Todo en este mundo tenía consecuencias, de un matrimonio fallido con drogas y alcoholismo salió Liv Dixson, un ser que no fue fruto de un amor más fue de un odio tremendo.
La pequeña jovencita pero grande por dentro había escapado del orfanato, se sentía tan orgullosa que a sus jóvenes catorce años lograra escapar de ese infierno que la obligaban a llamar casa.
Ella creyó encontrar libertad al salir de ese lugar, si la encontró pero no de la mejor manera. Ahora han pasado cinco años y la inmadura chica de catorce años se había convertido en una fuerte mujer de veinte años sabiendo las reglas de las calles y la supervivencia.
Había noches en las que ella dormía en las bancas del parque siendo juzgada por mucha gente pero no le importaba, a estas alturas las críticas no le afectaban o tal vez jamás le afectaron. Los llantos dejaban de hacerse presentes cuando se dio cuenta que no tenía otra salida, su destino había sido escrito con tinta negra condenada a la pobreza y no saber qué iba a comer el siguiente día.
Tan fuerte para sobrevivir una semana entera sin probar comida, fuerte para haber permanecido con la misma ropa un mes entero hasta poder conseguir más en los centros de donaciones o en los basureros.
Tener que robar comida de unos supermercados debido a que tenía que saciar su hambre y sed. A veces sus pies le daban lo suficiente para poder llegar a los comedores voluntarios y así digerir algo. Las veces que pasaba una enfermedad lograba superarla con dolor y lágrimas. Vivir en la calle no era algo de lo que estaba orgullosa pero de lo que si estaba orgullosa era lo fuerte que se había convertido.
Por otro lado, al sur de la ciudad se encontraba Liam Payne, después de la muerte de sus padres y único heredero de toda la fortuna quedo como uno de los hombres más poderosos de esa parte de la ciudad. El sueño platónico de toda muchacha. Guapo, simpático, millonario y lo mejor de todo. Corredor de autos profesional.
Un hombre perfecto no había error en el pero la suerte en el amor no estaba de su lado, más el no buscaba, se sentía satisfecho con su vida y su estado sentimental.
Pero una noche como cualquiera podía cambiar el destino de ambas personas. Mientras que Liam se encontraba saliendo del club nocturno después de haber disfrutado una estupenda noche junto a sus amigos, Liv batallaba con la máquina de dulces para que esta cediera a dar todas las monedas que la gente había depositado en el día.
Liam caminaba por la acera su vista divagaba en toda la calle, hasta que por instinto quiso uno de esos chicles de bola que su difunta madre le solía comprar por montones. Sí que quería uno de esos. Viendo si ningún vehículo se aproximaba cruzo la calle a zancadas desesperado por llegar a aquellas máquinas y tener sus chicles.
Entro en el pequeño callejón donde estaban las maquinas, vio la primera la cual contenía caramelos, la segunda tenia pequeñas pelotas de gomas y por fin en la tercera los chicles. Pero se vio detenida su acción al ver como una pequeña individua forcejeaba la máquina, clara señal de robo. Frunció su ceño molesto por lo que la gente hoy en día hacía. ¿Por qué simplemente no se pone a trabajar y deja de robar? Pensó para sí mismo, si tan solo el supiera que jamás recibirían a una indigente.
-¿Terminas?- Pregunto para captar la vista de la chica ladrona. Enseguida Liv levanto su vista, no esperaba que la sorprendieran y menos robando. –Sabes, lo que haces no está bien.- Dijo el castaño haciendo que la rubia no le cayera nada bien su comentario.
-No sé quién eres pero más vale que salgas de aquí.- Exclamó Liv con ira ya de por medio. No es que ella tenía el mejor de los caracteres. Una chica rabiosa, nada mal para Liam.
-Con calma linda.- Bacilo Liam, en realidad le había agradado la chica a pesar de su apariencia, un bonito y blanquecino rostro decorado por ojos avellanas encantadores, pequeña nariz y labios anchos en diferentes grietas. Omitió la parte del piercing en su nariz. Su cabello trenzado de lado, color rubio con mechas de diferentes colores al final. Toda una rebelde por lo visto.
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Lost Dream (Pausada)
FanficAlguien de la calle sin expectativas de vida, robando apenas se le presente la oportunidad. Esa era Liv una chica sin rumbo alguno y el corazón tan fuerte como una roca, ¿qué pasa cuando encuentra a alguien quien ablande su corazón? La respuesta es...