Regresa | HS (2T)

Capítulo 29.

Aviso: Ya estoy preparando mi próxima novela :}, será también de Harry. Estaba entre dos ideas que tenía en mente; pero una me interesó un poquito más que la otra. E incluso, ¡Le hice tráiler!, cuando vaya a subirla, les dejaré el link del lindo tráiler. Y espero que también les guste y la lean :'}. 

Una pista: Habrá un Harry y un Edward :o. Pero ojo no será como las demás novelas donde son gemelos. Será original, bonita, y semi-basada en un ánime.

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Penúltimo capítulo.

Harry.

Después de despertarnos, estuve proponiéndole a Sophie que planeásemos ya la boda, que por acuerdo, será en unas semanas. ¿Quién iba a decir, que yo iba a casarme?, siempre creí que las chicas estaban conmigo por lástima, y porque... soy lindo. Diría que estoy más entusiasmado que mi prometida. Más entusiasmado porque nazca la bella Danielle. Más entusiasmado por todo. Ancioso. Feliz. 

-Princesa, dejaré que tú organices la boda; como quieras...-Dije sonriéndole.

-No, no, no... No te salvarás, Styles. Ambos organizaremos todo. ¿Bien?

-Pero...

-Pero nada.-Me interrumpió. Finalmente sonreí. 

Nos terminamos de arreglar, y salimos. Sophie en el camino iba diciéndome que no quería una boda en una iglesia; por lo que me sorprendí. Pero también, recordé que hace casi tres años, la vi casarse con un bastardo, la vi irse con el hombre que juró amar, la vi con una hermosa sonrisa, que en ese tiempo, creí que era de verdadera felicidad; pero no. Era falsa. Entonces, estuve de acuerdo; algo al aire libre sería mucho más bonito, más... libre. Entramos a una compañía organizadora de bodas, Sophie insistía con que ella pagaría en parte algo de ésto, pero me negué mil veces. Tenía el suficiente dinero ahorrado, además que la productora ha terminado mi disco titulado S.H, las siglas eran las mismas iniciales de nuestros nombres, así que me han pagado algo, y en unos días enviarán el cd a una disquera, a ver si mi trabajo daba algún fruto. 

-Pagaré todo yo, no insistas, princesa.

-¡Eres un cabezón!

-Tu cabezón.-Reí.

-Y bien chicos, ¿Qué tonos quieren en su boda?-Preguntó la organizadora.

-Esta gama... ¿Te gusta, Hazza?-Apuntó una de las gamas del libro; tonos vivos, claros, lindos.

-Perfecto.-Acoté guiñándole un ojo.

Añadimos flores, sillas blancas decoradas, todo lo necesario para que la boda fuese realmente perfecta. Y cuando fuimos a pagar, trató de convencerme -otra vez- de que pagase ella, pero por primera vez no me ganó con sus encantos. Todo sería pagado por mí le guste o no. 

-No sé por qué no me dejaste pagar.-Protestó mientras salíamos de la tienda.

-Princesa, yo te propuse matrimonio, por lo que yo debo hacerme cargo de los gastos. 

-¡Igualmente podía agar yo!

-Podías. Lo has dicho perfectamente. Lástima que ya todo esté pagado.

No dijo nada y siguió caminando por delante mío; enojada. Sonreí. En verdad no era un enojo, era un berrinche, y sé que se le pasaría rápido. Di pasos largos para alcanzarla, y la abracé por detrás, acariciendo su estómago, para después darle un beso en su oreja derecha.

-Te amo.-Susurré haciéndola parar-No es ser machista y deja que tú no pagues nada; es sólo que tengo el deseo de pagarlo todo, de hacerme cargo de nuestra boda. ¿Sí?