Cap. 38 - Ella no es tuya.

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Ese sábado fueron al pueblo, Ambar, Luisa, Zabini y sus 2 amigos. Tom se quedó con sus seguidores en el castillo, porque sabía que si veía a Marcuz con "su chica" intentando algo lo mataría sin piedad después de torturarlo mental y físicamente. Los 5 pasearon por Hogmeade muy alegres, la rubia conoció más a su nuevo amigo, descubriendo que era muy divertido y le gustaba mucho la herbologia

-Mira esto, es una Acónito, es extraño encontrarla aquí, son más comunes en Escocia y sus flores se usan para pociones matalobos, son preciosas- decía el chico encontrando una extraña planta con tonos violáceos en un pequeño parque del pueblo poniéndose de cuclillas para verla más de cerca

-Realmente se ve linda, sabía que eras bueno en Herbologia, siempre sacabas Extraordinario en los exámenes – respondió la rubia cuando quiso tomar la planta y él le tomó la mano bruscamente

-No la toques Ambar, sus raíces son muy tóxicas, y la planta no tiene nada de delicadeza, de hecho estas muy cerca – explicaba Marcuz cuando Ambar le sonrió aun sin soltarse las manos, ella se sonrojo y el chico la soltó luego de unos largos segundos viéndose fijamente

-Am-m bueno me-me parece genial que te gusten las plantas, a mí también me gustan bastante- explicó la rubia parándose correctamente cuando este la imito y volvió a sonreírle

-A mí me parece genial que seamos amigos, siempre quise llamar tu atención - hablo el castaño algo nervioso y risueño, cosa que a la chica le pareció muy tierno, pero el momento fue interrumpido por Luisa que salió corriendo hacia la rubia casi saltándole encima

-¡Ya abrió la tienda de dulces, vamos! ¡Vamos Ámbar más rápido niña! gritaba Parkinson cuando los 3 corrían riendo a la tienda encontrándose con los amigos de Zabini

Así pasaron semanas y Ámbar se llevaba muy bien con el castaño, mientras que Tom no hablaba mucho con la rubia más que en las juntas de mortifagos a los que después dejó de asistir, en las clases o en el gran comedor, cosa que al peli oscuro comenzó a molestarle muchísimo, estaba perdiendo a su reina. Llegó el 1 de diciembre, Marcuz aprobó con un "Supera las expectativas" las evaluaciones previas a navidad, la rubia se iría el viernes 18 a su casa a pasar las fiestas con su familia mientras Tom se iba a su mansión pasando su primera navidad después de 7 años, lejos de ese castillo.

Estaban cenando en paz, Ambar charlaba con luisa sobre la profesora de defensa contra las artes oscuras

-Solo digo que lo que menciono sobre los hombres lobos fue horrible, ellos son personas como nosotros que no pueden controlar su mala suerte cuando sale la luna – decía Luisa enfadada por la clase de ese dia

-Lo sé, fue maldito, y más sabiendo que el chico de Gryffindor tenía a un padre hombre lobo antes de que lo mate el ministerio respondió Ambar cuando llego Marcuz y se sentó a su lado

-¿Hablan sobre la clase de Merrythought? Es una irrespetuosa, pobre Jordan, salió corriendo de la clase - dijo el castaño, cuando Tom quien se sentaba en frente como siempre lo miraba de malas

-Zabini, ¿Sientes lastima por el Gryffindor? Que débil ¿de verdad eres una serpiente? – preguntó Tom con una mirada de superioridad cuando Ámbar lo miro mal

-Tom no seas tan frío, el chico perdió a su padre – explicó la rubia con el ceño fruncido

- Riddle no hablaba contigo – dijo Marcuz disgustado, y en la cara de Tom surgió una sonrisa maliciosa – Ambar ¿me acompañas al despacho de Trelawney? Debo devolverle esto - se dirigió a ella mostrando un libro, por lo que el peli oscuro volvió a fruncir el ceño con furia antes de ella asentir y pararse de la mesa caminando con el chico a la salida. Cuando dejaron el libro al profesor e iban yendo a la sala común Marcuz se paró repentinamente haciendo que esta se volteara a verlo extrañada

-¿Sucede algo? – preguntó Ámbar a su amigo mientras ente rascaba su cabeza

-Ambar yo... - comenzó a tartamudear cuando la rubia sonrió amablemente y se acercó al chico –Quiero decirte algo –

-Escucho Marcuz – explicó

-Bueno, es que estos meses fuiste muy paciente conmigo Ambar, eres tan buena... tan comprensiva conmigo... y no me tratas como otras chicas, eres más dulce... Lo que quiero decir es que me gusta mucho como eres, me gustas bueno - Fue entonces cuando la rubia se detuvo a analizar cada palabra, cada expresión, cada movimiento del chico, Ambar sentía un cariño extraño por él y tal vez también le gustaba... Tom no era como él, era otro tipo de amor, entonces se confundió terriblemente e inconscientemente dio una sonrisa que Marcuz noto, por lo que se acercó más a ella asesinando la distancia, acomodo un mechón de pelo detrás de la oreja de la rubia, Marcuz era un poco más alto que ella por lo que se agacho y sin esta poder reaccionar la beso con una pasión distinta a la que Tom le daba, ella no quería herir a Zabini, el beso le gustaba, sus emociones estaban explotando, no sabía que estaba pasando cuando el chico separó sus labios y Ámbar sin mostrar expresión alguna salió corriendo tratando de esconderse -¡AMBAR! Por favor espera – escuchaba los pasos del castaño detrás de ella cuando pudo escabullirse y esconderse entre las gárgolas de los pasillos llena de rabia, desesperación, confusión y miedo, lentamente quedó sentada en su escondite y terminó por quedarse dormida entre aquel frío y oscuridad.

Tom Riddle: La MaldiciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora