Capítulo 26. La canción del corazón

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Desde el instante en que Eriol y sus guardianes pisaron la plataforma sobre el segundo mirador en la Torre de Tokio, se vieron víctimas del furioso ataque de una horda de espíritus cuyo objetivo era proteger a Hiro, el shura, que estaba de rodillas en medio de un círculo mágico dibujado en el suelo.

Eriol no podía escuchar lo que decía el antiguo amigo de Clow, pero era obvio que recitaba un conjuro, estaba abriendo poco a poco la puerta entre mundos, de ahí habían salido los demonios que vieron bajar unos minutos antes. A unos pasos del brillante portal estaba parado Gao, orquestando el ataque en contra del mago inglés, Nakuru y Spinel.

Tomoyo se había comportado toda la noche como la anfitriona perfecta, sirvió la cena a sus amigos e invitados, platicó y bebió con ellos hasta las dos de la mañana cuando por fin se quedaron dormidos

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Tomoyo se había comportado toda la noche como la anfitriona perfecta, sirvió la cena a sus amigos e invitados, platicó y bebió con ellos hasta las dos de la mañana cuando por fin se quedaron dormidos.

Los únicos que aún deambulaban por la mansión eran los tres ninjas que se escondían en las sombras, los esposos Takano y ella, lamentablemente ninguno poseía magia por lo que no tenían idea de lo que estaba sucediendo, además Kaho y Touya aún no habían regresado.

La chica caminó hacia el jardín, miró la luna en lo alto y se quedó parada en la mitad del puente del estanque, en aquel lugar había dejado atrás todos los prejuicios que se había creado alrededor de Natsuki ¿Qué estaría pasando allá ahora?

Para Nakuru y Spinel lanzar uno o dos ataques directos de su magia era más que necesario para disipar a los espíritus, Eriol se limitaba a ahuyentarlos con su báculo, sin embargo, por cada presencia que se esfumaba Gao parecía invocar a dos más

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Para Nakuru y Spinel lanzar uno o dos ataques directos de su magia era más que necesario para disipar a los espíritus, Eriol se limitaba a ahuyentarlos con su báculo, sin embargo, por cada presencia que se esfumaba Gao parecía invocar a dos más.

El círculo brillante, el portal, permanecería activo hasta que derribaran al shura, pero necesitaban a Tsuki o Ryu para que usaran su magia espiritual, sin embargo, no había señales de ninguno, además después de que los seis demonios aparecieron...no tenían muchas esperanzas de que llegaran pronto. Nakuru protegía la espalda de Eriol cuando seis ánimas se lanzaron sobre ella, la derribaron y aprisionaron contra el piso, sosteniendo sus alas y su garganta tratando de ahogarla.

—Maldición —gritó Eriol frustrado— ¡Basta!

Apretó su báculo con ambas manos, cerró los ojos y lo levantó para después clavarlo en el suelo con fuerza, su círculo mágico se iluminó e incontables tentáculos negros comenzaron a aparecer elevándose hacia el cielo, entonces abrió los ojos de golpe y cada una de las largas sombras se clavaron en el pecho de los espíritus haciendo que se retorcieran "Vamos Tsuki, te necesito aquí ya, o agotaré mi magia" pensó la reencarnación de Clow.

Card Captor Sakura "La antigua Profecía"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora