Miraculous... ¡Lordbug!

Extra 6

[WICO]

París- Francia (catorce/quince años)

Ya habían pasado prácticamente seis meses, casi siete. La vida de Will seguía igual de siempre, con la diferencia que tenía que soportar a la novia de su amigo. Si, su novia, como han leído. Fue como un baldazo de agua fría para él cuando Nico se lo dijo con tanta alegría.

"¡Estoy saliendo con Shaila! ¿Puedes creerlo?"

Aquella sonrisa que él le había dado hacia que la herida sea peor de lo que debería. Ya era hora de rendirse ¿no? Nico no se haría homosexual de la noche a la mañana y si lo hiciera, no se fijaría en él. ¿Por que lo haría? Tenía uno de los peores caracteres del mundo, una vida problemática y una belleza espantosa.

Pero ¿en quien se fijaría?

Los demás chicos que conocía no tenían ese "algo" que le gustaba. Y ese "algo" solo lo tenía Nico, pero él no estaba disponible. Y nunca lo estaría.

Caminaba en dirección al colegio. Tenía frío. Todos sus abrigos tenían agujeros por culpa de las polillas. Y no tenía ganas de usar los abrigos de su hermana o madre, ellas eran muy llamativas. Por suerte tenía sus guantes puestos (aunque eran sin dedos). Corrió hacia el interior del colegio cuando vio que no había nadie en su alrededor ¡Estaba llegando tarde!

-¡Rayos!-se quejó. Entró corriendo y subió las escaleras hacia el segundo piso, donde estaba su salón. Abrió con cuidado la puerta al ver que la profesora estaba por hablar- Buen Día... lamento la tardanza...-la profesora suspiro.

-Que no se vuelva a repetir, Bourgeois-él asintió. Buscó con la mirada a su compañero de banco: Nico.

Lo que encontró no le gustó para nada.

¡¿Qué hacia sentado con Shaila?! ¡¿Tan rápido encontró un remplazo?!

Si no estuvieran en clases, ya le habría lanzado una maldicion estilo villana de cuento de hadas. Y la expresión de Nico le enojaba más, cómo si fueran una pareja y le hubiera metido los cuernos a Will, y que este le había descubierto. Respiró profundo y buscó quien se sentaba solo.

Por suerte el australiano que vino de intercambio estaba solo. Con cuidado fue hasta él, quedando parado al lado del asiento esperando la aceptación de su compañero. No quería hablar primero, no era alguien que quisiera socializar.

Entonces el de intercambio le miro.

Tenía los mismos hermosos ojos celestes que Nico.

-¿Esperas una aprobación?-arqueo una ceja. Era distinto a Nico. El australiano, era prácticamente igual a Luke Hemmings.

Y eso le resulta atractivo. Además del hecho de que vestía de negro y tenía piercings. Uno en la oreja y otro en el labio, ambos de color negro. Su cabello era entre rubio y castaño y se notaba que hacía ejercicio.

Will volvió a la realidad cuando él chico alzó las cejas esperando una respuesta. Y entonces volvió a ser el Will de antes, el que odiaba a la gente. Frunció un poco el ceño y gruñó.

-Estoy seguro que tuya, no-lanzó la mochila hacia el asiento y reposo sus pies sobre el banco, dejando a la vista sus botas negras acordonadas que combinaban con sus jeans gastados. Will no lo notó, pero Nico si:

Aquel australiano sonreía victorioso por tener al pequeño francés a su lado.

Oh, Nico la gata estaba furiosa por ello. ¿Por qué? No lo sabe.

Y esa extraña sensación que él tenía se incrementó cuando el australiano decidió hablarle al pequeño ¿Lo peor? ¡Que Will le contestó bien! ¡Por lo que siguieron hablando!