Capítulo I

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-Seguro?- me pregunta mi amigo cuando digo que debo irme

-Sí, iré a ver a Thomas-

-Hmm... Thomas... pasas con él todo el dia, creo que ya va enserio(?-

-Ja ja- respondo y salgo de ahí para dirigirme a casa de mi vecina como todas las semanas, para cuidar a Thomas, el niño pequeño de seis años mas adorable que he conocido, mis amigos creen que es mi novio, porque no saben siquiera quien es. Si. Estoy enamorado a los 19 años de un pequeño de 6. Hay algo mal conmigo y lo se.

-Dylan- salta Tommy sobre mi cuando llego a su casa.

-Hola Tommy- lo abrazo y mantengo en mis brazos.

-Hola Dylan- Dice mi vecina- llegaste justo a tiempo, no alcancé a hacer cena hoy, pero dejé dinero, pide algo y comen ambos, tu paga del mes esta en el mueble de siempre-

-Okay, gracias señora sangster-

-Adios- dice y sale apurada.

-Juguemos juguemos Dyl- dice Tommy moviéndose emocionado.

-Y a que que quieres jugar?-

-Juguemos a las escondidas- dice feliz y se baja de mis brazos para salir corriendo- tu cuentas- sonrío.

-uno! dos! tres! (...) nueve! diez!- digo y comienzo a buscarlo, voy pasando junto al sillón y oigo una risita tras el mueble- ja! te vi!- le digo volviendo a tomarlo en mis brazos, amo tenerlo en mis brazos, es la cosita mas tierna que conozco, no deja de reír divertido y comienzo a hacerle cosquillas.

-Dyl!- dice riendo- ya para!- me alejo un poco, pero está tan tentado de risa que lo miro y se ríe, me encanta ver su sonrisita, tengo una obsesión con este niño, no me importa que tenga seis años, a mi me encanta.

-Tommy, que dices si encargamos una pizza y vemos una película? - le propongo.

-Sii, veamos esta- dice enseñándome una película de dibujos animados que no conozco.

-De acuerdo, voy a pedir la pizza- me acerco al teléfono y la encargo, llega al rato y al volver de la puerta Tommy está acostado en el sofá.

-Y yo dónde me sentaré?- pregunto dejando la pizza en la mesa de centro.

-No hay lugar- sonríe.

-Oh claro que hay- lo tomo en brazo y me acuesto yo en el sofá, el queda sobre mi.

-Está bien- sonríe.

Comenzamos a ver la película en esa posicion, estoy acariciando su cabello mientras el está acurrucado en mi pecho, nos comimos toda la pizza al principio de la película y ahora ya está terminando, no he puesto nada de atención, me he dedicado a observar a tommy tiene su cabecita en mi pecho y sus pies llegan a mis rodillas, no dejo de acariciarle el cabello, su suave cabellera rubia se desliza por mis dedos.

Cuando termina la película me doy cuenta de que está dormido, sonrío, no quiero despertarlo, beso su cabeza.

-Buenas noches Tommy- susurro y continúo acariciando su pelo, al rato me quedo dormido también yo.

-Dylan- siento que alguien me mueve, despierto y tommy ya no está sobre mí.

-Eh?- digo adormilado.

-Ya llegué, gracias por cuidar a Tom, se veían muy adorables durmiendo-

-No hay por que, es un placer cuidarlo-

-De verdad Dylan, gracias por hacer esto, te hago perder tus tardes-

-No es perdida de tiempo, sra sangster, Thomas es un niñito adorable, y me agrada mucho cuidarlo-

No es cuestión de madurez  (DYLMAS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora