Amor, Traición, Sexo y Deseo..

55

Días después..

¡No quiero saber nada de usted! acaso no entiende?! - camine a la sala.
váyase señora. por favor - apunte a la puerta.

¡No! - grito.
no me iré hasta que me escuches. - hablo más calmada, yo solo renegué.

No quiero - la mire molesta.
Ni siquiera quiero verla. - hice una mueca.

Elena la niña no quiere verte. - hablo mi nana preocupada.

No, no me iré hasta que me escuche. - se sentó en la sala.

Bien. – reí sarcástica.
Ahí quédese toda la vida si quiere. pero yo no voy a escucharla. – comencé a caminar y Elena me siguió hasta donde llegue.
Diiiiioooooos - grite bajo.
Acaso me va a dejar en paz! - la mire con cara de desagrado.

No - hablo.
Así que escúchame es todo lo que te pido. - comenzó a llorar.

Bien, vamos a ver que mentiras me dirá ahora. - fui de nuevo a la sala y me senté, mi nana se fue a la cocina y elena se sentó frente a mí.

Bien. – respiro hondo.
Son muchas las cosas que tengo que decir.. y no sé cómo empezar - se tocó el cabello.

Empiece ya. – hable molesta.

Conocí a Álvaro cuando yo tenía 15 años, lo miré por primera vez cuando mi padre había llevado a toda la familia a ser los meceros en un salón en donde sus padres harían una fiesta. eran puras personas elegantes y finas, él había cumplido 17 años y tenía un enorme carisma siempre muy respetuoso con todos - sonrió.
Jamás pensé que él se enamoraría de mi tan profundamente como yo lo estaba de él, nos hicimos novios, sus padres me veían bien me decían que era parte de la familia, que era la mujer que el necesitaba a su lado. - rio.
Alexander era el mejor amigo de Álvaro.. él siempre me decía que me amaba y que estuviera con él y no con Álvaro, que Álvaro no me merecía y que era un mujeriego, pero yo nunca le hice caso, él siempre supo que Álvaro era a la persona que amaba. - comenzó a llorar, yo solo pase saliva.
Una vez me sito en un lugar, para hablar sobre un posible nosotros pero yo iba a aclarar las cosas con el.. Álvaro me había pedido matrimonio lo cual a Alexander le molesto y yo le volví a dejar las cosas en claro que siempre iba amar a Álvaro, pero el saco toda su furia y - se calló, me sentí mal por ella.
El abuso de mí, jamás borrare de mi mente ese maldito recuerdo. - me miro a los ojos, podía ver como sus lágrimas salían una tras otra, mis ojos se aguaron, pero intente que no saliera ninguna lagrima.
y fue ahí en donde todo cambio __ le tenía miedo ya que era mayor que yo y mayor que Álvaro, me obligo a estar con él, me decía que mataría a Álvaro y mataría a mi hijo.. David. - se limpió las lágrimas.
El siempre creyó que solo nacería David., es lo que yo le hice creer. Álvaro jamás se enteró de la violación y aun no lo sabe, hice todo lo posible por que Álvaro y yo tuviéramos relaciones así podía decirle que estaba embarazada de él, cuando ambos nacieron, obligué al doctor a que ni Alexander ni Álvaro supieran que eran dos pequeños, dos hermosos bebes. - sonrió.
Después de todo eso, me vi obligada a dejar a Álvaro. todo por salvarlos a ambos y de eso jamás me arrepentiré - sonrió entre lágrimas.
Ahora tengo que vivir el resto de mi vida con la persona que odio, pero que también quiero - me miro.
Alexander tu padre. -
Álvaro jamás me perdonara y lo sé, yo tampoco lo haría, está en todo su derecho, pero quiero que sepa que siempre lo ame como a nadie - suspiro.
Y le doy la gracias por haberte criado lejos de mi – sonrió tierna.
te hizo una chica de bien.
Solo espero que algún día me perdones por haberte dejado, créeme que jamás lo hubiera hecho y no sabes cómo estoy arrepentida. - una última lagrima callo por su mejilla al igual que a mí, no podía decir nada estaba impresionada.
Gracias por escucharme. - sonrió.
espero algún día me perdones hija - se levantó del sofá, se acercó a mí, me beso la frente, la vi salir de la casa, yo me quede ahí sentada hecha un mar de lágrimas, lo mismo que sufrió Elena con Alexander lo sufrí yo, pero él es mi padre y se atrevió a hacerlo, no se si lo sabía o no, talvez no, pero tampoco tenía el derecho de obligarme a estar con él.

Hola mi amor. - me abrazo.
Te traje tu malteada favorita y tu hamburguesa. - me beso la mejilla.

Gracias pa.. - sonreí.
Ya no se si llamarte papá o Álvaro. - lo mire a los ojos.

Tú puedes llamarme como quieras ____ - me beso.

Pero, es muy raro llamarte papá y besarte - mis mejillas se tornaron a rosadas.

Bueno entonces fuera seré tu padre y aquí seré Álvaro. - rio.
¿Y qué has hecho princesa? - se sentó junto a mí.

Estaba desayunando cuando Vino Elena.. - lo mire tranquila y él se molestó.
No se fue hasta que hablo conmigo, se quedó aquí 2 horas.. -

Cuando dejara de molestarnos esa mujer. - renegó.

Me lo ha dicho todo. - mis ojos se aguaron.
Jamás quiso dejarte – ambos nos miramos.

Pero lo hizo.. - se levantó.
Y eso, siempre me dará motivos para no poderla ver nunca – yo lo volví a sentar para decirle todo lo que Elena me había contado, el no dijo nada y quedo paralizado, sus ojos estaban llorosos, pero jamás vi una de sus lágrimas caer, se levantó de nuevo y comenzó a subir los escalones.

Papá - lo mire.

¿Sí? - voltio a verme confundido.

Podemos perdonarla algún día - cerré mis ojos.

Tal vez tu si, pero.. yo no lo se.. - solo se escuchó la puerta de la habitación cerrarse.

No sabes cuanto te extraño David, ya ha pasado una semana- mi voz se quebró.
Ya han pasado 25 días desde tu partida. - susurre.
Pero sé que nos cuidas desde el cielo y como quisiera decirte que te extraño y que te quiero, hermano - suspire triste me levante del sofá y salí de la mansión, para ir al pequeño parque que estaba por la casa, me senté en la banca y cerré mis ojos.

____.. - toco mi hombro yo abrí mis ojos al tope.

¿Qué quiere? - lo mire asustada.

No, tranquila, tenemos que hablar - me miro con los ojos llorosos.

No, yo no tengo nada que hablar con usted. - me levante y camine un poco, pero sentí su mano en mi hombro.

Por favor. - se calló.
Hija..

Bien, solo espero que así me deje en paz. - me senté en la banca de nuevo y el también.

Perdóname ___.. - comenzó a llorar.
Perdóname, jamás pensé que llegarías a ser mí, hija - me miro entre lágrimas, se veía mal, ojerosos, más delgado y demacrado.

Fuera o no su hija no le deba derecho a hacer lo que me hizo. - mis ojos se aguaron.

Lo se - paso saliva.
Y estoy muy arrepentido. – no dejaba de llorar, se estaba se hinco frente a mí.
En verdad me duele, perdóname ___.. - me tomo la mano, no la quite por que me daba pena verlo como estaba, pero perdonarlo no lo se.

No lo sé señor, usted me ha hecho daño y ha dañado a mi familia. - lo mire con odio.
Lo sé todo, sé que obligó a Elena a estar con usted y dejar a papá, ¡sé que la violo como a mí! - grite llorando.
Y ¿así quiere que yo lo perdone? - reí entre lágrimas.
No señor, jamás debió separar a una familia que se amaba. - me solté de su agarre.
Así que le pido, que no se acerque a mí ni a mis hijos.. - comencé a caminar para volver a casa, y dejé a mi "padre" destrozado en el suelo como alguna vez quise verlo.