capitulo 17

154 4 0
                                    

Paola

Estoy en casa hemos terminado de cenar, mientras los gemelos juegan
x- box one yo estoy lavando los platos y pensando en Alex, el día de hoy no lo ví, y estoy preocupada por el, a veces me da la impresión de que se encuentra perdido y totalmente solo, y otras me da la impresión que tiene miedo y que por eso usa esa careta de arrogancia y soberbia, como si fuera un escudo o una armadura para protegerse a sí mismo y no puedo evitar pensar, que le pasó para que fuera así?

Cuando era más pequeña teníamos unos vecinos, la niña era de mi edad callada y reservada, parecía asustada todo el tiempo y no dejaba que nadie la tocará, su hermano mayor Jhon siempre estaba metido en peleas y a mi me daba miedo por lo agresivo que se veía, un día Mina la pequeña niña de a lado estaba llorando mientras abrazaba sus pequeñas piernas en la acera, su hermano la abrazaba tratando de calmarla, cuando me acerque ví que el también tenía lágrimas en los ojos - Hola, estas bien? Le pregunté a Mina ignorando completamente a su hermano mayor
- Ella está bien niña, no te metas- Noooo, no estoy bien, tengo hambre y frío- fue cuando me di cuenta que estaba descalza,- mmmm pueden pasar a comer conmigo en casa, no es mucho, mamá hizo tortitas de papa y sopa aguada de pasta, vengan. Tomé la mano de Mina y me di cuenta que solo traía un vestido muy desgastado y sin zapatos-Porque no traes zapatos? Pregunte - Porque papá estaba enojado y me saco de la casa sin ellos- voltee a ver a Jhon para ver si el vestía igual que su hermana pero no, el traía un pantalón de mezclilla viejo, unos tenis rotos y playera blanca con algunos agujeros en ella, pero su mirada era la misma que a veces tiene Alex.

A partir de ese día, ellos comía con nosotros a diario, papá contrato a Jhon en el taller y le daba la mitad de su paga, la otra mitad la guardaba para que Jhon pudiera ahorrar dinero sin que su padre se lo quitará, ahora ellos viven en Texas y yo aún mantengo contacto con ellos.
Recuerdo las palabras de mi padre,
-En este mundo pequeña hay gente que está ciega y perdida por eso destruye la luz de los inocentes, si puedes hacer algo para ayudarles a recuperar un poco de esa luz, házlo, siempre que puedas dar una mano, hazlo, no negare que encontrarás personas que traten de aprovecharse de ti y consumir tu luz para ellos, y tu aprenderás a defenderte y alejarte de ellos-

Entonces me doy cuenta que la luz de Alex se apagó, es por eso que trataré de ayudarle en lo que pueda, tomo el teléfono para llamarle y saber cómo está. Al principio aunque parezca que contestan no se escucha nada solo una respiración-Alex, estas ahí? Soy Paola- Entonces escucho un jadeo, y lo que me parecen sollozos, - Alex no se que tienes, pero lo que sea no estás solo, si lo necesitas puedes venira mi casa y al menos tendrás un hombro para apoyarte.
Me cuelgan el teléfono, y al cabo de una hora suena el motor de un coche en la entrada de la casa, suena el timbre y al abrir la puerta encuentro un Alejandro totalmente abatido, sus ojos están rojos, y respira con dificultad, parece haber corrido varios kilómetros ya que está bañado en sudor, tomo su mano y lo paso a la sala, lo siento y lo abrazo, el sólo se deja caer, responde mi abrazo y llora, llora como un niño desamparado su llanto, y desesperación es tan desgarrador que no puedo evitar llorar con el, así pasamos mucho tiempo, en silencio, llorando y abrazados, me convierto en un refugio temporal, pero al mismo tiempo mi corazón se acelera, mis brazos lo aprietan más fuerte, tratando de arrebatar el dolor de su corazón, tratándo de curar las heridas de su alma, y al mismo tiempo tengo muchísimas ganas de besarlo, de sentir su calor y de fundir mi cuerpo con el suyo, y ahí es que me doy cuenta, que me estoy enamorando de Alex

LA LUZ DE MI  ALMADonde viven las historias. Descúbrelo ahora