Viva

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Metí un contenedor en la mochila de Daniel.

—Es lo último—dije y la cerré.

—Bien, es hora de irnos ¿Estas lista?—me dice con una sonrisa.

Asentí con la cabeza.

Daniel comenzó la marcha hacía Catedrel.

Yo iba pegada a su espalda, giré mi cuerpo para ver por última vez la cueva y cómo quedaba atrás lo que alguna vez fue Edrill.

A cada paso estaba más lejos qué mi madre, no pude evitar que una lágrima y un sollozo saliera de mí. Daniel se percató de eso, paró por un segundo, me miró a los ojos y extendió su mano hacia mí, entrelace mis dedos con los suyos y así seguimos el camino.

Traté de mantener la frente en alto, igual que mi madre solía hacerlo , ella era fuerte , la mujer más fuerte que conocí , jamás la había visto derrotada , ni mucho menos llorando , quizá sólo una vez, pero el recuerdo era tan lejano que se confundía con sueños.

O eso quería yo creer.

MAÑANA ES MI CUMPLEAÑOS.

10 de abril del 3004.

Mi último día con 4 años.

Me levanté de la cama. El piso estaba frío, me puse mis pantuflas y fui al cuarto de mamá, paré justo enfrente de la puerta al escuchar unos sollozos.

Entré y vi a mi madre en la cama, tenía las manos en la cara y lloraba.

Mami ¿qué tienes? pregunté inquieta.

Ella levantó la cara para verme.

Extendió los brazos para que me acercara a ella.

Eres tan pequeña e inocente dijo, abrazándome.

¿Mamá, qué pasa? dije mirándola.

Recuerda, todo es por tu bien y el de los demás me sentó en sus piernas de frente a ella existen ocasiones en las que uno tiene que hacer algo, que parece totalmente erróneo, pero es lo correcto dijo limpiándose las lágrimas.

¿Qué es erróneo? pregunté, inclinando ligeramente la cabeza.

Eres muy inteligente Keyra, tienes cosas que ningún otro niño o persona tendrá en toda su vida -titubeó - pero todo tiene un precio pequeñadijo, volviendo a llorar.

TósigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora