Our Angel (One Direction & tú)🌙

Capitulo 2O.

La cena con mis padres sería mañana y tenía montones de cosas que hacer. Lo primero que hice fue ir en bus a una plaza que estaba cerca mío. Y me compré ropa. Mientras caminaba viendo todas las tiendas ví a Louis con la chica de ayer.

Y recordé.

Un color rojo cubrió mis mejillas por completo y me metí a la primera tienda que ví. Donde por cierto vendían cosas muy bonitas y termine comprandome muchas cosas ahí. Me distraje un poco viendo las tiendas y al final de comprar todo salí de la gran plaza. Mi estómago estaba vacío y tenía hambre.

Cuando iba a tomar el bus un Jeep familiar se puso enfrente de mi y se bajo la ventana para dejar ver a un Louis con lentes y cabello desacomodado. Mis nervios empezaron a crecer y no sabía que hacer.

- ¿Te llevo? -Pregunto quitándole el seguro a las puertas del Jeep.

Me subí en el y acomode mis bolsas en algún lado.

Louis me miró y sacó un cigarrillo de su chaqueta. Lo prendió y empezó a fumar. Me enojé por ello. Fumar estaba mal.

- Pensaba que no eras de las chicas que compran ropa en exceso -Dijo riendo.

Rodee los ojos por ello.

- No lo soy -Hablé en voz baja, como si tuviera que pedir permiso para hablar- mis padres vendrán mañana y no tenía ropa bonita.

- ¿Tus padres? -Me miró y asentí, pero cambio de tema y poso su mano en mi pierna descubierta.

Me removí incómoda pero apretó mi pierna para que dejarla de hacerlo. Lo miré y sabía que él pensaba tener todo control sobre mí. Empezó a subir su mano causándome escalofríos. Pero quité su mano descaradamente. Él frenó de golpe y me miró. Le regresé la mirada y volvió a prender el Jeep.

- Acerca de lo de ayer -Comentó furioso- sólo quería jugar.

Me sorprendí, porque este chico era un orgulloso. Era una de esas personas que si las rechazas te recuerdan cosas pasadas y te rechazan.

Me encogí de hombros y se estacionó. Estábamos frente a mi casa. Me acomodé mi cabello y di las gracias en voz baja. Bajé mis bolsas y Louis se bajo seguido de mí. El pánico entró en mi y buscando mis llaves rápidamente abrí la puerta de mi casa intentando cerrarla al instante. Pero el pie de Louis me detuvo y entro azotando la puerta y empujándome hacía la pared. Mi respiración se escuchaba. Era lo único que se escuchaba.

- Yo mandaré y tú obedeceras -Susurró en mi oído.

Me negué. Y Louis apretó mi brazo furiosamente haciendome gemir de dolor.

- Suéltame imbécil -Gemí- yo no quiero nada contigo.

Louis terminó de apretar mi brazo y salió de mi casa furioso.

Mi día no fue tan interesante después de eso.