El presente es el futuro del pasado [khr]

Cap.12

El décimo paso su mirada por el rostro a su lado, relajado, eso fue lo primero que se le vino a la mente. Ya pasaron dos meses desde que la carta de Sharon llego a la mansión. Solo están esperando que la otra carta con la dirección del lugar llegue.

Oz a estado tan calmado y sereno, sumándole extremadamente feliz. Entre ellos no cambio nada, lo que es bueno, Tsuna apoya el hecho de que valla a ver a su familia. Después de todo los creía muertos hasta hace dos meses. 

El embarazo va bien, ya en sus cuatro meses la pansa ya se nota bastante, claro, tiene tres bebes en camino. La familia Vongola lo consiente mucho y sus aliados también, como Shimon, Dino, Varia y Byakuran ¡Hasta apareció Vindice!

El milagro de todo es que los cambios de humor todavía no aparecieron, aunque los antojos del doncel embarazado si que son de lo mas extraños. Para cuando nazcan sus hijos su madre ya abra probado distintas combinaciones de comidas, de todo tipo, hasta las que nunca se deben juntar. 

Paso su mano por la mejilla del otro, acariciando la piel y sacando en el proceso un mechón de pelo rubio. El volvió a tener su pelo castaño, ya no es rubio. Cierta parte de el extrañaba su color de cabello original, no, realmente lo extrañaba. Porque ese es el, Sawada Tsunayoshi. 

Al parecer si tienen problemas con los nombres, como dijo Reborn. Eso hace que se ria, pero para ellos dos los nombres son realmente importantes. Son ellos mismos con su verdadero nombre. 

-¿Pasa algo? -pregunto una voz, agarrándole su mano con suavidad. 

Levanto su mirada, dejando que su cabeza caiga mas en la almohada y una sonrisa se lineara en sus labios, negando con la cabeza. Oz con la mirada un poco adormilada beso la mano del castaño, paso una mano por la nuca del otro y lo acerco, besando sus labios esta vez. Paso unos segundos bastantes largos hasta que el rubio soltara a Tsuna. 

-¿Y eso? -pregunto el castaño, tratando de recuperar su respiración. -Te levantaste de buen humor. 

-Humn, si. -sonrió de costado, abrazando contra su pecho al décimo oliendo el aroma a vainilla. -Hoy tenemos que ir al doctor, para el chequeo.  

-...- el silencio que Tsuna hizo que el rubio lo mirara. 

-Tsuna... 

-¡Hay por favor! Estoy bien, no hace falta que valla al doctor. - se quejo haciendo pucheros. -Vamos Oz, no quiero ir~ 

Esto va hacer complicado. 

*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*

-¡UWAAAAAAAAAAAAAAAAAA! ¡No quiero! ¡No quiero! ¡No quiero ir~! ¡UWAAAAAAAAAAAAA! 

Todos en la mansión veían como el décimo se aferraba a la puerta principal de la mansión con ambas manos mientras llora. Todos los guardianes y Oz tratan de que suelte la puerta pelo este solo los patea en la cara o llora mas fuerte, ignorándolos. 

-¡No quiero ir! ¡NO QUIERO! -Lloro mas fuerte. - ¡Solo me van a decir que estoy bien y que siga como estoy! ¡¿Para que ir?! -les grito girando su cara para mirarlo. - *Sniff* No *Sniff* quiero *Sniff* ir

-Vamos Tsuna, mientras mas rápido lleguemos mas corta es la revisión. -dijo Oz suavemente, el nombrado se giro a verlo. - Tenemos que ver si nuestros hijos esta creciendo bien. 

-*Sniff* - hizo puchero y dijo algo en lo bajo. 

-¿Que? -preguntaron todos. 

-Mis hijos están bien. -dijo. - ¡Confirmado por la super intuición! -y con eso...

-Bien, entonces, no hace falta el doctor. -soltó Oz, dejando las piernas de Tsuna (anteriormente estaban tratando de que el castaño suelte la puerta) 

-¡Oye! -gritaron todos. 

-¿Que? -pregunto Oz. -Es confirmado por la super intuición 

-Confirmado o no, tiene que ir a un doctor. -hablo Reborn. -Prepárate Dame-Tsuna, en 5 minutos nos vamos a un doctor. 

-¡NO QUIERO IRRRR! 

*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*

-No lo digas. 

Fue lo único que dijeron todos una vez que salieron del departamento de Shamal, Tsuna los mira con una sonrisa superior y con los brazos cruzados. Oz camina abrazando por detrás al castaño, con su cara en el hombro. 

Los bebes tiene un crecimientos bastante bueno y sano, el cuerpo del décimo se esta adaptando a esto de manera sorprendente. Por lo general el cuerpo de un doncel tiene una etapa donde rechaza a los bebes por mas que su cerebro acepte a idea, es casi como un aborto forzado. 

Es la etapa mas horrible. 

~Flashback~ 

Las lagrimas de cocodrilo salen de los ojos de Tsuna e inflo sus mejillas, Shamal mira eso con una gota en la sien. 

-Bueno, es el cuarto mes del embarazo. -hablo revisando los papeles. -los bebes están bien, hasta ahora no tienen ningún problema. Lo que es muy bueno es que el cuerpo del Decimo no los rechazo. 

-¿El cuerpo de Tsuna rechazando a los bebes? -pregunto Oz, sentado al lado del castaño. 

-Si, verán, el embarazo de un Doncel es bastante complicado, ya que son hombres con capacidad de dar a luz. -comenzó. - Por ende, el mismo cuerpo los puede rechazar, aunque la mente del Doncel los acepte es muy posible que el cuerpo no. 

-Eso significa que yo... -hablo Tsuna. 

-No, ya no puede ocurrir. -dijo Shamal para tranquilizarlos. -Solo ocurre antes del segundo mes, tu tienes cuatro meses y una semana, básicamente este "rechazo" es como un aborto forzado. La etapa mas horrible de todas. 

El rubio y el castaño suspiraron aliviados, mirándose con una sonrisa.

-Aunque por ellos pueden a ver unos cambios. -llamo la atención Shamal. - Puede venir primero los cambios de humor o el apetito sexual, la comida tiene que ser balanceada, no importa que sea antojos. El Décimo puede subir de peso y eso es malo. -se atrevió a decir. -Hay veces que le tiene que decir que "No", porque no es solo por su bien, sino también de los bebes. 

-Humn. -asintió con la cabeza Tsuna, Oz anota todo en su libreta. 

~Fin del fashback~

En este momento el castaño se encontraba muy cariñoso, diciéndole a Oz que lo acaricie (N/A; No esa "clase" de caricias, pervertidas XD) cosas que el rubio hace sin decir nada y con una sonrisa en la cara, besa sus labios y por todas partes de su cara, también revuelve sus cabellos. 

Todo eso hace que el décimo ria angelicalmente y sonrisa cálido. Mientras que ellos dos tienen un aura color rosa, los demás esta tratando de no mirar y apartan su cara para otro lugar.

-Por cierto Oz. -dijo Tsuna. -Todavía no tenemos las cunas. 

-Eso lo vemos mañana, tienes que descansar. -dijo abriendo la puerta de la limusina, viendo como los ojos color miel de Tsuna se cerraban de a poco, lo agarro como una princesa y lo llevo asi. 

Después de todo, Tsuna y el antes de que se reunieran con los Vongola tuvieron un entrenamientos que nadie sabe. Son muy fuertes. Así como el hecho de que el rubio puede usar las llamas de la ultima voluntad, gracias al castaño dormido en sus brazos. 

-Lloro mucho, es lógico que se cansaría. -pensó besando su frente. 

Continuara...