-¡Mierda!-Dije subiendo el último escalón de la casa.
Con todo lo que había pasado había olvidado concentrarme en mi pequeño problema, si, haba olvidado que se me estaban abriendo los puntos de la pierna, tenía mi sudadera amarraba a la cintura, así que sin que Pax se diera cuenta pase mi mano por la herida, donde enseguida sentí la humedad sobre el pantalón. "No puedo preocupar a Pax" fue lo primero que me vino a la mente.
-¿Qué pasa?-Pregunto Pax e cuanto noto mi preocupación.
Tenía que mentirle, y no conocía a nadie mas que pudiera ayudarme, así que dije lo que me vino primero a la mente.
-Olvide que Ben y yo teníamos que hacer algo esta tarde, tengo que ir a su casa, dijo algo sobre entrenamientos especiales.
Aunque no creo que Pax lo haya creído, accedió con la mirada.
-Puedes tomar el convertible negro, yo te enviare la dirección de Ben.-Me dijo dándome las llaves.
Baje lo mas rápido que pude mientras apretaba la sudadera en mi trasero solo en caso de que goteara. En cuanto estuve sobre el auto acelere a fondo, revisando la ubicación que Pax me había mandado en mi teléfono.
Para mi buena o mala suerte, un perro atravesó la calle haciéndome frenar de golpe, sentí como midieran se estiraba, y la sangre salía el doble de rápido, sentí un golpe en el tobillo derecho y al agacharme, me encontré con un revólver compacto S&W 60, frene unos minutos para revisarlo y ver si estaba cargado, 4 balas salieron al abrirlo depuse de eso lo guarde en la cintura de mi pantalón. Ahora si, conduje sin detenerme hasta llegar a la casa de Ben.
-¿Otro millonario?-Pensé al ver su casa, bardeada con una enorme pared de cantera, con una enorme reja oscura como entrada, claro que tenia que pasar por un vigilante antes de entrar.
Arregle un poco mi cabello antes de bajar la ventanilla del auto, el vigilante me miraba fijamente mientras la ventanilla me permitia verlo al bajar.
-Vengo a ver a Ben, entrenamos juntos, es urgente.-Le dije
-Si entrenan juntos, ¿Donde esta tu marca?-Me dijo
¿Mi marca?, ¿De que hablaba? Honestamente no tenía tiempo para otra opción, así que hice lo que en poco tiempo el matadero mejor me había enseñado. Saque la pistola de mi pantalón, y la apunte hacia su rostro.
-No mentía cuando dije que esto era urgente, así que o me deja entrar o tendré que bajarme del auto a abrir la reja por mi mismo.-Solté mientras quitaba el seguro del arma. La reja se abrió y en cuanto note que mi auto cabía volví a acelerar a fondo, me estacione en la entrada principal, y toque tres veces el timbre.
-¡Vamos Ben abre la maldita puerta!-Grite prácticamente desangrandome
Rode los ojos después de unos minutos de esperar, probablemente Ben estaba en la ultima habitación de la casa y no podía escucharme, y ademas de mi pierna me urgía entrar pues probablemente el vigilante había llamado a la policía.
-Trate de hacerlo en buena manera.-Pensé forzando la cerradura de la puerta principal, después de eso un buen empujón hizo lo que faltaba. Ni siquiera me preocupe en ver mucho de la casa, el dolor de mi pierna y mi desesperación me segaban, recorrí el piso de abajo en cuestión de unos minutos, lo único que me faltaba era una habitación cerrada con seguro.
-¡Suéltame maldito asesino, no me haras lo mismo que a los demás!-Grito Ben llamando mi aticen hasta el piso de arriba. Seguido de eso pude escuchar un golpe seco en el suelo, uno cristales caer a los pocos segundos.
Corrí con lo poco que me quedaba de fuerza, y en cuanto acabe de subir las escaleras me recibió un doloroso golpe en la nariz, lo primero que pensé fue "Espero no este rota" En cuanto mi mirada se desnublo me encontré con 2 hombre en casa de Ben, uno de ellos esta sobre el golpeándolo fuertemente en el rostro, y el otro preparándose para golpearme a mi
-¿Cómo le hago para meterme en tantos problemas?-Dije tomando un pedazo roto del barandal de madera, y estampándoselo en la cabeza al hombre que me golpeo, mi puntería no fue tan buena, así que primero lo golpee en la mano, y tuve que hacer un siguiente golpe hacia su golpear su cabeza.
Mi acción siguiente fue ver que pasaba con Ben, el hombre sobre el había sacado un cuchillo y estaba dispuesto a matar a Ben, no tuve que pensarlo mucho antes de buscar el arma emni pantalón una vez mas y hacer sonar el plomazo. El cuerpo quedo sobre el de Ben, dejando una mancha de sangre sobre el.
Corrí a quitar el cuerpo que se encontraba sobre Ben, mi pierna ya no podía mas, cada paso era una punzada enorme, así que tuve que arrodillarme a ayudarlo.
El pobre rostro de Ben estaba mas que lastimado, su nariz sangraba, luz labios están prácticamente reventados, y sus brazos llenos de moretones, me detuve un momento a verlo y me di cuenta de lo bello que era, así, llego de sangre y moretones se veía guapísimo.
Y pocos segundos después me di cuenta que tal vez eso de nunca quitar la vista de tu enemigo, tenia una razón, y bueno, es evitar que te maten.
Sentí unos enormes brazos aventar mi cuerpo hacia la pared, donde en cuanto me levante unas manos rodearon mi cuello apretando fuertemente, sentía como respirar se volvía imposible, pues cada vez dolía mas, al desesperarse empeño a golpear mi cuerpo completo contra la pared, cada golpe sentía como sus manos se entregaban mas en mi cuello, la presto era enorme, y podía sentir como mi rostro se enrojecía por la falta de aire, seguro ya estaba morado. Con todo el forcejeo había tirado el arma, y solo sentía como mis pies perdían contacto con el suelo, ese era mi final, no había mas. Mi vida recorrido mis ojos.
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Bad Habits. ®
Roman pour AdolescentsInterrumpir en esa pelea fue tal vez una de las mejores cosas que me ha pasado. Me acerqué un poco más para limpiar la sangre de sus labio, sin notarlo me había estado mordiendo mis labios. "Deja de morder tus labios y muerde los míos." -Dijo antes...