"Ángel"

Capítulo 22: "El Veredicto"

(Antepenúltimo capítulo)

Una bella pelinegra marcaba un número en su celular mientras se sostenía su vientre con una de sus manos.

Papá ven, creo que el momento llegó, decía Milk por su celular.

Hija tranquila, respira profundamente, voy para allá con el médico, dijo el padre de la pelinegra.

Minutos después:

Un helicóptero aterrizaba en la modesta cabaña donde vivía la pelinegra bajando de este el padre de la pelinegra, un médico y una enfermera.

Pasen, decía el gigantesco hombre al encontrar la puerta abierta.

Milk, hija, ya llegamos, decía el gigantesco hombre dirigiéndose a la pequeña habitación donde se encontraba una adolorida pelinegra recostada en su cama.

Puede espera fuera señor Ox, dijo el médico.

Está bien, dijo el padre de la pelinegra saliendo de la habitación mientras el médico examinaba a la pelinegra.

Ya esta por nacer, parece que tú pequeñito se te adelanto, dijo el médico sonriendo.

Pero estará bien, dijo Milk mientras unas lágrimas de dolor salían de sus bellos ojos negros por las fuertes contracciones que sentía.

Si, linda, tu solo relájate y colabora con nosotros, dijo el médico sonriendo.

Planeta Kaio:

¿Qué cosa dicen?, decía alarmados los Kaios del norte y sur.

Lo que oyeron, el tendrá un hijo con la terrícola, dijo Kamisama.

Eso es imposible, dijeron alguno de los presentes.

No, no lo es, dijeron Kaiosama y Kamisama.

Mientras la discusión sobre el caso de Gokú continuaba en el planeta Kaio, en la tierra una bella pelinegra traía al mundo a su primogénito ante la mirada consternada de la enfermera y médico que miraban asombrados al bello niño que tenía cola de simio.

Planeta Tierra:

Debe ser alguna malformación porque la niña consumió drogas, dijo el médico tratando de encontrar alguna respuesta a la cola del pequeño bebé.

¿Y qué hacemos?, dijo la enfermera.

El niño no tiene ninguna otra malformación y parece un niño normal, cortémosle la cola y solucionado el problema, dijo el médico mientras tomaba sus instrumentos para llevar acabo su procedimiento.

¿Cómo está mi bebé?, dijo Milk con voz débil.

Bien, es un bello varoncito, dijo la enfermera.

¿Está sanito?, ¿quiero verlo?, dijo Milk.

Si, si está sanito, solo nació con una extraña cola pero el médico ya se la está quitando, dijo la enfermera.

Milk sonrió al oír que su bebé nació con cola pues el joven de cabello alborotado le dijo que la gente de su raza tenían cola y esa era la prueba de que su bebé era un Sayajin como su padre.

Luego de algunos minutos la pelinegra recibió a su pequeño bebé envuelto en una pequeña colchita.

Mi bebe, dijo la pelinegra dándole un beso en la frente a la pequeña criaturita.

Es muy bello, dijo la enfermera.

Si, se parece a su padre, dijo Milk mientras unas lágrimas de felicidad resbalaban por sus blancas mejillas.