32. Debes dejar de hacer eso

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Lana

Estaba terminando mi día en la convención. Sean y Bex se acercaron para que fuéramos al bar del hotel en la noche y pasáramos un rato agradable, estaban muy insistentes...

-Anda Lana vamos a divertirnos un rato- insistía Bex, casi no la había tratado pero sé que es una buena persona y no me desagrada.

-¿Entonces?- cuestionaba Sean, me quería divertir esa noche pero sabía que algo pasaría, es sólo que no me quería arrepentir...

-Esta bien vamos, sólo un rato ya que mañana tenemos que estar temprano en el panel- dije para poder salirme de ahí.

Fuimos a comer a un Restaurant que está a espaldas del hotel, era muy acogedor y la comida es simplemente deliciosa; después de charlar un rato, nos fuimos a cambiar cada uno a sus respectivas habitaciones; quedamos estar listos a las 7:00 p.m. Bex bajaría por nosotros. Llegué a la habitación y aún faltan 3 horas para salir, recogí mi cabello en un moño, me desvestí y puse una bata mientras preparaba el jacuzzi, no había muchos aromas así que elegí lavanda; programe una alarma para que sonara dentro de hora y media, puse el reproductor y me relaje mientras Adele llenaba la habitación con "Make you feel my love". Todo estaba perfecto hasta que mi cabeza comenzó a pensar en la alucinación que tuve en el avión, me sentí frustrada, yo jamás me quedo con ganas de nada y mucho menos si se trata de sexo. Salí de la bañera no podría soportar un minuto más ahí excitada, y la verdad no tengo ganas de darme placer yo misma, necesito algo más. ¡"A Sean"! Grita mi cabeza, ¡Si claro como si Sean fuera a engañar a su mujer conmigo! Y de nuevo me siento molesta, me dirijo hacia la habitación, subo las maletas y comienzo a sacar ropa, debo de ocupar mi mente en otras cosas. Después de tanto cambio de ropa me decido por unos unos jeans negros y una blusa blanca un poco pegada; me arreglo un poco el cabello y pongo algo de maquillaje muy ligero, no iré a una fiesta así que creo estaba bien. Estaba a punto de sacar mis zapatillas cuando tocaron a mi puerta, miro el reloj y es tardísimo, abro y ahí esta él. Muchas veces me gustaría ser hombre, se arreglan muy poco y se ven increíbles, la prueba viva la tengo delante de mí, Sean se ve exageradamente sexy, lleva el cabello despeinado, jeans y una playera azul marino que hace que sus ojos se vean más profundos. Y me está mirando de esa maldita manera que me derrite.

-Hermosa como siempre- dice en un susurro

-Gracias, pero no es para tanto sólo algo casual- me hago a un lado para dejarle entrar

-Pues con cualquier cosa te veo hermosa- siento como me sonrojo y... diablos se esta acercando, siento como mi corazón late muy rápido pero no me muevo. Esta parado a unos centímetros de mí, toma mi rostro en su mano y no puedo evitar dejarme llevar por el tacto, se acerca más y nuestros labios están a punto de rosarse cuando una voz nos interrumpe...

-¡¡Por fin los encuentro!!, ¿ya están listos?- es Bex que va llegando en este momento, me sobresalta, estoy a punto de empujarlo pero él reacciona antes

-Déjame ver si la veo- me dice mientras revisa mi ojo derecho -Hola Bex- dice cuando la pelirroja esta al lado de nosotros, yo ni siquiera me había dado cuenta que se había acercado, estaba perdida en sus ojos... -Es que Lana tiene una pestaña en el ojo- le dice con un poco de nerviosismo -¿Mejor?- me pregunta, y yo apenas entiendo el juego
-Si claro, voy por mis zapatos ahora regreso- corro a la habitación.

Esto es lo que temía, teniendolo tan cerca no puedo controlarme, creo que está claro, aún que hablemos mil veces es un peligro que estemos cerca y sobre todo solos...

-Listo chicos vámonos- salgo de la habitación y ellos ya están en el pasillo; tomo el teléfono y la llave; los guardo en las bolsas del pantalón y nos dirigimos al elevador.

Llegamos y tomamos una mesa, no tenía ganas de beber así que pedí una limonada, pero Bex tenía otros planes por que pidió una botella de tequila
-¡Oh vamos Lana, no hemos venido a aburrirnos, te creía más divertida!
Me guiñe el ojo y es todo, tiene razón hemos venido a divertirnos y convivir.
-¿Crees que no soy divertida? Ya lo veremos...
La velada es amena, Bex y Sean son muy divertidos, la botella está menos de la mitad y los tres estamos más que alegres, todo transcurre tranquilo, entre chistes y bromas, la estaba pasando realmente bien.

-Bueno chicos voy al tocador ya regreso- dice Bex levantándose

Un silencio nos invadió por pocos segundos hasta que Sean habló.

-¿ Y bien? ¿Te gustaría bailar? No soy muy bueno pero creo que tampoco soy tan malo- me guiñe un ojo y asiento.

Toma mi mano y lo jalo a la pista.

Y ahí estábamos ambos bailando, los dos solos de nuevo, la estaba pasando realmente bien cuando sonó una canción que me gusta "Something in the wat you move", y parece que toda la letra se aplica al momento. No sé si es la neblina que habían puesto, lo tomada que estoy (aunque realmente ni siquiera estoy mareada) o que realmente él me atrae muchísimo pero quería olvidarme de todo y entregarme a este hermoso hombre que baila junto a mí, lo tenía decidido y era lo que quería. Me acerqué más hacia él, quería tener más contacto con su cuerpo, pase mis brazos por su cuello y pegue nuestras pelvis. Parece que el también se siente igual, me estrechó más contra su cuerpo, bailamos y yo movía mis caderas haciendo presión contra el.

Acercó su boca a un lado de mi oído y emitía leves gemidos, mientras le cantaba al oído la canción y bailamos, ninguno de los dos es muy bueno bailando pero nos coordinamos muy bien.

-Lana... Ya no puedo, debes dejar de hacer eso, por qué en verdad me estás volviendo loco- dice con la voz entrecortada.

-¿Hacer qué? - me doy la vuelta y pego mi trasero a el.

-¡Lana...! - toma mi cadera y la aprieta contra el.

Subo mis brazos y los paso alrededor de su cuello, mientras arqueo mi espalda.

-¡Diablos Lana! - gruñe, y me suelta mientras me da un leve empujón.

Veo cómo se aleja, pero me ha dejado con ganas de más, más de él, más de esto. Estoy muy excitada, lo necesito. Voy tras él, se va por el pasillo y sube al ascensor.

-¡Sean! - alcanzó a entrar y él se pega a el otro lado del elevador.

-Lana... Por favor...

-¿Por favor que? - me acerco y el sube una mando indicándome que me detenga.

-¿Por favor que?, Lana... Has estado jugando entre tanto tira y afloja ya no sé qué quieres, en el avión me dices que amas a tú marido y ahora lo único que sé es que me vuelves loco... Y siempre me dejas con ganas de más, todo comienza bien y cuando estamos a punto de pasar a algo más, tú siempre lo detienes; te entiendo estas casada y yo también. Pero esta situación me está cansando.

-¡Pero te quiero a ti! - sus palabras me han excitado al punto que siento que en el mínimo roce estallare. Ya no siento miedo, estoy segura de lo que quiero.

-No, Lana tú no me quieres, ¿recuerdas a Fred?

Me acerco y le tocó el rostro, en sus ojos veo dolor, y me siento fatal.

-Lo que te dije hace un rato es verdad... - pone cara de desconcierto, lo abrazo y comienzo a cantar en su oído:

But tonight I'm going to lose it all

Playing with fire, I was the first to fall

Heart is sinking like a cannonball

Baby, kill it, what you waiting for?

Aquí está, espero que lo hayan disfrutado, fue muy gracioso para nosotras escribir este capítulo aunque muy difícil terminarlo, espero 25 votos y en cuanto estén subo el siguiente capítulo ¿podremos lograrlo? 😉😘

I know what my heart saysDonde viven las historias. Descúbrelo ahora