Primer día de clases, el peor día inmortalizado en el calendario, pero de todas formas, era el mejor momento para otros, volverían a ver a sus amigos y conocerían a otros. Era...Neutral.
El sol ya estaba tocando levemente el cristal de las ventanas de los chicos. Beatriz, con su costumbre de dejar las cortinas abiertas en par a par, a de mas de que su habitación era la que siempre la luz del sol golpeaba fuertemente, ella despertó enojada, odiaba levantarse temprano. Camino hasta el ropero, lo abrió y miró toda la ropa que tenía allí, la mayoría fue comprada por sus tres amigas, así que todo su armario, estaba lleno de prendas hermosas, y una que otra llena de flores, estampados de leopardo, tigre, cebras, y blusas de color opaco, etc. Suspiró tomando unos jeans deslavados, algo ajustados. Una blusa de color salmón, y una jersey color coral. Todos los zapatos que Perrie le compró eran de tacón, los que Eleanor escogió eran sandalias, y Danielle, la mas practica, solo eran de piso o tacón bajo, entonces, Beatriz tomó los de piso, unos de color negro. Caminó hacia el tocador, donde hay un espejo gigantesco, ella se miró ahí, observando su enmarañado cabello pelirrojo. Tomo el cepillo de color perla, y cuidadosamente peinó sus pelo, quitando los nudos y dejando lacio, como debe de ser. Antes de salir de su cuarto, alcanzó su mochila de cuero café y por dentro de estampados de leopardo-regalo de Danielle.-
-Buenos días bella durmiente-Escucho la voz de su mejor amigo, Niall. Beatriz, caminó animada hacia él, enredó sus delgados brazos en el cuello del rubio y besó su mejilla haciendo un fuerte chasquido.- ¿Lista para tu primer día de clases?
-Mas que lista, estoy feliz. Espero que me toque en al menos, una clase contigo.-Dijo ella con un mohín. Niall rió al ver la expresión de su mejor amiga y asintió de acuerdo.
-Venga, vayamos a desayunar, creo que Louis cocinó.
Llegaron al comedor, tomaron asiento, uno enseguida del otro, Beatriz miró la jaula de Gumpas, sonrió al recordar el día en el que Harry se lo dio. Tomó unas semillas de girasol y las dejo en la canasta de comida de su amada ave.
-¿Listos para disfrutar la deliciosa comida?-Dice Louis saliendo de la cocina con un sartén humeante, que por cierto, olía delicioso.- Oh, por cierto, buenos días.
-Hola Louis. ¡Tengo tanta hambre!-Grita Beatriz.
-Veo que juntarte con Niall te ha hecho un gran daño, pelirroja.
-Oh calla, castaño.-Dijo tomando un tenedor y un cuchillo. Louis levanta las manos ofendido, y los otros dos, ríen. Louis, empieza a servir en dos platos los huevos revueltos junto a unas tostadas con mantequilla. Saco un jugo de naranja natural.
-Te esmeraste castaño.
-Muchas gracias, supongo, pelirroja.
A los minutos por las escaleras bajan los restantes, vestidos, arreglados, con lociones, peinados, pareciera como si la escuela realmente fuera importante, aun que lo es. Beatriz, al ver a Harry arreglado, con su gorra de lana color verde opaco, sus jeans negros ajustados, y su camiseta de cuadros junto a la chamarra color negro, bajo la mirada sonrosada viendo su collar de tapa roscas, muy moderno, escogido por su amiga la rubia.
-Huele delicioso, amor-Dice Eleanor abrazando el brazo de Louis, este, sonrió orgulloso. Sirvió los de mas platos y el suyo, y los de mas se dispusieron a comer. Beatriz, al terminar corrió al primer piso y lavo sus dientes, puso losion a su cuello y muñecas, un olor a frambuesas y de mas frutillas del bosque. Bajo las escaleras de a dos y se encontro con sus amigos esperándola.
-¿Lista?-Pregunta Harry con una sonrisa digna de apreciar, Beatriz asintió anonada. Danielle, Liam, Louis y Eleanor se quedaron en casa, ya que ellos, ya estaban en la universidad. Zayn, Perrie, Niall, Harry y Beatriz caminaron hasta la parada del Bus. Platicaron y rieron, hasta que un transporte de color azul musgo llego, los cinco subieron, la pareja se fueron a sentar juntos, Niall camino hasta donde estaban unos amigos, según parecía. Pero antes, le prometio a la pelirroja que le daría un tour especial por la escuela. Harry y ella se sentaron juntos en uno de los asientos. Harry miraba el vaho que dejaba la ventana, y rayaba diferentes cosas, dibujos o frases, y de vez en vez, chistes para hacer reír a Beatriz. Ella, solamente miraba el vaho que salía de sus labios, era divertido, y disfrutaba mucho el invierno, aun que apenas estuvieran en Septiembre, el frío ya se era presente.
Llegaron a una escuela gigantesca, llena de adolescentes y no tan adolescentes. Zayn llego de la mano de Perrie junto a un montón de amigos. Los otros tres, bajaron del Bus, algunas miradas se posaban en Beatriz, que venia tomada de la mano de Harry y Niall, obviamente asustada.
-¡Horan, ¿Vienes?!-Preguntaron un chico de ojos azules. Niall nego divertido. El chico rio y alzo un dedo pulgar y siguió su camino. Beatriz desato su mano de Harry, él la miro confundido y con recelo a la mano que dejo entrelazada.
-Harold, te deben de estar esperando.-Respondió la pelirroja con una sonrisa fingida.
-¿Y a Niall no?-Pregunta Harry reprochando. Beatriz negó divertida. Niall sonrió orgullos al saber que su mejor amiga lo prefirió a él que al rizado.-¿Por que?
-Porque Niall me dará el Tour Escolar, anda adelanta tu camino, debes de saludar a amigos, ¿No?-Harry siguió su camino bufando, dejando al rubio y a la pelirroja solos, claro, a excepción de los cientos de estudiantes al rededor.
-¿Quieres empezar ya?-Pregunta Niall, y Beatriz niega.-¿Entonces por que dejaste ir a Harry...?
-Tiene personas que saludar Niall. Tu no tienes que saludar a nadie.
-Claro que tengo-Dijo indignado, aun que claro, también divertido.
-Ya lo se, pero eres mío. Ahora, vayamos a causar polémica con las manos entrelazadas.
Los dos caminaron hasta los pasillos centrales del bachillerato, donde se encontraban personas gritando, abrazando, riendo, y otras formas de saludar. Nadie miraba sus manos, lo cual era bueno, por una parte. Aun que solo una persona lo hacia, y con enojo, y si, esa persona es Harry Styles. Ni si quiera él mismo sabía el por que de ese comportamiento. Enseguida de este, estaba una chica de ojos verdes, piel bronceada, cabellos rubios, labios grandes y rojos, su cabello de color rubio, con algunos mechones marrones. Llevaba un escote provocador, una minifalda que si digo lo que enseñaba de mas, seguramente, dejarías de leer. Sus tacones altos de al menos quince centímetros, hacían que ella llegara a la misma altura que Harry. Sus largas piernas daban miedo a Beatriz, ya que, ella tiene las piernas cortas y su mediana estatura, se sintió mal.
La chicharra de la escuela retumbo, algunos estudiantes entraron a sus aulas, y Beatriz se reprendió mil veces, aun no ha conseguido su horario.
-Beatriz-Escuchó su voz ronca, ella volteo, como si fuera una clase de reflejo.-No te preocupes, yo tengo tu horario, fui por el, por que sabía que se te olvidaría.
-Muchas gracias, Harry.-Dijo Beatriz, miró su horario, y la primera clase era Algebra.- ¿Alguien de ustedes dos tiene en la aula quince?
-No-Respondieron el rizado y el rubio al mismo tiempo. Beatriz hizo una mueca. Se despidió de los chicos y caminó hasta el aula quince, aun que tardo mucho en encontrarla. Los alumnos estaban esparcidos hablando o jugando, ella localizo un lugar vacío, aun que el segundo asiento-cabe decir que los asientos son de dos personas-estaba siendo ocupado. <<Bueno-se dijo-No se llega a ninguna parte siendo tímida>>. Camino hasta el asiento, dejo la mochila colgando de la esquina de la silla, se recargo frente al escritorio, sin mirar a la persona enseguida de ella.
-Valiente decisión.-Escucha que dice la persona, un hombre, si se guía por su voz. Aun que era vagamente conocida.-Hace tiempo, ¿No, Beatriz?
Ella voltea asustada, lentamente su mirada hacia aquel individuo, ya no tan desconocido. Su mirada se poso en un chico de piel clara, ojos avellanaos, cabello azabache, sus rasgos eran definidos, y atractivos, pero a la vez fríos. Llevaba una chaqueta negra, unos vaqueros negros, y unas botas de cuero de fabrica. Las manos jugueteaban con un lápiz amarillo, sus labios de color durazno estaban siendo mordidos por sus dientes blancos y alineados, mientras aquel hoyuelo resaltaba en cada movimiento. Era la perfección en persona, pero también el pasado doloroso, para Beatriz.
-Oh no...-Dijo en un hilo de voz, casi inaudible, como si solo verlo fuera un golpe en el estomago y la dejara sin aire, aun que era una opción probable.-¿Que haces aquí?
-Oh querida, la pregunta es; ¿Que hace la hermosa "scream" de YorkShire, en un lugar tan sofisticado como Londres?
-Esa pregunta te la debes de hacer tu, John.
-¿Disculpa? ¿A caso no me extrañabas, calabacita?
Calabacita. Entonces era cierto, ella no podrá escapar de su pasado jamas. Y él, el chico azabache, era prueba de ello...
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Don't Let Me Go.
Fanfiction«Incautas aves más que recelo existe, por su tenacidad para escaparse, o impetuoso cantar al enfrentarse. Envidio su naturaleza divina. Aquel don de la apreciada libertad, frágiles alas ante cualquier deslealtad. Claves reflejos han de tener para vi...