-¿Quién eres tú?- contesto Isaac devolviéndole la mirada hostil.
-Soy su primo y futuro marido – dijo Dicaz recalcando la palabra marido
Isaac se tenso en el momento que escucho esas palabras, cuando Leila le conto lo de su madre, le hablo por encima de su familia y le dijo que había tenido un lio con su primo, pero no dijo que estaban prometido... ¿qué más le había estado ocultando?
Al oír esa palabra Leila despertó del extraño trance al que se había sumido al ver que los dos se miraban con esa intensidad, ¿Qué demonios les pasaba? ,… ¿había dicho futuro marido?
-E un momento, ¿Qué pasa con ustedes?- miro a ambos con cara de fastidio, cuando consiguió recuperar la atención de los dos, le dedico una mirada de hielo a Dicaz- ¿Cómo qué futuro marido?, que yo sepa, no estoy comprometida, es más ni siquiera tengo novio…- al ver que Isaac se relajaba un poco dio las gracias en silencio, pero se dio cuenta de que no sería tan fácil porque el que estaba tenso ahora era Dicaz. –Bueno, ¿Qué es lo que pasa? ¿Por qué estamos en peligro?
A Dicaz le dolió en el alma la negación de su amada, él ya sabía que sentía cosas por ese humano, lo había descubierto al ver como lo cuidaba después del accidente, aun así no se lo iba a poner fácil, no renunciaría a ella tan fácilmente.- Mi madre sabes que sigues viva, sabe que alguien de Blicos te está ayudando, he tenido que matar a dos guardias porque me vieron coger el collar, es cuestión de tiempo que descubra que falta…. Y…. Entonces ya no tendrá ninguna duda de quien es el traidor….
Realmente estaban en una mala situación, si le pasaba algo a Dicaz nunca se lo perdonaría, estaba empezando a admitir que sentía algo más fuerte por él de lo que creía en un principio, nunca pensó que sería capaz de hacer algo a espaldas de su madre, muchos menos que lo hiciera por ella…no podía dejarlo a su suerte…-¿Qué es lo que propones?
-Tenemos que derrotar a mi madre, hay que arrebatarle el reino.- dijo sin que levantando la cabeza y mirando con intensidad a Leila.
-¡Pero eso es imposible! , no somos nada más que tres, sin contar con que dos no tiene poderes….además ¿estarías dispuesto a matar a tu madre?, no creo que se conforme con estar en segundo lugar….- lo dijo sin pensar por eso la rápida respuesta de él la dejo helada.
-Si, por ti estoy dispuesto a cualquier tipo de sacrificio…
-No puedes estar hablando en serio…. No podría hacerlo ni yo – dijo Leila que estaba segura de que lo decía por el calor del momento.
-Entonces lo hare yo – dijo Isaac metiéndose en la conversación por primera vez.
Leila no tenía palabras, se había olvidado por completo de él, estaba tan inmersa en las palabras de Dicaz que no se acordaba que había otra persona en la habitación, otra persona que estaba dispuesto a morir por ella, porque estaba segura de que si se enfrentaba con su tía solo saldría un vencedor.
-No seas estúpido – dijo Dicaz – no tienes nada que hacer contra mi madre, ¡eres un simple humano!- se volvió para mirar a Leila- en cuanto a tus poderes, podemos recuperarlos, pero va a ser difícil
-No hay caso de que me hagas a un lado si van a pelear – dijo Isaac que se había puesto al lado de Leila- si ella está en peligro yo voy…
Dicaz estaba arto de ese humano estaba pensando en darle un puñetazo cuando Leila reclamo de nuevo toda la atención dando un grito.
-¡¡¡CHICOS!!! , si van a estar así me voy y lo hago todo yo sola, - miro a ambos Mosqueda – bien, ¿están de acuerdo en trabajar unidos?
-Si-contestaron ambos algo tensos
-Muy bien, no sé lo que vamos a hacer aún, pero hay una cosa que tengo claro, quiero mis poderes de vuelta, ¿Cómo lo hacemos?
-Veras, la poción que te quito los poderes, era de mi madre, cosa que ya sabíamos, pero descubrí el otro día que se la había entregado Hades, la había robado en una de las visitas a Ares, en estos momentos se juegan las triadas de Ares – miro a Isaac que escuchaba todo sin enterarse de nada- tú, humano, ¿no sabrás de que hablo, verdad?
-Pues no, la verdad, sé que uno es el dios del inframundo y el otro de la guerra, pero lo de las triadas es la primera vez que lo oigo…
-Veras las triadas son unos juegos que realiza Ares cada 3000 años para todo aquel que quiera entrar en su ejército, son unas pruebas realmente duras, en las que tienes que demostrar lo que vales, hay diverso tipo de pruebas y no sabes nunca lo que te vas a encontrar- dijo Leila con cara de preocupación- el problema es que para participar en las Triadas, se necesita una invitación
-¿Una invitación como esta?- dijo Dicaz, sacando un pequeño pergamino con el sello de un buitre, que es uno de los símbolos del dios de la guerra.
-¿Como las has conseguido?- pregunto Isaac, aunque enseguida quiso no haberlo hecho al ver la chispa de orgullo que reflejaban los ojos de Leila al responderle.
-Dicaz es el mejor guerrero de Blicos- dijo ella llena de orgullo y con una gran sonrisa
-Sí, pero tú eres la segunda, tampoco está nada mal – dijo Dicaz contento de que le hiciera caso – si hubieras entrenado un poco más me habrías superado, claro que yo siempre te gano en el cuerpo a cuerpo- dijo consciente del doble sentido de la frase
Al ver como Leila sonría por la implicación de la frase y le daba un pequeño puñetazo en el pecho, Isaac no pudo aguantar más los celos y decidió cambiar de nuevo la conversación, además de que se colocó en el centro de los dos para que fuera imposible que cualquiera se tocara sin pasar por él primero.- ¿Por qué hay que ir a ellas triadas?
-Porque así podremos colarnos en la tienda de Ares y robar el antídoto de la poción…- dijo este lanzándole una mirada asesina a Isaac por esa intromisión
-Este seguro de que Ares tendrá un antídoto, ¿Cómo lo sabes? dijo Isaac manteniendo el cruce de miradas.
-Porque esa opción era el castigo que se le hacían a los guerreros que se desprestigiaban en el combate, Ares pensaba que matarlos era hacerles un favor, por lo que les quitaba sus poderes y luego decidía su destino…
-Bueno – intervino Leila – seguimos teniendo un problema, solo hay una invitación, ¿Cómo haremos para ir todos?
Dicaz miro largamente a Isaac, no quería perder la car de este al escuchar sus palabras- ya que insiste en que el humano venga también se me ha ocurrido una idea, tú iras como mi amante y el cómo mi criado- dijo ensanchando su sonrisa todo lo que era posible.
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Bueno aquí os dejo otro cap.!!
Espero que so guste, en un principio Dicaz no iba a aparecer casi, pero me gusta como está adentrándose en la historia jejeje
Gracias por los votos y comentarios, me encantan...jejeje
No os cortéis en decirme lo que queráis, criticas, objeciones, sugerencias…lo que queráis!!
Besacos!!
