Una semana después.
-¿Qué hacen aquí?- el muchacho se levantó de un tiro de su asiento, cuando la mano de ella lo obligó a sentarse otra vez.
-Yo les avisé que vengan- respondió ella.
-¿Estás loca?
-Sólo cállate y escúchame.
-De acuerdo, ¿para qué nos quieres aquí, Granger?- preguntó el rubio de Slytherin cruzado de brazos.
-Ustedes son los que están mucho más tiempo con Madison que nosotros, ¿tienen alguna idea de porqué se comporta así?- les pregunto ella a los Slytherin. El rubio fue bajando sus brazos cruzados y su expresión no era tan tensa como siempre.
-La verdad es que no. No entiendo qué le pasa, pero queremos que vuelva a ser cómo antes- explicó el rubio.
-¿Saben algo sobre lo que eran esas cosas?- preguntó, esta vez, el pelirrojo.
-Eran dementores- explicó Hermione mientras sacaba, de quién sabe dónde, un libro color café con pinta de ser algo viejo-. Estuve investigando en la biblioteca, en la sesión restringida, y aquí dice- comenzó a leer- "Disfrutan con la desesperación y la destrucción ajenas, se llevan la paz, la esperanza y la alegría de cuanto los rodea. Si alguien se acerca mucho a un dementor, este le quitara hasta el ultimo sentimiento positivo y hasta el ultimo recuerdo dichoso. Si puede, el dementor se alimentara de el hasta convertirlo en su semejante: un ser desalmado y maligno.Lo dejara sin otra cosa que las peores experiencias de su vida"
-No explica el por qué Madison cambió en cuanto se despertó- habló por primera vez el hermano de la nombrada.
-Pero, ¿y si Madison tuvo una reacción diferente hacia el dementor? Ella se acercó mucho al dementor, eso quiere decir que el dementor quitó todo lo positivo y todo lo alegre que había en ella. Madison ahora es fría; Harry, te odia, ella debió de tener una reacción diferente al resto de nosotros- explicó Hermione.
-Ha pasado una semana, y no hubo ningún cambio en su humor ni aspecto. ¿Cómo se cura eso?- preguntó Draco con frialdad digna de un Slytherin. Por primera vez se relacionaban sin discutir o insultarse, pero era por un bien en común. Los leones querían que Madison les volviera a hablar cómo antes, y las serpientes querían que Madison no sea como la insoportable Pansy Parkinson.
-No dice en ningún lado- dijo la leona mientras pasaba las páginas gastadas del libro.
-Tendremos que averiguarlo- declaró mientras se ponía de pie Harry Potter-. Me tengo que ir, los veo luego- dicho eso, salió del baño dónde se hospedaba Myrtle la llorona.
-Si, nosotros también- y las serpientes se fueron.
-¡Fíjate por dónde vas, estúpido!- chilló la pequeña Potter mientras se paraba del frío suelo de las mazmorras.
-Lo siento- dijo una voz masculina, algo conocida para ella-. Enserio que no te reconocí Mad- era aquel chico al que tanto extrañaba que fue su sostén durante tantos años.
-¿Cedric?- su expresión se fue calmando, hasta que no quedaba aquella expresión de una Slytherin, sino de alguien común y normal, contento. El chico le sonrió, y ella inmediatamente saltó a sus brazos, aquellos que tanto anhelaba y que tantas lágrimas habían visto, que nadie sabía.
-Te extrañe tanto- susurró él en el oído de ella.
-Yo también- ella respondió-. ¿Dónde estabas? ¿Porqué no me escribiste? ¡Te mande miles de cartas Diggory!- Madison enloqueció y el Hufflepuff sonrió.
-Es una larga historia, algún día te lo contaré. ¿Y tú? Escuché que has actuado como una digna de Slytherin, y que odias a tu hermano, ¿qué con eso?
-Larga historia, algún día te la contaré- ella le respondió lo mismo, lo que hizo reír a ambos.
-¿Te puedo preguntar algo? Bueno, más que preguntar es un consejo u opinión- ella lo miró algo extraña.
-Sí, claro- respondió ella.
-Es sobre el torneo de los tres magos- aclaró él, a ella no le agradó mucho, pero le hizo una señal para que prosiga-. Estoy pensando en participar.
-¡¿Qué?! ¡Cedric eso es una sentencia de muerte! ¿Sabes cuántas personas han muerto en el torneo de los tres magos? ¡Miles!- la pequeña Potter enloqueció.
-Mad, soy bastante inteligente cómo para que tenga la tan mala suerte de morir.
-Cedric, es una locura.
-Es una oportunidad única Mad. Si gano, podré ayudar a mi padre con sus gastos.
-Sigo pensando que es una locura; sí, podrás ayudar a tu padre, pero ¿y si mueres en el intento? Cedric no soportaré perderte después de todo lo que pasamos.
-Mad, no me pasará nada. ¿Puedes decirme que cuento con tu apoyo en esto?- preguntó él mientras miraba a aquellos ojos entre azules y verdosos que lo traían loco, aunque era su mejor amiga, y no arruinaría aquella amistad por una simple atracción.
Ella resopló, para luego decir:- De acuerdo, pero si en la primera prueba te va mal, solamente abandona.
Él rió, y asintió. Abrió sus brazos esperando un abrazo de ella, que no tardó ni dos segundos en aferrarse a la enorme espalda del chico. Desde una esquina del pasillo, se asomaban tres cabezas, dos castañas y una rubia. Suspiraban por aquel rubio, aunque no les atraía mucho por ser de la casa de los tejones; las tres se miraban entre ellas y salieron de aquella esquina en busca de su amor platónico: Draco Malfoy.
-------
¿Qué pasará entre Cedric y Madison? ¿Porqué ella lo recuerda? ¿Qué hizo él para que ella lo recordase? ¿Quienes eran aquellas cabelleras? ¿Qué planean hacer los Gryffindor y Slytherin?
ESTÁS LEYENDO
Mi Slytherin [CANCELADA TEMPORALMENTE]
FanfictionMadison Potter, es la hermana melliza de Harry Potter, o mejor conocido por "el niño que vivió". Esa noche, la noche en que el-que-no-debe-ser-nombrado asesinó a James y Lily Potter, y que luego asesinaría al pequeño Harry de a penas un año, Madis...