Jefe.

El es mi ...

Mis padres por Gloria de el señor, quiso que vinieran a este lugar, cuando apenas íbamos a actuar frente a personas x, pero no! Dios quiso que nos saltáramos hasta la prueba de fuego, mi mamá me conoce demasiado bien y sabría si le miento y eso da miedo, y pues papá... Papá siempre me ha protegido, una vez cuando entre a bachillerato contrato a un guardaespaldas para que ningún chico se me acercara.
-Mi niña hermosa! -dice mamá
-Hola mami! -dije mimadamente.
-Princesa, como estás? -dijo mi padre con una sonrisa plaasmada en su cara, pero se le borró al ver a Jake atrás de mi. -Quién es el? -dijo serio.
-Edward! -lo riñó mi madre.
-El es mi...- dije un poco nerviosa, pues no sabía si decir prometido o novio.
-Su novio, mucho gusto mi nombre es Jake Lonsen. -dijo Jake animado y extendiéndole una mano a mi papá pero el ni se inmutó entonces mi madre lo empujo para poder ver a Jake y abrazarlo.
-Mucho gusto Jake mi nombre es Elizabeth.
Jake estaba sorprendido pero después abrazó a mi madre.
-Tomen asiento, por favor. -dijo Jake
Ellos se sentaron, pero mi padre seguía teniendo su cara seria, como si analizara a Jake con tan solo verlo, hasta que entre cerro lo los ojos y preguntó.
-Espera.- todos lo miramos atentos. -Lonsen? Hijo de Ellen Lonsen y Marck Lonsen?
-Ah... Si. -dijo Jake
-Yo hice trato con tus padres y aparte ellos me ayudaron a salir de unos problemas con sus contactos.
De pronto mi papá se queja y soba su pie, mi mamá me da una sonrisa y ve a Jake como si le hablara y este niega con su cabeza.
-Acaso ya se conocían?
-No. Dicen en unísono.
-No te puedo mentir amor, así que si, nos conocíamos porque una vez fueron a la empresa, pero no nos habíamos presentado, sólo los vi.
-Oh bueno.
Me miran aliviados, lo que me hace dudar demasiado.
-Qué sucede? -Dije un poco alterada, pero no tanto.
-Nada. -contestan en unísono. Levanto una ceja y me cruzo de brazos.
-Nada amor, enserio. -dice acariciándome una pierna, lo volteo a ver. -luego lo hablamos.
Asiento y volteo a ver a mis padres y ellos me dedican una sonrisa.
Y así pasó nuestra tarde no tuvimos que ir a verlos a su casa, creo que ya habían pasado horas, estaba todavía el Sol en su mero punto, estábamos pasándola bien, mi madre y mi padre contaban historias de como era de pequeña y Jake sólo los miraba atento, de vez en cuando me veía y me dedicaba una sonrisa.
Todo estaba perfecto hasta que llegó una persona, la cual yo desconocía y se acercó a Jake a decirle algo en si oído.
Lo vi asentir y luego fruncir su ceño y apretando demasiado sus labios. Asintió de nuevo terminando la conversación con el hombre.
-Tenemos que irnos.
-Enserio? -pregunta mi madre, lo cual hace que Jake tranquilice su cara, de tan tensa que la tenía.
-Si, mil disculpas pero surgieron unos problemas y debemos irnos.
-Esta bien. -dijo mi padre poniéndose de pie. -Fue un gusto.
-El gusto fue mío.
Nos despedimos de todos y Jake y yo salimos del bello restaurante no sin antes pagar claro.
Nos subimos en su coche y el me abrió la puerta rápidamente dejándome pasar y luego el entro en el coche
Puso el carro en marcha y aceleró, manejaba muy rápido, hasta que llegamos a la empresa. Frenó de golpe, y me estampe en el mueble del coche.... Cómo se llamaba? Ah, no recuerdo Concentrarte te golpeaste la cabeza, imbécil!
-Maldición! -digo cuando mi cabeza va golpeando el mueble y eso que traía cinturón.
-Mierda! -exclama Jake un poco asustado.
-Duele como el infierno Lonsen!
-Lo siento. -dice como si lo hiciera, aunque más bien su tono era de burla.
-Déjalo así, pero a la próxima que te vayas a disculpar, no te burles de la persona. -Dije eso abriendo la puerta y saliendo del carro, cerrando con broche de oro, dando un portazo, mientras me sobaba la cabeza.
Salgo de ahí y entro a un paso apresurado hacia las enormes puertas del edificio.
Cuando veo a un paparazzi en uno de los arbustos con sus cámaras dirigida a mi, apresuró el paso, aunque el camino se me hace demasiado largo y más con tacones, no dudo que el periodista haya visto el golpe que me sampé.
Escucho como Jake dice mi nombre y lo ignoro.
-Mack! Hey Mack! Espera, es que jajajaja, lo siento enserio nena. -dice tratando de controlar la risa, lo que me enoja más y hace que apresuré más de lo que mis zapatos podían, aparte de su voz escuchaba el cartucho de la cámara.
-Oh apartate de mí! -grité. -Por qué carajo el camino del coche a él edificio es largo? -digo exaltada y escucho la carcajada de Jake y eso me saca un leve sonrisa.
-Nena! Lo siento si! Jajajajajaja no te vayas a caer con esos tacones, quién te manda a ponerte unos tacones tan altos?
-Ah dejarme pensar.... Tú?! Aparte no te importa si me caigo o no. Maldición, porque te estacionaste tan lejos!
-Siempre me estaciono ahí, relaja tu paso, te tropezarás.
-Como si te importará. -digo sarcástica.
Veo como el paparazzi se acerca, pero se esconde. Ja! Chismoso!
-No lo repetiré Lonsen aléjate.
-No! -Dice burlón.
Cuando ya veo las puertas más grandes corro y mi pie se dobla o creo se rompió el tacón. Espero que ese crujido haya sido el tacón. Sólo espero el golpe o el impacto al suelo pero no llega. Lo único que siento es un enorme abrazo en mi cintura y otro en mi brazo sujetándome.
-Te lo dije! Morrel.
-Cállate.
-Ves ese fotógrafo? -susurra en mi oído.
-Si, vamos a darle un buen espectáculo.
-Mejor que el que hiciste con tu casi caída no creo.
-Cállate y bésame.
-Usted señorita Morrel es una atrevida.
Me abalanzó sobre él besándolo, haciendo que pierda el equilibrio y caiga conmigo al suelo.
Reímos, nos levantamos y entramos al edificio tomados de la mano.
Lucíamos como una verdadera pareja.
Me encantaría que algún día eso pase, que él se enamore tanto como yo lo estoy de él.