CAPÍTULO 3

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Jonathan miraba las paredes blancas de lo que iba a ser su nueva habitación, estaba tan concentrado en sí mismo que no escucho cuando su hermana, Clary, entro a la habitación.

—¿Te gusta la habitación? —pregunto la chica haciendo que Jonathan saltara en su lugar.

—Sí, esta... Está bien la habitación.

—No te haré nada si es lo que piensas —murmuro la chica mirando hacia una de las paredes.

—Solo es... —suspiro el chico y se sentó en la cama jugando con su manos—. Supongo que nerviosismo.

—No es como si te fuera a matar.

—Lo hiciste, de una forma u otra mataste una parte de mí.

—Y lo volvería a hacer Jonathan.

Jonathan sabía que estaba en lo cierto, pero no solo era nerviosismo, era miedo de que un día ella se confundiera y lo matara como mato a Sebastian, una gran parte de él, la que vivió por 18 años, así como temía de ella temía del resto del mundo, no sabía si en cualquier momento alguien de la manada de Luke llegaría a la casa y acabaría con su vida, una vida que después de todo no quería, pero tampoco quería morir asesinado.

—¿Qué es lo que buscas Clarissa?

—Mamá me dijo que estaba aquí y quería pasar a ver como estabas... Así que... ¿Cómo estás?

—Como se puede esperar de una persona retenida de por vida.

—No estas retenido Jonathan, solo...

—¿Solo qué? Es lo como estoy, me tienen retenido y sin poder ser libre.

—Estas en peligro, el submundo...

—No solo el submundo Clary, también el resto de los Nefilim si se enteran y según se, para esta tarde lo sabrán.

—Lo tienen que saber, se los debes.

—No, yo no les debo nada, yo no podía tener control de mi cuerpo y de mi vida hasta hace poco, y solo duro un par de minutos, porque la Clave me tiene bajo su poder, si hago algo que a ellos les parezca indebido van a acabar con mi vida, con una vida que ni quiera es mía.

—Es por seguridad —respondió la chica saliendo de la habitación y dejándolo solo con sus pensamientos.

—Es una seguridad de mierda —le logro decir a la chica antes de que esta desapareciera por completo.

Suspirando el chico de cabellos blancos se acostó en la cama mirando el techo y pensando en lo que seria de su vida en un par de horas, sino es que ya sabían todos los Nefilim de que él estaba vivo y sabia que mas de uno estaba dispuesto a acabar con su vida, aun que él no fuera Sebastian.

No sabia como debía de actuar o si alguien iría a la casa de Luke, no sabia si Jocelyn los detendría o solo los iba a dejar acabar con su vida, una vida que él mismo consideraba patética, una vida que desde ahora iba a ser llena de miedo y de dolor; con ese tipo de pensamientos bajo poco después a la sala encontrándose a Jocelyn con una hoja en manos.

—Dice que no se lo han tomado bien... Muchos de ellos ya vienen —le dijo Jocelyn a Clary con la voz cargada de preocupación.

¿Ya vienen? Se pregunto el mismo, para que segundos después un montón de gritos y golpes en la puerta principal le dieran su respuesta, ambas pelirrojas voltearon hacia la puerta encontrándose con un Jonathan de los mas pálido.

—Ve a tu habitación —le dijo Clary sacando su cuchillo serafín, él corrió hacia su habitación lleno de pánico, al llegar cerro la puerta dando un par de pasos atrás esperando que no lo encontraran, pero al parecer el destino tenia otros planes porque en ese momento la puerta se abrió de golpe.

—Por fin te encuentro...  



Xx Luci xX 

Segunda OportunidadWhere stories live. Discover now