Chunin - (SxS)

XI - Pesadillas

Los recuerdos de su pasado eran algo muy palpable en la vida de Sakura, y desde hace algunas semanas las pesadillas eran algo que no la dejaban ni siquiera respirar.

Sus sueños mostraban dos nombres, esos dos nombres significaban algo que ella no sabía, y que estaba decidida a investigar; su mente estaba cansada de tantos problemas a su alrededor, pero nadie era consciente de ello y no quería que lo fuesen.

Cuando el sol toco el alba, ella admiraba por la ventana la hermosa vista, se sintió tan maravillada que solo sonrió, era bastante temprano, pero no se molestó en levantarse encontrándose con Tsunami, la hija de Tazuna.

—Hola— la voz de Tsunami la saco de sus pensamientos —¿Porque estás despierta tan temprano?

—No podía dormir— la respuesta sorprendió algo a la mujer

—Es comprensible, sucede cuando estás en lugares nuevos— Sakura se acercó a ella observándola preparar el desayuno

—No es eso, cuando eres ninja siempre duermes en cualquier sitio— aparto la mirada hacia la puerta no había nadie pero se quiso cerciorar

—¿Entonces?

—Son pesadillas— la vio apartar la mirada y observarla —Desde hace semanas, no me dejan descansar lo suficiente y para mi es un problema.

—¿Porque no tomas algo para dormir?.

—Aunque no lo creas es peor, siento que no me puedo escapar de ellas, cada noche es igual— Tsunami no supo que decir en cambio recibió un sonrisa de parte de Sakura —¿Te puedo ayudar con el Desayuno?

—No es necesario

—No te preocupes, ya estoy adaptada a hacerlo.

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Todos estaban sentados desayunando con tranquilidad, hasta que Kakashi decidido contarle a Tazuna lo que pensaban con respecto a Zabuza.

—Ya decía que habían acabado con él muy fácilmente— el mayor los observó

—La próxima vez que lo vea acabaré con él— la voz de Naruto aligeró un poco el ambiente tenso.

—Mientras Gatō siga por acá, puede ser cualquier ninja el que me ataque— la pelirosa volteó y observo sobre su hombro al pequeño que se escondía detrás de la puerta

—Acabaremos con él, así no tendrán que preocuparse— Naruto había robado la conversación de Kakashi

—Nunca podrán vencer a esos ninjas, mucho menos a Gatō— el pequeño corrió y se refugió en los brazos del anciano

—Él es mi nieto Inari— comento Tazuna pero Naruto lo interrumpió

—Yo derrotare a todos esos ninja y seré todo un héroe— reclamó Naruto al pequeño

—Es mentira, los héroes no existen— todos quedaron en silencio ante las palabras del menor, quien luego salió corriendo, Naruto fue detrás de él.

—Lo siento mucho Kakashi— Sakura se levantó y siguió a Naruto encontrándolo frente a la habitación de Inari, el pequeño estaba llorando, ambos lo observaron que abrazaba un cuadro.

—Vamos a entrenar— la voz de Sasuke los hizo voltear yéndose con él.

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Una vez en el bosque Kakashi le explico de qué trata su entrenamiento para luego hacerles una demostración, la cara de Naruto era emocionada había olvidado lo de Inari y se concentró en hacer la prueba.

—Recuerden, deben guiar el Chakra a sus pies, debe ser preciso o se caerán, usaran un Kunai para ir marcando que tan lejos llegaron.

Cuando comenzaron la práctica, todos se sorprendieron al ver que Sakura lo había logrado al primer intento, en cambio sus compañeros se cayeron sin llegar siquiera a la mitad.

—Felicidades Sakura, veo que tienes un excelente control de chakra— Sakura dio una leve sonrisa, la verdad estaba tan metida en sus pensamientos que ni se percató que lo había logrado

—Gracias Kakashi Sensei.

Se sentó bajo un árbol y estuvo bastante rato observando a Naruto y Sasuke caer del árbol, sus marcas no llegaban ni a la mitad, escucho a Naruto caer y lo observó, no se percató que el pelinegro se sentó a su lado.

—¿Que sucede?— su pregunta la sorprendió —Y no me digas que nada— Sakura bajo la mirada hacia sus manos mientras jugueteaba con el Kunai que no había soltado.

—Sólo han sido pesadillas— murmuró muy bajo, pero el la escuchó —No deberías preocuparte...

—Si debo— no la dejo seguir hablando —Sabes lo malo que es cuando no descansas, claro que debo preocuparme.

En ningún momento Sakura alzó la mirada de su Kunai, se sentía como una niña pequeña cada vez que él la regañaba, eso hacia que recordara a sus padres.

—Están muy tensos— dijo después de un buen rato, lo suficientemente alto para que Naruto la escuchara, quien seguía en el suelo después de su última caída —Si no se relajan nunca lo van a lograr

—Sakura chan— el grito de Naruto hizo que volteara a verlo —¿Porque no nos explicas más detalladamente?

Kakashi los observaba a los tres charlando o más bien a Sakura explicándoles lo que iba a hacer, y cuando se percataron ya estaba cayendo la noche.

—Es hora de irnos— anuncio Kakashi, los dos chicos se notaban cansados observando al árbol. —Mañana pueden continuar.

—Me quedaré otro rato— anuncio Sasuke sin apartar la mirada de su última marca

—Entonces yo igual— dijo Naruto observando al peliplata

—Esta bien— dijo Kakashi comenzando a caminar —Regresen antes de media noche.

Sakura observó a sus compañeros por última vez para luego seguir al mayor.

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Sentía que se está asfixiando, el aire no llegaba a sus pulmones, la mano intrusa se cerraba con fuerza aprisionando aún más su delicado cuello.

El ojo rojo de aquel enmascarado no dejaba de observarla, estaba carente de sentimiento alguno como si estuviese acostumbrado a hacerlo y sintió tanto terror al escuchar su voz; su última palabra la hizo despertar con prisa.

«La reliquia»

Se sentó en la cama con el corazón desbocado, su mano llegó con prisa a su cuello y las lágrimas no tardaron en salir, intentando recuperar el aliento.

Sintió una mano tocar su espalda y se asustó.

—Soy yo Sakura— soltó un suspiro al escuchar la voz del pelinegro, y sin pensarlo dos veces se arrojó a sus brazos sin contener su llanto —Tranquila, sólo fue una pesadilla.

—Era tan real Sasuke— dijo con voz entrecortada —Me quería matar

El chico no preguntó, ya había escuchado esas palabras muchas veces, sabía de qué se trataba, sólo se limitó a acariciar su espalda mientras ella se desahogaba.