Segunda Oportunidad

CAPÍTULO 2

¿Es... Es una visión? Se preguntaba Jonathan al ver a su alrededor a los que con anterioridad había hecho daño, escucho un sollozo y se encontró con la mirada de Jocelyn, esta a su vez acaricio su frente y le sonrió con un poco de dificultad debido al llanto.

—¿Qu..Qué paso? —pregunto con dificultad mirando los ojos verdes de Jocelyn, esta miro a Clary y Jonathan siguió su mirada, al ver a Clary con la espada Gloriosa perdió el poco color que le quedaba en el rostro.

—Todo esta bien Jonathan —le dijo Jocelyn intentando calmarlo, pero el al ver a los demás sintió terror y pánico. Se vengaran de mi...

—N..No me hagan daño —susurro bastante bajo, dudaba que alguno lo haya escuchado, Clary se acerco un poco más y este solo se pego mas a Jocelyn, ella al ver la acción de el chico se alejo y miro a otro lado un poco dolida, pero lo entendía, dudaba que él se lanzara a sus brazos como un hermano.

—¿Has dicho algo? —pregunto Jocelyn acariciando su cabello, miro a Luke y este solo asintió, dándole la seguridad y a su vez diciendo que estaba haciendo bien.

Él negó con su cabeza, esta acción hizo que tuviera un fuerte dolor de cabeza, cerró los ojos escuchando con el resto ideaba algo para salir de Edom, un lugar donde él los había llevando y de donde nunca saldrían, se sentía devastado, sus pensamientos era tan deprimentes que prefería morir de nuevo, con ese ultimo pensamiento perdió la consciencia, no sabía si encontrarían una forma de escapar, pero si era así lo mejor que podían hacer era dejarlo toda la eternidad en ese lugar.

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Cuando abrió los ojos vio un cielo llenos de nueves, era una vista muy tranquila y pacífica, movió solo un poco la vista y se topó con un pequeño querubín, cerro de nuevo los ojos y al abrirlos vio que no era en realidad el cielo, era el techo de la enfermería de algún lado, lo más seguro es que estuviera en Idris y que solo estuvieran esperando a que recuperara la conciencia para matarlo.

—¿Crees que él lo va a aceptar? —escucho la voz de Clary a lo lejos.

—Es lo mejor que pude conseguir —respondía la voz de Jocelyn, no sabía de lo que hablaban, pero supuso que era de él.

Dejo de prestar atención a lo que ellas hablaban, pensando en que era lo que tenía que aceptar, minutos después la puerta se abrió revelando a Jocelyn y Clary, ambas se acercaron a él y este con un poco de dificultad se sentó a la espera de noticias.

—¿Qué pasa? —pregunta con la voz ronca y hace una mueca de dolor, Clary le tiende un vaso con agua y él lo toma un poco receloso.

—Ya hablamos con la Clave y ya se ha tomado una decisión con lo que se va a hacer ya que tu... Bueno estas vivo.

—¿Y? ¿Me van a matar?

—¡No! ¿De dónde sacas eso Jonathan?

—Es lo más probable Jocelyn... Después de todo soy un asesino y son Nefilim...

—No, no será nada de eso.

—¿Entonces que pasara?

—Serás... Bueno...

—Serás como mamá —dice Clary hablando por primera vez desde que entro a la enfermería.

—¿Y cómo es eso? —pregunto Jonathan con intriga.

—No se te va a reconocer como Nefilim pero vas a poder usar runas... Y eso solo las básicas, de lo contrario se te encerrara en la Ciudad de Hueso y se te estará vigilando día y noche.

A eso se había reducido su vida, a estar bajo observación las 24 horas del día, no era del todo libre, estaba seguro que lo mejor hubiera sido que él no hubiera regresado de la muerte solo para eso, pero después de todo no podía hacer nada, estaba condenado a ese tipo de sufrimiento.

—Está bien —contesto sin más, se sentía perdido en todo eso.

—Perfecto, te vas a adaptar rápido a la vida en Nueva York —contesto feliz Jocelyn, podía hacer las cosas bien esta vez.

—¿Estaré en el Instituto? —le pregunto a su madre.

—No... Veras, eso...

—No se te permite la entrada, bueno solo por dos horas en ellas podrás entrenar o ir a la biblioteca y siempre en compañía de alguien, además de que es obligatorio —le respondió Clary, sabía que para su madre era sumamente difícil decirle lo que había decidido la Clave para su hermano.

—Estarás conmigo y con Luke en la casa en donde vivimos —respondió por fin Jocelyn.

—Está bien —respondió solamente el chico de cabellos blancos, no estaba bien, nada estaba bien en su vida.  

-Xx Luci xX