Capítulo 5: › La víctima del demonio ha sido descubierta y Miguel estupefacto.

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Capítulo 5: › La víctima del demonio ha sido descubierta y Miguel estupefacto.

- › Muere hombre calcinado en la autopista Rosario. ›-

El día de ayer, se encontró a Alexander Louis Mejías calcinado en la avenida Rosario. Los investigadores informan que el hombre chocó, sin embargo, los pobladores afirman que no escucharon nada acerca de cualquier golpe o explosión. Para la agencia policial, otra investigación por resolver.

El sonido de la puerta indica que alguien ha llegado, ese alguien era el lindo moreno, Miguel. Sus compañeros al verlo de inmediato se dieron una mirada encubridores ocultando algo entre ellos mismo, algo que el moreno no sabía. A simple vista notaba que sus compañeros de trabajo ocultaban algo.

- Bien ¿Qué es lo que sucede? - suspira y los mira a cada uno, los chicos permanecen mirándose entre sí, con ese vistazo partícipe y al moreno no le gusta nada- ¿Y bien? - repite esperando una réplica.

- ¿No te has enterado? - uno de sus compañeros se atreve a hablar, Mangel frunce su entrecejo sin saber sobre de que se tenía que enterar. El muchacho le entrega la primera plana del periódico a lo que Miguel acomoda sus gafas y lee tanto el epígrafe, como toda la noticia, observa la foto y su corazón se precipita, el conocía a ese hombre, ¡Claro! Si justo ayer había tenido un mal rato con él en su trabajo, y ahora, ahora él estaba muerto. Empezó a transpirar de los nervios y es que era sorprendente para el inocente moreno- Creí que ya lo sabías. - Mangel niega entregando el periódico para salir como un rayo a los vestidores, necesitaba un poco de aire para pensar con claror ¿Cómo sería eso posible? Ese hombre muerto, tan solo ayer habían tenido ese mal rato, Rubén lo rescató y se marcharon. Tan insólito, muy insólito.

- Todo estará bien ¿Vale? No te preocupes por ese hombre-la voz de Miranda sorprendió al moreno quien se giró de inmediato para ver a la chica frente a él.

- No es solo por eso. -

- ¿A qué te refieres? - la muchacha no entiende que es lo que quiere decir Miguel.

- Dos, dos veces en esta semana. - la chica frunce su entrecejo- He tenido dos sueños extraños con un niño, bueno, son los mismo, lo sé, porque es la misma mujer madre. Ese niño es un monstruo. A menos en mi sueño lo es, sus ojos tan oscuros como la noche sin cometas ... -

- ¿Sabes Miguel? - el moreno coloca su mirada nerviosa en la chica quien permanece con una mirada vaga en un punto fijo en el suelo- Los sueños tienen tantas simbolizaciones. Y más si se trata de niños, algunos son significados benévolos. - deja de mirar al suelo para colocar sus orbes en los de Miguel- Pero, sin duda ese no tiene un buen significado. - Miguel suspira, Miranda tiene razón, hay que darse cuenta de que el niño de sus sueños no es nada bueno y lo peor aún es que ese niño ya no era uno, sino un mancebo real que le gustaba concluir con las vidas de las personas. Y ese joven es tan vecino al mismo Miguel.

*

Mientras tanto en el hogar de Lana, la castaña tomaba un sorbo de café mientras ojeaba el periódico del día, sus ojos se abren tan grandes como un plato al leer la primera plana, mientras leía en su mente negaba con molestia. - Otra víctima. -

- Buen día. - saluda el castaño entrando a la cocina donde se encontraba Lana sin despegar la mirada de la lectura- Hoy me siento más activo que nunca. - sonríe mostrando sus dientes y es inevitable no verse tan perverso.

- Alexander- murmura Lana- ¿Te suena ese nombre? - Rubén frunce su entrecejo, nunca había escuchado ese nombre, el no conocía a nadie con ese nombre.

Monster » Rubelangel (Nueva Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora