CAPÍTULO -27-

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Encontramos ya en la ciudad principal de Sindria a Erza y su equipo. Todos se habían dado cuenta del ruido proveniente cerca del castillo y sin dudarlo un segundo empezaron a correr hacía allí.

Gray visualizó a Natsu y a los demás en posición de batalla, debatiendo, mas bien gritando a "esa nube", al humo negro que había visible para todos.

-¡Natsu!, ¡Lucy!, ¡chicos! -gritaba a la vez que se acercaban a su posición.

-¡Gray! -gritó sorprendido- ¿que hacéis aquí? -preguntaba Natsu.

-Que mas da eso ahora, que esta pasando -gritaba a duras penas Juvia, intentando no atragantarse con en humo.

-Vaya por dios, mas de..."vosotros" -comentó la chica detrás de la nube, dando acento de asco al decir "vosotros"- ¡acabemos con esto ya! -la nube empezaba a abrirse.

Todos empezaron a toser y a taparse los ojos, pues el aire ya estaba contaminado y el humo les dañaba y no les dejaba respirar bien. De la gran nube negra, se pudo empezar a ver una larga cabellera roja carmesí. Piel muy pálida con cicatrices muy dolorosas a la vista, parecía como si le hubiesen estado torturando. Sus ojos no eran corrientes, eran los de un demonio, color dorados y verdes a la vez. De su boca salían dos colmillos afilados, y de su espalda unas gigantescas y llamativas alas de piel de dragón.

-Q-que...-empezó a tartamudear Kougyoku.

-...es eso...-terminó la frase Lucy.

-No puede ser... -balbuceo atónita Erza.

-¿Erza, que ocurre? -preguntó Jellal observando la mirada de Erza pegada al demonio.

»Cazadores De Princesas« ¡TERMINADA! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora