayudar a otras personas.

--Eres el mejor por eso es que te amo.

--Si pero yo te amo mucho más.

--¡Claro que no!

--¿No?

--No, yo te amo más.

--Ok, como digas, pero sabes en el fondo que yo soy el que te ama mas.

--Sueña.

Me miro con los ojos entre cerrado y me tomo en los brazos de reprende, me tiro a la cama y se subió a mi para hacerme cosquillas.

--¿Quién ama más a quién? –Dijo parando un poco las coquillas.

--Yo –Dije riendo.

--Respuesta equivocada.

Continuo con la cosquillas hasta que se cansó, nos acostamos en la cama decidiendo que los dos nos amábamos igual, no pensé nunca poder estar así con nadie, pero aquí estoy, con el hombre más maravilloso diciéndome al oído que me ama.