All I Wanted ➳ NejiTen

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No existía en todo el mundo una maldita palabra que definiera todo aquello que sentía que explotaba en ese mísero momento dentro de mí. Uno no terminaba de conocer a las personas, y a pesar de que tenía que aceptar mi gusto por Neji Hyūga, no era ciega y sabía que ilusionar a una persona era algo patético. Aunque no pensé mucho a la hora de querer ayudarlo, porque sé que nos beneficia a los dos.
Sin embargo, el brillo en los ojos de Shion me hacía pensar las cosas dos veces. Iba a salir muy herida de todo esto.

Aunque de cierta forma se lo merece.

—¿Qué haces aquí? —preguntó alguien y a pesar de que no entraba en confianza demasiado fácil, me lancé a los brazos de Lee. Ya no estaba llorando, simplemente sentía que mi cabeza no estaba en este mundo y necesitaba que alguien me devolviera a la realidad.

—No quisiera interrumpir este bello momento, pero alguien puede vernos. —susurró dándome palmaditas en la espalda.

Me separé de él e intenté arreglarme lo más que podía apretando los labios.

—¿Me vas a decir qué carajos fue eso? Y ¿por qué estabas escondida bajo mi escritorio? —Lee comenzó a invadirme de preguntas y yo le dediqué una media sonrisa al ver su preocupación.

Sin embargo, una joven de ojos miel y piel morena llegó de repente a la escena haciendo que tanto Lee como yo dejáramos el bonito ambiente de lado.

—Disculpe, pero el horario de visitas ya terminó. —dijo Lee en un tono de voz áspero el cual me dio risa.

—No vengo a ver a un recluso, estoy aquí para buscar a la señorita Shion.

Ese nombre definitivamente no me terminaba de agradar.

—¿Alguien me llamó?

Hablando de... Como sea. El ambiente se colocó aún más tenso cuando de reojo vi a la figura de Neji en una silla de ruedas. Atrás estaba Shion llevándolo e Ino iba al otro lado.

Kiba no estaba.

—Sí. Mi padre ayer llamó diciéndome que gracias a una ayuda que le había brindado a Neji Hyūga, ahora podría obtener trabajo. —comentó la chica a lo que yo fruncí el ceño.

—Ah ¿sí? Debió haber sido una ayuda muy grande entonces... —dijo Shion como si le estuviera pidiendo una explicación a Neji cuando esa maldita no tenía nada que hacer aquí.

Sentí la pesada mirada del Hyūga sobre mí, pero yo solo me mantenía mirando al frente ignorando su presencia por completo.

—Necesitaba papel higiénico —respondió en un susurro.

—Es verdad, no han llegado fondos ni siquiera para eso. —se apresuró a agregar Lee haciendo todo más creíble.

—Oh, si es así entonces le diré a mi padre que invierta mucho más dinero en esto. No puedo dejar que pases por necesidades tan básicas como esa.

Y entonces ahí no pude más.

Tomé mi bolso con fuerza y me giré para despedirme de Lee.

—Gracias por haberme dicho en dónde quedaba la enfermería. —entonces le dediqué la mirada más gélida a Neji y agregué—. Cuando encuentre algo más, me encargaré de contactarte. Por ahora déjame descansar un poco.

Y me fui como alma que lleva el diablo. Sin embargo, Ino me llamó cuando ya estaba en la parada del bus. Intenté ignorarla, pero entonces se paró al frente mío con la respiración ahogada.

No quería saber nada más de ellos por un tiempo, y por eso no quería escucharla.

—Tenten. Shion está tan loca que es capaz de conseguirte todo para el juicio. Sin embargo, ella no es la única dentro de todo esto. Por favor, ten cuidado. Yo de ti no saldría mucho a la calle.

Genial.

—Cuando tomé este caso, sabía que tenía que atenerme a esto.—dije sin un rastro de sorpresa— así que no entiendo tu punto.

Ella se pasó su mano por el cabello exasperada. ¿Qué tanto le preocupaba?

—No lo entiendes. Ahora todo esto es peor. Shion es una idiota, ¡una idiota! La van a matar, y después a mí por no haberle hecho recapacitar. Sino es que antes van por ti. —susurró amenazadoramente— tú eres esa pieza clave para sacarlo de esa pocilga, pero sabiendo cómo son ellos no van a dejar que la empresa se les vaya así. Solo... Te van a matar... A todos nosotros.

Mierda. No me había detenido a pensar en aquello, y ahora que lo hacía me daba cuenta que no me importaba.

Sonaba cursi, pero no me detendré hasta ver a Neji en libertad. No lo repetiré hasta que lo consiga.