STAY WITH ME ›› ym

CAPÍTULO 28

Y así pasaron toda la mañana, descansando, y el que más disfrutó fue Jimin, pues no había podido conciliar el sueño durante toda la noche, pensando en todo lo que estaba pasando, en que cada día su amor por Yoongi iba creciendo más y más. Lloraba al saber que su meta estaba cumpliéndose, porque estaba enamorándose más de él, porque lo tenía tan cerca y su compañía ya era algo que deseaba con frecuencia, le faltaba el aire cuando no le tenía cerca, y sus brazos se sentían tan vacíos sin una pizca de Yoongi.

Hoy tenía planificado el ir a la terraza y poder charlar mirando el amanecer, cantar un par de canciones romanticonas con su guitarra, moviendo los dedos sobre las cuerdas tocando preciosos acordes a la par de su voz liberándose al viento, soltando tantos sentimientos y frustraciones, pues se avergonzaba cuando alguien le escuchara cantar, pero si iba a querer a Yoongi a su lado, debía mostrarle todo lo que podía hacer, pues con secretos las cosas no van bien.

Preparó una canasta con algunos panecillos de vainilla, frascos con fruta fresca, como fresas y manzanas en cubitos, unas mantas, jugos y cafés con leche. También sándwiches de lechuga con pollo a la plancha, todo muy sano para que no afectara con el tratamiento de Yoongi. Pues Chanyeol le había contado que todas las noches recibía dosis de analgésicos por las agujas clavadas en sus manos, aquellos ayudaban a que la herida interna que ya estaba casi sana pudiese curarse por completo. Y todo eso, por supuesto lo preparó, con mucho amor. 

—Buenas tardes estrellita —el mayor despertó y Jimin le zarandeó un poquitín para poder explicarle lo que harían hoy.

—¿Tardes?

—Mira la hora, son las 12:06, ¿tenías sueño?

—Oh, tan rápido...

—Yo debería dormir más que tú, ¡tú duermes todo el día aquí!

—Últimamente no —contestó y el menor enmarcó una ceja— Jiminnie me quita el sueño.

—Eres un mentiroso, te he visto dormir plácidamente todos los días, ¡Yoongi es un mentiroso! 

—¿Q-qué? —sus mejillas pálidas tomaron un cálido y atractivo color rosa.

—Lo que escuchaste, no me voy de aquí hasta que ya estás dormido.

—¿P-por... qué?—la timidez le invadió y su lengua se trabó, sí era verdad que le quitaba el sueño, pero debido a los medicamentos que recibía y que no tenía idea de ello, podía dormir toda la noche.

—Sólo es para asegurarme de que estés bien...—agitó su cabello con su mano y sonrió— Chanyeol dijo que hoy tenías una hora con el doctor, ¿quieres que te acompañe?

—Si no es mucha molestia, s-sí...

—No te pongas humilde —le golpeó despacio y sonrió— sé que te mueres sin mí.

—Sí —el menor le miró con entusiasmo y tomó su mano con fuerza— moriría de aburrimiento, ya me acostumbré a tu compañía...

—Ah, lindo —besó su frente— hoy tengo algunos planes, traje a Young Mi conmigo.

—¿Y-Young Mi? —¿a caso había escuchado bien? ¿una... chica?

—Mi guitarra, claro —avergonzado miró al suelo, ¿era raro el que llamara a su guitarra como un humano? pues para él no lo era, porque Young Mi le acompañaba en sus días más solitarios brindándole la acústica más preciosa dentro de sólo seis cuerdas, un par de movimientos y presiones que ocasionaban sus dedos.