Pizza

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-He llegado a casa madre-.
-Harry, voy a salir, tu almuerzo está en el refrigerador-.

Oh mi madre, adora tanto que su hijo llegue a casa, así no tendrá que preocuparse porque algo se incendie.

Dejo mi maleta en la escalera. Entro a mi alcoba y me dispongo a celebrar mi enésimo día de libertad en casa. Me cambio la apestosa ropa de academia, me doy una ducha y aligero mi cuerpo con algo más preciso. Desconecto mi celular del tomacorriente y recorro la bandeja de mensajes.

-Los faperos;

James:
viste a @Harry como andaba babeando hoy @Carlos?

Carlos:
Oh si! Era una ostia, hahaha!

James:
Venga tío, a qué horas nos contás tu historia de amor? Hahaha!

Harry:
Qué coño tíos, sólo es una linda chica, no tiene nada de malo, es mejor que no hablemos de esto en clase, ella podría sospechar aquello. :V

Cabrones, puedes disimular ante todo el mundo, menos ante tus amigos, ellos saben cuando digo algo que no dice mi mente, sobre todo cuando trato de decirles respuestas erróneas en los exámenes para que no me jodan la existencia, saben cuando estoy bien y cuando estoy emputado, lo saben todo.

Bajo las escaleras mientras en medio trayecto saco mi cuaderno de apuntes. Dispongo horas para hacer tareas y organizo el tiempo libre mientras saco el almuerzo del refrigerador y lo encierro en el microondas. Termino el cuadro de tareas y digito 3 minutos en la pantalla del artefacto.

-Los faperos;

Harry:
Hey perros, tengo libre de 4 a 7, casa sola y comida en el refrigerador.

Carlos:
Perfecto.

James:
Llevo pizza. :V

Recorro el contorno de la mesa elijiendo qué puesto ocuparé hoy, saco unas frituras de la alacena y llevo mi almuerzo al comedor. A través de la ventana se ve un cielo de 2 de la tarde, el sol tiene un desplazamiento angular de unos 15 grados con respecto a la vertical. Y mi comida tiene un sabor salado. De nuevo mi madre se ha pasado con la sal en estos frijoles.

Hay tareas de física y Química, debo igualar días y preparar exposiciones para literatura, 30 minutos para aquellos ejercicios, 1 hora para clases y 15 minutos para aquellos papelotes.

Termino mi almuerzo y lavo las vajillas, seco la cocina y termino mis frituras, me dispongo a cubrir todo mi tiempo ya organizado en cada intervalo.

4:12PM.

Ding Dong!

Han llegado, espero que James en serio haya traído pizza, ese Pacman no me aseguraba nada. Bajo las escaleras de dos en dos y salto al recibidor. Abro la puerta rápidamente.

-Venga tío, la pizza llegó-. Exclamó James apenas giré la cerradura.

-Excelente, hagamos lo nuestro- proseguí.

Preparo la consola a la TV mientras los faperos se diseñan sándwiches de 3 pisos en la cocina. Subo las escaleras y dejo mi maletín en mi alcoba, tomo mi celular de la mesa de noche y bajo casi automáticamente. Los chicos ya están elijiendo el juego.

¿Es acaso una solicitud de Milha Rotzank? No puedo creerlo, existen dos cosas de las que ahora estoy seguro. Una; conoce mi nombre. Dos; he estado mucho tiempo en su cabeza para que me haya enviado una solicitud queriendo de verdad ser mi amiga, para solo haber cruzado un par de palabras por qué se tropezó y perdió sus anteojos.

-¿Vienes? Ya está cargando la interfaz- Carlos desde la sala.

Ah diablos! Confirmar. Es lo que todo el mundo hace. Además la conozco, es ciega sin anteojos y está en mi clase de química.

He jugado esta partida cientos de veces con Carlos, y siempre termino ganando, él siempre trata de hacer lo que más pueda para conseguir el triunfo pero no puede, es un novato gamer. James sólo disfruta verlo perder una y otra vez mientras come sus tres pisos de pan. Cada vez que lo encuentro disparo sin chistar mi rifle y el fracasa de nuevo.

Es el turno de James, ahora sí que jugaré. Es nuestra competencia amistosa, ambos somos muy buenos jugando Call Of Duty, y posiblemente hagamos una majestuosa partida uno a uno. En fin, nunca me ha importado saber con quién juego, sólo trato de ganar por instinto natural.

Me ha ganado, eso es algo nuevo, definitivamente esto de las cosas paranormales con Milha Rotzank me tienen alterado.

Mensaje nuevo;

Milha Rotzank:
Hola Harry! Gracias por aceptar mi solicitud. Podrías pasarme fotos de lo que han visto en química?

Subo a mi habitación, tomo 37 fotos de mi cuaderno y envío al chat.

Harry Rowan:
Ha enviado 37 fotos.

Lo he hecho casi deseándolo, casi abriendo mi corazón y exclamando "Si! Fuí yo quien le pasó la tarea de química! Ahora me amará!" Pero no es lo que pienso. Es extraño, pensar una cosa en tu cabeza cuando tu corazón dicta otra. Es lo mismo que sucede cuando alguien debe dejar atrás sus sueños para hacer lo correcto.

Milha Rotzank:
Gracias! De verdad, te lo agradezco. :) Y disculpa por los anteojos, no se han vuelto a caer. ;)

Siempre hay una diferencia entre lo que podría pasar y lo que en realidad pasa. Sólo que en éste momento es como si esa barrera no existiera, una chica está agradeciéndome por una tarea y Recuerda un evento entre los dos como si fuera importante ahora. Tiembla mi mente y salgo de la atmósfera por un segundo. De nuevo la dopamina amorosa en mi cerebro, ya está. Enamorado de nuevo.

Bajo a la sala y termino mi sándwich. James está destrozando a Carlos en el juego, a veces me da pena por él, no tiene la culpa de ser novato y ser amigo de dos veteranos de los videojuegos. A veces me da pena de la vida sinuosa que llevan muchas personas adictas a los juegos de vídeo. Pero es indiferente a mi posición. Ellos elijen su propia desgracia, todos lo hacemos.

Los chicos me invitan a jugar, al parecer James se aburrió de ganar, es mi turno, pero primero debo terminar mi sándwich y olvidarme de mi exilio atmosférico - terrícola. Y volver a mi casa, mi sala de estar.

Esto es nuevo para mí, jamás había sentido aquello, hacia otra persona, que me impida ser quién soy y cambiar mi personalidad intrínseca por instantes indefinidos.

Y aún falta probar la pizza...

MilhaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora