Our Angel (One Direction & tú)🌙

Capitulo 66

Me removi en la cama encontrándome a ángel a mi lado y sonreí. Estaba desnuda. Mire sus caderas y sus largas piernas. Esta chica era perfecta en todo el sentido de la palabra. Besé su cuello y ella rió tiernamente. La gire para que quedará mirando hacía arriba, al igual que yo. Me abracé a ella sin querer soltarla. Ella rió.

– Debemos ir a desayunar –Ella dijo y me sonrió. Negué.

– Quiero hacerte mía, de nuevo –Dije cerrando los ojos y ella gimio. Me levante poniéndola debajo mío y ella rió.

– Debemos de bajar, o ellos vendrán –Dijo divertida y su sonrisa cambió a una mueca de placer cuando entre en ella.

– Joder, ángel –Gruñí.

– Liam –Dijo ella–, detente, ellos vendrán –Dijo riendo.

Toqué de nuevo su punto debil y ella ahogó un grito.

– ¿Me detengo? –Dije burlón mientras entraba y salía en ella. Era la mejor sensación del mundo. Y verla debajo mío temblando de placer era simplemente genial.

– No –Dijo gimiendo.

Entraba y salía tocando su punto débil. Comencé a besarla lentamente para callar sus gritos, pero esta chica era completamente ruidosa. Tome sus lindos pechos entre mis manos y ella jadeo al tacto.

– Liam, ¿acaso me quieres matar? –Dijo cerrando los ojos y disfrutando de mis caricias. Con una mano estimule su clítoris y ella comenzo a salirse de control.

Su rostro era el cielo para mí. Sus gemidos erizaban mi piel.

– Maldita sea ángel –Me queje sintiendo su cuerpo apretar el mío. Nuestras respiraciones estaban agitadas. Y sentía mi cuerpo cosquillear.

– Liam, diós mío Liam –Dijo gritando.

Lami sus inigualables pechos y su rostro se volvió más calmado. Iba a acabar con ella, joder, la iba a corromper completa, iba a lograr que gritara millones de veces mi nombre.

Quise jugar un poco así que salí de ella y ella se quejó. Reí y escuche su gruñido. Besé su cuello, sus labios, sus pechos, su vientre. Besé todo su cuerpo mientras ella temblaba. Pase mi lengua por su entrada y metí dos dedos en ella, estaba chorreando.

– Umnh –Dijo ella acariciando mi cabello. Me encantaba verla así.

Intente encontrar su punto debil con mis dedos, y supe que lo había encontrado cuando su cuerpo tembló de más. Lo toque varías veces mientras mi lengua se centraba en su clítoris.

– Liam, por favor –Tembló ella. Y seguí acariciandola como si mi vida dependiera de ello. Veía como su cuerpo tenía contracciones y detenía mis movimientos. Después de repetir eso cinco veces dejé que tuviera su orgasmo. Y lo hizo tapando su rostro y temblando sin parar.

Cuando recobro el control me besó desesperadamente. Sonrió y se puso encima mío. Tomo mi miembro en sus manos y lo introdujo en ella cuidadosamente. Muy lento.  Haciendo ruidos de placer y dolor. Cuando entró por completo subía y bajaba por mi longitud sin ninguna prisa. Cerró los ojos disfrutando cada caricia, me encantaba verla concentrada. Por mi parte, mis manos estaban detrás de mi cabeza mirando como ella tomaba el control. Sus pechos subían y bajaban al compás de sus movimientos.

Ella se sujetó de mi estómago y comenzó a moverse rápidamente ganándose unos quejidos y gruñidos de mi parte. Ella gemía y yo gruñia.
Mi cuerpo comenzó a tensarse y sentí como la llenaba de mí.

– Ahg maldita sea –Gruñí.

Ella rió y salió de mí lentamente. Tomó mi longitud en sus manos y tomó un poco de «mi» en sus manos, me vió y lamió sus dedos. Reí.

– Eres una sucia –Dije burlón.

Ella me sonrió y me guiñó el ojo.

Me encantaba.