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- Bueno... ¿qué hacemos ahora? - Preguntó Taehyung viéndonos divertido.

Me encogí de hombros y miré a Jungkook.

Él me miró y también se encogió de hombros.

- Yo... Mi horno se rompió así que vine a usar el de Yoongi. Pero si me dejas usar el tuyo, Tae, puedo preparar pizza. - Habló Jin y TaeTae asintió rápidamente arrastrándolo hasta la cocina.

- ¿No comieron en su cita? - Pregunté confundido y Jungkook asintió, pero volvió a encogerse de hombros.

Yoongi y Namjoon conversaban en el sillón animadamente.

No sabía que eran tan cercanos.

Hoseok se puso a hablar con Jungkook y yo me quedé parado solo en la sala.

Suspiré y me senté al lado de Yoongi sin prestar atención a su conversación.

Miré mis pies y por un momento me sentí incómodo y fuera de lugar.

- ¿Estás bien? - Me susurró Yoongi en el oído.

Lo miré y asentí.

- ¿Y Namjoon? - Pregunté cuando no lo vi a su lado.

- Fue a la cocina. - Respondió y asentí.

Miré a Yoongi y él me miró.

Ambos nos quedamos así, hasta que él suspiró y yo desvié la mirada hacia mis pies, otra vez.

Yoongi colocó una mano en mi muslo y comenzó a acariciarlo.

Lo miré sorprendido y él sonrió levemente.

- Ay, miren. Parecen novios. - Habló Hoseok interrumpiendo.

Yoongi sacó su mano de mi muslo y lo miré, se encontraba incómodo.

Miré a Hoseok con el ceño fruncido, él sonrió inocentemente y rodé los ojos.

- ¿Te avergüenzas? - Le pregunté a Yoongi.

Él no me miró y tampoco dijo nada.

Suspiré decepcionado y me levanté para ir a la cocina. Pero Yoongi me agarró de la muñeca deteniéndome.

Me volví a sentar y lo miré confundido.

- Solo... dame tiempo. - Pidió y lo miré aún más confundido, él suspiró y volvió a poner la mano sobre mi muslo mientras daba suaves palmadas.

Reí y lo miré.

- Perdón por haberme avergonzado.

Lo miré con ternura.

- Está bien. No somos nada para que tengas que estar haciendo esto. - Confesé.

- No, pero quiero hacerlo.

De un momento a otro estaba muy cerca de mi, sus labios rozaban con los míos.

- Y-Yoongi... - Murmuré y él iba a besarme, pero se alejó.

- No puedo hacerlo, perdón, Jimin.

Lo quedé mirando en la misma posición.

No estaba comprendiendo mucho qué es lo que acababa de susceder, así que solo asentí y respiré tranquilamente, bueno, lo intentaba, porque mi corazón latía a mil por hora y dificultaba mi respiración.

Minutos después los demás chicos llegaron con la pizza casera de Jin y todos comimos tranquilamente.

Mi celular sonó en un momento y lo atendí con tranquilidad, era un número desconocido así que no tenía que ir a algún lado para atender.

Gay [ym]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora