Jefe.

Retándonos.

Mackenzie.
Después de que Liliana se fue y me dejó con la gran caja y literalmente en shock. Jake y yo estamos de camino a casa, pero estábamos pensando en ir a comprar un par de botellas e ir a beber un rato pero ya en casa.
Bajamos del auto y con una mano en la cintura, sujetando mi vestido para que no se volará, Jake caminaba y yo sólo iba pegada a él, esta sensación que tenía era un tanto linda, me sentía segura y querida, aunque solo fuera como amigos, pero para mi era mucho más.
Entramos a la licorería y había un grupo de señores viejos y unos cuantos jóvenes que la verdad para mí gusto no me daban buena espina.
Nos encaminamos al mostrador y siento la mirada de todos ellos en las partes transparentes  del vestido, al parecer Jake se percata y aprieta más su agarre sin  lastimarme claro.
-Buenas noches en que puedo ayudarlos? -Dice una chica con voz aguda parpadeando casi cada milésima de segundo mirando a Jake. Ash!
-Buenas noches, quiero que me dé 4 botellas de sus mejores vinos. -dice Jake un poco demandante.
-Enseguida muñeco. -dice con un intento de tono seductor pero parece que sería su voz cuando la este estrangulando. Zorra.
Reviro los ojos y al parecer Jake se percata y me gira rodeándome en sus brazos, hago lo mismo y cuando viene la chica con unos pasos que cada que da uno mueve sus caderas exageradamente.
Le sonríe a Jake y el voltea a verla pero yo agarro con mis manos su cara y lo beso, el me sigue el beso y yo también, volteo a ver a la chica que al parecer se llama Briget y ella me ve mal.
Me separo de Jake y sonrió triunfante.
Cuando termina Jake de haber pagado las botellas cuando pasamos por donde estaban los hombres, ellos empiezan a aplaudir, lo que me detiene y miro confundida a Jake. Uno de los hombres gritaba.
-Al fin te pusieron en tu lugar Briget.
Todos se empezaron a reír. Lo cual me provocó risa y a Jake igual.
De camino al coche ya no corría tanto aire, quité la mano de Jake en mi cintura y el me vio confundido.
-Ya no hace aire y recuerda somos sólo amigos. -digo sarcástica.
-Amigos comprometidos. -dice levantando mi mano y mostrando el anillo.
Nos metemos al coche y una vez que el entra habla.
-Hagamos un reto, mi hermana no va a estar durante 2 semanas y tenemos la casa sola. -creo que ya se a donde va, al parecer Lili y Will tenían un plan. -Te reto a que te llevo yo primero a la cama, que tú a mí. -suelta sin más.
-Qué? -dije perpleja.
-Lo que oíste.
-Esta bien. -digo mientras el maneja. -Entonces dormiremos en la misma habitación no? Digo para facilitarnos el trabajo. -le digo mientras le acaricio su cuello, lo cual hace que el trague.
-Eres una tramposa. -dice jadeante mientras apaga el motor.
-Oh señor Lonsen, acaso existen reglas en este juego. -digo mientras me siento en sus piernas.
Acomodo mi vestido por donde está el y recargo mis manos por su cuello.
-Señorita Morrel, usted es una atrevida. -dice agarrándome de un muslo. Oh no querido, yo ganaré.
-Claro señor, sólo que...-abro la puerta del carro. -El reto deberá empezar mañana, ya que hoy estoy demasiado agotada.
Digo y sin más salí del carro, dejándolo  tal vez con un gran problema entre el y su amigo.
Subo las escaleras de la mansión y me dirijo a su habitación de el, ya que no dormiré en la mía.
Busco entre los pasillos su habitación y entro en ella dejando la caja de la lencería en la cama.
Su recamara es muy elegante, muy él.

Me meto a bañar y cuando salgo Jake ya está en la habitación.
Agarro la caja de Lili y la meto al baño.
Entre todos los brasieres que hay elijo uno, el menos escotado que hay, ya que al parecer no había mucho que elegir.

Me coloco un pans gris y salgo del baño.
Jake esta acostado en la cama con su iPad en la mano.
Me voy al otro lado de la cama y me acuesto cubriéndome con la suave sábana las piernas.
Veo de reojo a Jake y el me está viendo con una mirada de lujuria?
-Mackenzie. -dice divertido.
-Si, Jake. -digo mirándolo inocentemente.
-El juego empieza mañana, no hoy en la noche.
-Cariño, son las 12:00 a.m. felices juegos del hambre y que la suerte siempre este de tu lado. -pronunció mientras me acerco y le doy un casto beso,  dándome la vuelta lo más rápido que puedo, pero el fue más rápido y me agarró del codo dejándome en su pecho abrazada de su magnífico torso perfectamente marcado.
-Duerme bien, Mack. -fue lo último que escuché antes de caer en un profundo y cálido sueño.
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La mañana siguiente...
Mis ojos se abren lentamente tratando de acostumbrarse a la luz.
Lo primero que veo es... Un cuello?
Elevo mi mirada y veo al hombre más guapo que he visto en mi vida.
-Buenos días. -digo en un susurro mientras le acomodo su cabello.
Se mueve y hace un ligero puchero que lo hace ver tierno.
-Despierta!
No se mueve y al parecer tiene un sueño muy pesado.
Me quedo pensando un rato para ver cómo lo voy a despertar, hasta que se me ocurre una idea.
Me zafo delicadamente de sus brazos y me acerco de nuevo pero esta vez a su oído.
-Sino te levantas, yo ganaré el juego, porque puedo tener sexo contigo justo ahora.
-Sabías que sueles ser terriblemente seductora a veces?
-Jake, yo soy hermosamente seductora. -después me bajo de la cama y me meto a la ducha.
Mientras me quito el brasier de encaje, la puerta se abre pero la detengo antes de que se abra por completo.
-Jake! -grito.
El se ríe como si esto fuera una maldita broma.
-Puedo ducharme contigo?
-Claro que no! -digo y le azoto la puerta en la cara.
Abro la regadera y espero a que este en una temperatura razonable, después de haberla tanteado un par de veces me introduzco en el pequeño cubículo de la regadera.
Me empiezo a hacer todo el proceso de limpieza cuando la cortina del baño se abre.
-Lo siento, es que si me baño después no nos va a dar tiempo de ir a trabajar.
-Sabes que en el reto, no puedes llevarme en contra de mi voluntad verdad? Osea violarme. -Me ve incrédulo.
-Qué? Hace unos minutos tu me ibas a hacer eso.
-Claro que no! Sólo era para que te levantarás.
-Bueno da igual, por cierto lindos pechos.
-Jake! Fuera!
-Mackenzie! No! -dice arremedandome.
-Bien, yo me iré.
Sólo a ti se te ocurre hacer un juego con él.
Te importaría conciencia? No te necesito ahora.
Bueno...
Dios! Al parecer esto no será nada aburrido.