Antes de empezar, quiero agradecer a quienes me han apoyado y dejan sus comentarios, realmente me hacen sentir que tengo la capacidad para llevar una historia de tan baja cálida como esta y mejorar de a poco, como nunca hice con ninguna otra... Gracias <'3
Eran pocas revistas que habían en su casa, porque escaseaban a pesar de ser un lugar enorme para ser llamado como un hogar cualquiera, se basaban más que nada en investigaciones, una que otra con temática automotriz y la colección inolvidable que tenía Marco, pues estaba suscrito a un club en donde le enviaban una revista mensual acerca del cuidado de diferentes tipos de plantas.
Sin embargo, algo se salvó, una vieja colección de hojas delgadas con una portada llamativa de colores vivos, en el centro, una chica posaba mientras enseñaba su bellísimo conjunto de ropa y su peinado poco convencional, estando su rostro cubierto de maquillaje, una que otra perforación y demás.La niña, con curiosidad, comenzó con su investigación sobre aquellas páginas, llevándose consigo más de una sonrisa, habían cosas muy lindas, algunos bolsos, ropa, perfumes y cosméticos de todo tipo. Y nunca, en su corta vida, en sus trece años respirando, había pasado por su mente el hecho de que existiera una persona con el cabello rosa, o azul, quizás violeta, y el verde también era una opción, habían distintos tonos de rojo e inclusive la oportunidad de ser rubia ¡Qué mágicos! ¡Su color de piel era perfecto!
No sabía que significaba sentirse así, no sabía cómo era conocer el hecho de que puedes cambiar lo que no te gusta de ti, y ser igual... Que una muñeca.— ¡Vi-san! ¡Vi-san! ¡Mira esto! — Su emoción era tan grande que no pudo evitar querer contarle a su persona favorita lo que había descubierto y quería llevar a cabo.
— ¿Hum? — El mayor llevó su atención a la menor, quien de inmediato le enseñó el papel, casi pegándole este mismo al rostro, motivo por el cual el muchacho soltó un bufido y alejó de su rostro la revista. — ¿Qué tiene de especial esa sección? Y más importante ¿Por qué tienes esa clase de revista? No sabía que leías ese tipo de cosas. — No le gustaba, no quería verla así, no a ella, y es que aquel día, con un cartón rojo a modo de labial su alma se partió en dos. Ella era mucho más desde el día en que nació y lo vio en sus ojos cuando llegó el primer día.
— Quiero que mi cabello sea rosa, aquí dice que no debo limitarme a mi aburrido color azabache, es horrendo, a ti se te ve muy bien, pero a mí no. — La menor no sabía desde donde empezó a sentirse incómoda con variedad de cosas que antes no le molestaban, incluso desde que pasó a su segundo año luego de primaria escuchaba conversaciones sobre qué clase de cosméticos era mejor, o qué el ejercicio era de mucha ayuda... ayuda ¿Para qué?
— ¿Qué dices, niña? Te verías terrible con el cabello de otro color. — Afirmó realmente enojado.
— ¿Entonces te gusta más el azul? Creo que el púrpura es una gran opción ¿Tú no? — Estaba tan concentrada en imaginarse con una larga y hermosa cabellera de un color peculiar, poco natural.
— No, te verás fea, y si no quieres verte fea entonces no lo hagas. — A veces podía ser bastante cruel, y vio como la niña alejaba su vista de las fotos coloridas y perdía todo entusiasmo en su plan.
— Es cierto, de todos modos, Petra dice que nada puede reparar el daño que tengo por rostro. — Comentó con una sonrisa torcida, ese era un viejo secreto, pues la chica de cabellos cenizo en un ataque de ira contra la menor, durante una pelea tonta por la atención del mayor, insultó a la chiquilla, llenando su cabeza con comentarios de estereotipos clásicos, diciendo que Annie era muchísimo más linda y que en unos años a su rostro se sumaría un cuerpo deforme y lleno de grasa, auque varias cosas no sonaban tan mal, variedad de cosas no eran totalmente captadas por la mente igualitaria e inmadura de la niña.
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Pretty Little Girl
FanfictionMikasa es la pequeña adoración de una familia, conformada por Hanji, Erwin y sus hijos por adopción. Pese a que tienden a tener una gran cantidad de trabajo siempre sacan el tiempo necesario para sus hijos. Son siete hermanos para una sola niña, la...