STAY WITH ME ›› ym

CAPÍTULO 12

Ocultó su sonrojo con su mano diestra, sin dejar de observar profundamente mis ojos.

Me dí el tiempo de apreciar la belleza de aquel chico que estaba provocando que mi corazón revoloteara más de lo normal al sólo sentir su presencia.

Esta vez, Yoongi fue el que unió nuestros labios en un húmedo –y delicioso– beso.

Comencé a mover mi cabeza debido al acto que estábamos realizando, no sin dejar desapercibido que estábamos el uno sobre el otro, y nuestros cuerpos estaban completamente el uno sobre el otro.

Nos estábamos besando, sentí que esta vez fue diferente, no el tipo de beso que se da incitando a una relación sexual. Sentía que podría pasar todo el día besando a Yoongi, sus labios eran jodidamente deliciosos.

Nos separamos por falta de aire, le sonreí e inmediatamente mi sonrisa desapareció al ver una silueta femenina observándonos.

—¿Qué mierda significa esto, Jimin?

Nos interrumpió, Yoongi me miró aterrado, nos pusimos de pie y escondí su delgado y débil cuerpo tras mi tonificada espalda.

—¿Qué es eso de que esa persona se trata de Min Yoongi? —se acercó, desafiante.

—Eunha, yo... —no pude continuar, ya que sentí un fuerte golpe rebotando en mis mejillas.

—¿Con un hombre? ¡¿Esto es en serio?! —sus ojos penetraban los míos intensamente, me quedé en silencio y recibí otro golpe— ¡Responde, Jimin!

—Las cosas se salieron de mis manos —tomé con fuerza la mano de Yoongi, preparándonos para huír de aquella terrorífica escena.

Yoongi tomó con fuerza mi diestra, entrelazó nuestros dedos y apoyó su cabeza en mi espalda, asustado.

—¡Suelta la mano de mi esposo! —gritó— ¡No puedo creer lo que estoy presenciando, Jimin!

—Créelo —certifiqué, encárandola.

—¡¿Con un pobre como este?! ¡Dios, no puedo creerlo!

—Yoongi no es ningún pobre, de hecho, si no estuvieras casada conmigo serías peor que un pobre, ¡Vivirías en la calle! ¡Todas las basuras costosas que tienes han sido pagadas con mi bolsillo! —recalqué la palabra bolsillo— ¿Pensabas que creí todas tus falsas historias de amor? ¡Es más que obvio que estás aquí por mi dinero!

El ambiente se volvió tenso, me miró ofendida, mientras que lágrimas comenzaron a brotar de sus ojos.

Caminé rápidamente, pero para nuestra mala suerte se interpuso entre nuestro camino.

—¡¿Dónde mierda crees que vas, Park Jimin?! —tomó mi brazo, con el intento fallido de atraerme a su cuerpo.

—¡Cualquier lugar es mejor que esta mierda! ¡Cualquier jodida cosa es mejor que tú! —jalé mi brazo, ella calló al suelo y corrí por las escaleras junto a Yoongi, él estaba hecho un mar de lágrimas, una escena que hizo que mi corazón se rompiera en mil pedazos. Corrimos aún más rápido al escuchar un fuerte disparo proveniente de la misma habitación

Finalmente llegamos hacia el auto, tomó asiento y rápidamente comencé a manejar sin rumbo alguno.

—¿Te sientes bien? —pregunté, no recibí respuesta y comencé a preocuparme.

Era como un niño pequeño, y eso me encantaba. Quería que se sintiera seguro conmigo, que jamás le pasaría algo teniéndome a su lado, pero ahora mismo no me lo demostraba.

Su piel palideció de una manera impresionante.

—Yoongi, ¿estás bien?

—J-Jimin... —rompió en llanto, las lágrimas se escurrían por sus mejillas de una manera impresionante, sollozó.

Tomó una bocanada de aire, para luego posteriormente levantar su mano de su espalda, ensangrentada.

—¡Yoongi! —me exalté y abrí los ojos como platos, aterrado.

Rápidamente manejé hacia un hospital cercano, para mi buena suerte aún no salíamos de la ciudad.

—¡Por la mierda! —grité al ver que no podía encontrar ningún estacionamiento— toma mi mano, todo estará bien.

—N-no quiero... —aclaró su garganta, lentamente entrelazando nuestros dedos— ser una —toció un líquido rojo y comencé a entrar en desesperación— carga para... tí.

Sus palabras rompieron mi corazón, yo lo quería, haría lo posible por su bienestar, rogaba a el de arriba que pudiera recibir la asistencia para su salud

Tomé su delicado cuerpo y lo subí a mi regazo, miré su espalda y efectivamente su camisa estaba decorada con horribles y terroríficas manchas rojas.

—¡Ayúdenme, por favor! ¡Esto es una emergencia!

Comenzó a cerrar sus ojos, lucía cansado y su respiración poco a poco comenzó a demorarse más de la normalidad.

—¡Santa mierda! ¡Qué pasa con los putos médicos! ¡Mi novio está gravemente herido!

Pude ver que delicadamente los labios de Yoongi sonrieron delicadamente al escuchar la palabra novio, a duras penas acarició mis dedos.

Un médico corrió hacia mi, su asistente llevaba una camilla y con delicadeza recosté su delgado cuerpo, comenzamos a correr hacia un pasillo completamente blanco, hasta que llegamos a una gran puerta, todos se encaminaron rápidamente.

—¡Señor, usted no puede pasar aquí! —me gritó, al ver que estaba golpeando la puerta con desesperación.

—Confíe en nuestros especialistas, él estará bien —dió dos palmadas en mi hombro al ver que había reventado en llanto.

Subió su mascarilla facial ocultando la mistad de su rostro, mientras que señaló un par de butacas a fuera de la habitación donde se encontraba Yoongi.

—Tome asiento, puede esperar aquí