Un día con Itachi
Entre a la habitación de Itachi, era muy ordenada y limpia, todo estaba acomodado a la perfección, ahora que lo recordaba Itachi siempre fue así desde pequeño. Aún lo recordaba, era todo un súper dotado, nunca fallaba en nada y era muy maduro para su tan corta edad, también recordé que adoraba a su pequeño hermano Sasuke y que lo amaba por sobre todas las cosas, recordé cuando su madre Mikoto-san me encargaba cuidarlos, solo de vez en cuando ya que Itachi se creía muy grande para una niñera, pero aun así lo adoraba, bueno a los dos Uchihas. Recordé que Itachi era tan adorable de pequeño, su cabello siempre liso, y con esos grandes ojos negros tan profundos como la noche, aún no me podía imaginar que se hubiera convertido en un renegado de Konoha y lo peor ahora se encontraba dentro de la organización Akatsuki.
Se fue a sentar a la cama y dio unas palmadas a esta para que me sentara a su lado y así lo hice me senté a su lado y empezamos a platicar sobre cosas sobre nuestra infancia. Me encanta hablar con el y molestarlo recordando que ya lo había visto desnudo de pequeño. Eso asta que saco un tema algo delicado.-Oye___ - su tono de voz cambió a uno un poco más serio, lo conocía y sabía perfectamente que esto se trataría de algo más delicado -¿Por qué estabas nerviosa en el desayuno? ¿Algo te incomodo, no es así? –concluyó y más que una pregunta fue una afirmación.
-No era nada Itachi-kun, solo que se me sigue haciendo raro estar dentro de esta organización, a veces me intimidan un poco – trate de mentir, pero sabía que con el pelinegro era imposible, me conocía bastante bien.
-Sabes que no me lo creo -y ahí estaba el Itachi que conocí, él que no me dejaría ir asta contarle que era lo que me sucedió.
Pero, ¿Qué le iba a decir? “Tienes razón, lo que pasa es que ayer me acosté con Tobi y un poco antes me bese con Sasori y como Tobi nos vio me amenazó que si alguno de ustedes se me acercaba lo mataría por eso sentía esa mirada asesina de parte suya en el comedor.” Simplemente no podría decirle algo así, pero no podría mentirle porque entonces él me descubriría.
-Tienes razón Itachi-kun – dije con pesadez -pero no puedo decirte lo, aun ni siquiera se que es lo que me pasa o porque hice algo así, pero algún día te lo diré -y es que si se lo quería decir, pero moría de la pena y vergüenza que habían ocasionado mis actos.
-Por esta vez te dejare ir -di un pequeño suspiro de alivio, me lo había quitado de encima pero solo por el momento -pero después me lo tendrás que contar -yo solo asentí con la cabeza por que ya ni quería seguir hablando del tema.
Cuando recordé que ya habíamos pasado toda la mañana platicando me asuste un poco, tenía que ayudar un poco a Konan con la comida, era la única mujer y la verdad me sentía algo sola sin mujeres.
-Oye Itachi-kun, ¿Qué hora son? -pregunte algo alarmada. Él volteo su rostro a su pequeña mesita donde tenía algunos pergaminos, papeles y en un esquina de esta se encontraba un pequeño reloj.
-Son la 1:30 de la tarde ¿por qué? -preguntó como si nada y en ese momento me asuste un poco.
-Tengo que ayudar a Konan con el almuerzo -me levante rápidamente de la cama pero volví a voltear a ver al Uchiha - ¿Qué te parece si después del almuerzo entrenamos un poco? -pregunte entusiasmada, y es que como olvidar esos combates que tenía con el pequeño.
-Sería todo un honor volver a combatir contra ti -comentó con una sonrisa en su rostro, no se por que no sonreía más a menudo, es muy guapo.
-Ok nos vemos, adiós -salí del cuarto del pelinegro lo más rápido que pude, me concentre en los chakras y reconocí cada uno de ellos, pero por alguna extraña razón no detectaba el chakra de Tobi.
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Juegos de Pasión⇨ [Tobi//Obito&Tú]
Fiksi PenggemarEstá es una historia llena de pasión, amor, lujuria, deseo y desenfreno sexual... pero también odio, rencor, ira, traición, celos y muchas cosas más, vamos a ver como la vida de nuestros protagonistas da un giro de 360° cuando se vuelvan a encontrar...