Cap 2: El nombre del Sabueso es...

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 Adam se encontraba parado delante de una casa de dos pisos, con un jardín muy deteriorado y rejas oxidadas. Ese era su dulce hogar, una pequeña mansión en medio del bosque, el único lugar al que podía regresar era ese.

- "Tan solitario como siempre" - pensó con tristeza, observando la estatua de ángel que había en medio del jardín. Adam soltó un pesado suspiro antes de abrir la reja y adentrarse en el descuidado jardín. Camino en completo silencio hasta llegar a la puerta, busco y saco la llave de su gabardina, abrió la puerta y se adentro en su hogar - em.... ¿hola? - pregunto ladeando la cabeza, mirando fijamente a la sombra de brillante ojos rojos que se ocultaba en la oscuridad del pasillo, el se adentro en la mansión y serró la puerta, dirigiéndose con pasos lentos hacia el interruptor que tenia a un costado de la pared.

Cuando la luz de las lamparas del techo se encendieron, mostraron a un hombre de musculatura marcada y espalda ancha, de brillantes ojos rojos y piel canela, de cabello negro y con tres cicatrices en forma de garras en su pecho, solo usaba un pantalón desgastado y nada mas, dejando a la vista su bien trabajo cuerpo.

- No quiero ser maleducado, pero... ¿quien eres? y ¿que haces en mi casa? - le pregunto con el ceño fruncido, aquel hombre ladeo la cabeza confundido antes de sonreír con diversión.

- Haber si así me reconoces - murmuro mirándole fijamente, Adam miro sorprendido como el cuerpo del extraño comenzaba a cambiar. Sus huesos comenzaron a romperse y a tomar otra forma, le comenzó a crecer pelo y su cráneo comenzó a tomar una forma perruna. Le creció una larga cola huesuda y largas y filosas garras. Su espalda se curvo y ahora era un animal cuadrúpedo, de grandes colmillos, garras y con la carne descompuesta ademas de tener la piel gris y la carne colgando en algunos lugares del cuerpo. El Hellhounds se acerco a un Shokeado Adam moviendo su huesuda cola con felicidad.

- ¿El perrito? - pregunto mientras se arrodillaba en el suelo, el sabueso golpeaba su cola contra el piso de madera al sentarse delante del muchacho - ¿que ases aquí? - le pregunto con curiosidad mientras le acariciaba la cabeza a perro, este le lamió la mano antes de levantarse y alejarse un poco de Adam - ¿no deberías estar ya con tu manada? los Hellhounds no andan solo.

- No tengo manada - le respondió una vez que se volvió a transformar en humano - y vine hasta aquí para proponerte algo.

- ¿Que cosa? - pregunto ladeando la cabeza, ese perro ya tenia toda su atención.

- Tu estas solo y yo busco una manada... ¿que te párese si formamos una? - le pregunto con una mirada completamente seria, no había duda en sus ojos.

- Soy un humano - decía mirándolo como si estuviera loco, el Hellhouds bufo molesto ante la tonta escusa que le dio el castaño - uno muy sexy, pero humano al fin y al cabo - intento explicarle al perro, no es que la idea le desagradara, la cosa era que no es normal que un humano este con un ser sobrenatural como lo es un sabueso del infierno.

- ¿Y eso que? - pregunto con una ceja alzada - yo estoy buscando una manada y te encontré a ti, a ti no te gusta estar solo y yo no quiero estar solo ¿cual es el problema? - le pregunto cruzándose de brazos y levantando una ceja - y si el problema es que yo soy un Hellhouds y tu un humano, pues hagamos una manada diferente.

- ... - Adam suspiro con cansancio, no podía con ese chucho infernal - ¿tienes un lugar en el cual vivir? - le pregunto con una ceja alzada y una mirada cansina, el sabueso negó con la cabeza con una sonrisa feliz, había logrado su objetivo - entonces ven, te mostrare tu nuevo hogar...

- ¿En serio? - le pregunto emocionado, el joven asintió mientras comenzaba a camina - por cierto, ¿cual es tu nombre?

- Adam - le respondió con una sonrisa, por lo menos ya no estaría solo - ¿y el tullo?

- Demert - decía mirando al joven que tenia adelante suyo con una sonrisa y una mirada de agradecimiento.

 La mansión contaba con seis habitaciones en la segunda planta, cada una con un baño propio, y en planta baja se encontraban cinco habitación con baño y vestidores propios. En el prime piso se encontraban el living y el comedor, también la cocina y el bar. En el segundo piso también se encontraba un bello loft, una gran biblioteca y un extenso gimnasio. la mansión contaba con tres garages, uno doble y dos independiente.

 Ahora ambos se encontraban en el segundo piso, parados delante de una de las seis habitaciones que había en la planta alta, la puerta era de madera marrón rojiza y con finos detalles tallados en ella.

- Esta sera tu habitación, y esa... - señalo una puerta que se encontraba casi al final del pasillo, una en donde la madera era del color del wisky - es la mía, si necesitas algo búscame, si tenes hambre, puedes sacar lo que quieras de la cocina o del bar - decía con una sonrisa cansada, ahora solo quería bañarse y dormir un rato - puedes decorar tu habitación como quieras.

- ¿Ahí alguien mas aquí? - pregunto agudizando sus oídos, solo podía oír el latido del corazón de Adam, no había otro sonido en la casa.

- No, solo yo - decía mirando al perro con mucho cansancio - bueno, yo me voy a bañar, puedes explorar a tu gusto - dijo antes de marcharse hacia su habitación, ya no aguantaba mas el cansancio - buenas noches.

- Buenas noches - murmuro viéndole marcharse con tristeza en su mirada. Demert abrió la puerta de su ahora habitación y se adentro mirando todo con curiosidad. Habían muebles echos de una de las maderas mas finas que se pudieran encontrar. Una cama de dos plazas con un acolchado negro y sabanas de ceda de color blanco y almohadas con fundas negras, un ropero de madera negra y bordes dorados, una mesita de luz en donde descansaba una lampara de vidrio y un gran ventanal con cortinas color vino y un baño con jacuzzi - "demasiado silencioso" - pensó mientras se acercaba al ventanal, miro hacia el jardín con molestia, Adam no le prestaba mucha atención al hermoso jardín que cubría la parte delantera de la mansión - a partir de ahora, yo seré el jardinero... - murmuro dándose vuelta y dirigiéndose hacia la puerta, el no tenia pensado dormir ahí.

Una manada diferente (Yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora