Prologo.

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—¿Qué quieres decir? — dijo viendo directamente a sus ojos, mismos que empezaban a brillar por retener las lagrimas que quería dejar caer.

—No creo que esto esté funcionando.

—¿Desde cuándo? — quería acercase y tomarle de las manos, pero su cuerpo se encontraba entumido por el miedo.

—No lo sé, desde ahora, simplemente ya no se siente bien.

—Solo estás dando vueltas y no me dices la verdad, ¿qué esta pasando?

No sabía de donde sacar la valentía que le hacía falta para dar los últimos pasos que les separaban, quería que le dijera que era una especie de broma y que solo está jugando, como suele hacerlo casi siempre. Aunque en el interior, en el doloroso interior de su corazón, sabía que, en el fondo, si se estaba terminado.

—Se terminó.

Siempre a tu lado.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora