Habían estado caminando por un corto tiempo y Kanna ya comenzaba a enfadarse. No era una persona con bastante paciencia como podía verse, y por aquella razón hacia las cosas únicamente a su manera, siendo rápida y sencilla acabando todo al momento.
Pero con esta gente iba aun más lento de lo que esperaba aún con tener tan poco recorrido. Pero al ofrecerle nuevamente su espalda a Lee este se negaba y se escondía detrás de Tenten quien simplemente le daba una sonrisa cómplice y apoyaba su idea de ser cargado. Lamentablemente se seguía negando a aceptarla y se alejaba lo mas que podía retrasandolos aun más.
Molesta por la situación tan lenta en la que se encontraba suspiro y con resignación siguió caminando a paso de tortuga, sus cinco sentidos estaban encendidos al igual que el sexto, que seria más o menos lo que la caracterizaba como ninja. No le molestaba la tranquilidad del momento y el acogedor aire tibio golpeando ligeramente su rostro que disfrutaba de ir lento, al contrario se podría decir que le encantaba aquella sensación, pero lo que si la molestaba era el pequeño detalle que llegaban media hora tarde a la que habían sido citados por sus demás amigos. Seguramente si estuviera en las tierras de su legítimo clan, su madre y subordinados ya la habrían matado solo por ese pequeño detalle. Y el porque le molestaba llegar tarde era justamente por esto, que había sido educada de esa manera.
Recordó que con su padre era casi la misma situación de siempre, los días en que había estado observándolo se fijo en que llegaba tarde a cualquier reunión o entrenamiento al que era llamado. Sonrió un poco ante esto, era verdad que le desesperaba cada una de sus falsas historias de porque había llegado tarde, cuando la realidad era que se tomaba su tiempo, incluso de todo el mundo solo para dar la tonta excusa de "me perdí por el sendero de la vida".
Una sonrisa comenzó a plasmarse en su rostro al recuerdo de este, y como la primera vez le dio tanta risa que era casi descubierta por su padre, y que después simplemente comenzó a cansarle.
Un ladrido y gruñidos rápidamente hizo que se despertara de su sueño. Rápidamente antes de que el pequeño y peludo animal llegara a su rostro delicadamente lo sostuvo del cuello, mirándolo fijamente viendo como el pequeño animalito hacia lo posible por atacarla, pero Kanna lo tenia bien sostenido por lo cual no podría siquiera tocarla. Lo puso a la altura de su rostro mirándolo directamente a los ojos viendo como el perro gruñía y agitaba sus pequeñas patitas para lastimarla.
-¿que rayos es esta cosa?.....- preguntó algo incrédula la peliblanca al examinar mejor al animal, Lee y Tenten al darse cuenta del repentino ataque miraron al perro que sostenía en manos Kanna evitando que llegara a su rostro.
-¿akamaru?.- pregunto sorprendida la morena mientras tomaba a la criatura en sus manos, que aprovecho y nuevamente intento atacar a Kanna quien tomo a Lee del brazo y lo coloco enfrente de ella siendo a el a quien el perrito atacara.
-¡aaa!.- grito de dolor Lee mientras trataba con dificultad quitarlo de su rostro mientras este simplemente se enganchaba con sus garras a el.-¡duele!, ¡duele!, ¡quitamelo!, ¡quitamelo!.- suplicó Lee cayendo al suelo con akamaru sobre el.
-¿ese pequeño mounstro peludo tiene nombre?.- pregunto Kanna atontada por el diferente animal desconocido para ella.
-ese pequeño Mounstro peludo es mio y se llama akamaru.-contesto una voz molesta y desconocida que Kanna ignoro al no importarle de quien provenía.
-¡quitenmelo!, ¡quitenmelo!.- volvió a repetir Lee adolorido de los rasguños de akamaru.
-ya voy, ya voy.- contestó Kanna acercándose a Lee tomando de la misma forma que antes a akamaru quien al darse cuenta de esto miro confundido a Lee y luego a Kanna.- ¿que se supone que eres?.-
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La Hija De Kakashi
FanfictionUn día tranquilo en la aldea escondida entre las hojas, todo iba normal para el equipo siete. Mientras que naruto, sakura y sasuke entrenaban tranquilamente entre los tres, y kakashi sensei se disponía a leer su libro recargado en un árbol con tranq...