LA LUZ DE MI ALMA

capitulo 14

Alejandro

Llega Billy en una grúa muy grande, el tipo realmente me cae mal, se le cae la baba cada que ve a mi Paola, es frustrante porque la siento como mía cuando en realidad no somos nada, pero es que no se ni tengo la más mínima idea de cómo acercarme a ella -Sabes Alex, eres una caja de Pandora jajaja, te pasan mil contrariedades, me dice Paola trata de darle un tono divertido pero sé que está muy nerviosa todavía, y si ella está nerviosa, debo decir que yo estoy aterrado, ya no me queda duda, alguien me quiere muerto y no se quien ni porque, sólo se que no quiero estar solo -Pao crees que pueda quedarme en tu casa esta noche?-Claro sabes que mi casa es tu casa.

Llegamos a su casa y estoy muy nervioso, tengo miedo pero también me doy cuenta que si muero a nadie le importaría, talvez a la puta y solo por quitarme todo lo que he logrado, las personas a mi alrededor no les importo, y la verdad me siento muy solo.

Paola está cocinando y me dice que su padrino pasará por los gemelos, y llegará enseguida, no se porque estoy ansioso, quiero agradarle al hombre que considera un segundo padre.

Un hombre mayor de 50 entra a la casa seguido por los gemelos, pero no dice nada, sólo me observa con cara de pocos amigos - Quien carajo eres tú? El sr es un hombre alto, cabello rubio con varias canas, se ve con cuerpo marcado, viene con un jeans desgarrados y una playera desgastada, seguramente viene del taller- Soy Alejandro Villaseñor, mucho gusto, le doy la mano y me aprieta más de lo necesario, como si quisiera partirme la mano
-Ya llegaron!!! Hola padrino, mi ángel le da un beso en la mejilla al sr y este de inmediato cambia su expresión a una tierna y suave, - Hola mi niña huele delicioso que cocinas- Espero que tengas hambre hice uno de tus favoritos, pozole- Mmmm muero de hambre cariño, alimenta a este pobre viejo- Jajajajaja de viejo no tienes nada, anda ve a lavarte en lo que Alex me ayuda a poner la mesa, en ese momento mi ángel cambia su expresión y dice- Dios que malos modales tengo, el es Alex mi jefe, Alex mi padrino Héctor. El me ve con cara de asco y se va al baño- Creo que no le caigo nada bien.

El pozole es delicioso, una especie de caldo de puerco, con granos de maíz, lo comemos con tostadas y crema, esto me costará horas extra en el gimnasio, como siempre me siento tranquilo y en familia mientras mi ángel le plática a su padrino nuestro incidente con el coche y él me dice que lo revisara personalmente.

Al anochecer la casa está en silencio y mi ángel deja semipreparada la cena de mañana, se sienta a mi lado en el sofá y no puedo dejar de mirarla, sentirla a mi lado es una de las mejores sensaciones del mundo, platicamos de cosas sin importancia, nuestros gustos y aficiones, ahora se que le gusta el kickboxing, los autos, las carreras, pero también adora cocinar. Un silencio tenso se instala entre nosotros me acerco a ella y le acarició los brazos desnudos, ella se tensa y mientras nos miramos a los ojos se lame los labios, el movimiento me hipnotiza y solo pienso en probar sus labios, me acerco tanto que puedo sentir su aliento en mis labios le doy un beso muy suave, y ella responde, comienzo con pequeños piquitos pero quiero más me aventuro a lamer primero su labio superior, luego el inferior pidiendo permiso para explorar su boca con la lengua, ella me lo concede, y sabe aún mejor, podría vivir de sus besos sin comida ni agua, sólo ella, el beso de vuelve más intenso y me recuesto sobre ella en el sofá, comienzo a acariciar su vientre, el espacio entre sus pantalones y su blusa, bajo mis besos a su cuello pasando por su mandíbula, pero ella me separa y jadeando me dice...

Paola

Estoy viviendo el momento más sexy y exitante de mi vida pero esto no está bien, Alex tiene novia, y me niego rotundamente a ser la otra, lo separó de mi haciendo acopio a toda mi fuerza de voluntad ya que mi cuerpo me grita que continúe hasta el final pero yo se que no es correcto
-Alex nooo, esto no está bien, tu tienes pareja, Lucía es tu novia y yo no seré una aventura en tu vida, el me mira completamente serio y responde
- Ángel Lucía no es nada, tiene un título que no le corresponde, yo no sé que me pasa, pero desde que te conocí no puedo dejar de pensarte anhelar te, buscarte en todos lados, mi corazón se vuelve a activar a tu lado, no sé que significa el amor, el cariño ni ninguna de esas cursilerías, pero si se una cosa, y es que quiero estar contigo, sólo contigo.
- Entonces haremos esto bien Alex, cuando seas un hombre libre hablamos, mientras no, suelto el aire que tenía contenido, lo veo a los ojos y me despido de el, pensando en todo lo que pudo haber pasado y no sucedio.