Cielo inmenso de estrellas palpitantes
Dime si el mundo es tan malvado, como parece ser
Si los caminos se unen y se separan, o se rompen sin querer
Dime si estoy haciendo bien, entregándome a él
Encajando nuestras vidas, aunque sean de papel
Y cielo que eres tan brillante y tan ajeno, ven
Recuérdame que soy polvo, y que como polvo regresaré
Y que los días se escapan, si no los atrapas bien
Y que mi mente me odia, pero que aún así lucharé
Lucharé por mí y ti, cielo
Por reír y por reflexionar con la piel de gallina
y las estrellas fugaces surcando tu negrura
Con cuerpos que tiritan de frío y que cuentan historias
Con amor y con manos que rozan manos
Porque la vida merece la pena, cielo
El bosque y el aire de la mañana
Y el rosa tiñendo los árboles en la tarde
Y la risa y las mejillas sonrosadas y el calor de un abrazo
Y en este momento en el que te miro y te miro de verdad
Aunque con la cabeza a rebosar de preguntas
Y la vida llena de cicatrices
Me siento eterna cielo, y esto,
Esto merece la pena.
ESTÁS LEYENDO
Las horas tristes
PoetryLas horas se deslizan, caminan sigilosas, y tristes, se depositan en los ojos y en la garganta. Este es un poemario de una vida que bien podría ser la tuya. El amor y la ausencia de él, la tristeza, la alegría, y la soledad son algunos de los temas...