Madre y novia a la fuga |H.S|

Capítulo 4

La luz del sol que entraba por el ventanal me hizo despertarme. Me desperecé y abrí los ojos. Mientras me levantaba, pasé la vista por la habitación y me percaté de que de día era aún más grande. Me encaminé al baño, pero paré al recordar algo...

¿Dónde narices esta mi hija?

Salí de la habitación a toda prisa y bajé las escaleras, maldecí cuando casi me caigo.

- ¡Elena!- grité asustada.

- ¡Estamos aquí!- oí una voz que provenía de la cocina. Corrí hasta ahí y suspiré aliviada al ver a Elena sentada en un taburete junto a Louis y a Harry preparando el desayuno.

- Buenos días Sami- saludó Louis con una sonrisa.

- ¡Hola mami!- Elena bajó del taburete y saltó a mis brazos.

- Hola cariño- le di un beso en la mejilla y ella volvió a su sitio.

- Buenos días dormilona- habló Harry.

- ¿Qué hora es?- pregunté llevando una mano a mi boca para tapar un bostezo.

- La una del mediodía- respondió Louis.

- Ah- callé un momento y reí- Pues entonces no estas haciendo el desayuno-

- Nop- negó Harry sonriendo.

- Pues entonces buenos...¿Mediodías?- pregunté confusa haciendo que Louis y Harry rieran.

- Buenos mediodías- saludaron a la vez.

- ¡Mami! ¡Mami! Mira que me ha compado Niall- exclamó Elena enseñándome oso de peluche rosa.

- ¡Que chulo!- sonreí al ver a mi hija feliz- Gracias- le agradecí a Niall que entraba en la cocina.

- No hay de que- movió la mano, restándole importancia.

- Vamos princesa Lena que hay que bañarte- caminé hacia ella. En cuanto lo oyó la sonrisa se le borró, bajó del taburete y empezó a correr hacia el salón- No, Elena déjame al menos que me tome un café- me quejé, apoyando mi cabeza en la encimera.

Siempre la misma historia. Cuando hay que bañarla, sale corriendo y hay que buscarla por todas partes. Llega a esconderse en sitios que ni me imaginaba. Suspiré para empezar a caminar hacia el salón en busca de mi hija fugitiva. Un cuarto de hora más tarde, había puesto'patas arriba toda la casa intentando encontrarla.

- ¡Elena Carter Rossi, vieni qua adesso. Non voglio ripetere! (Ven aquí ahora mismo. No te lo voy a repetir)- exclamé en italiano mirando a todas partes por si captaba algún movimiento.

- Mira a quien me he encontrado escondida dentro de la lavadora- habló Liam saliendo de un puertecita situada debajo de las escaleras, llevando a Elena en brazos.

- ¿En serio Elena? ¿En la lavadora?- pregunté negando con la cabeza y cogiéndola.

- ¡No quiero, no quiero!- se quejó pataleando. Desde luego a heredado mi carácter.

- Elena stai ferma per piacere (Elena quedate quieta)- ordené perdiendo los nervios.

- ¡Noo! ¡Pínsipe Haddy, pínsipe Haddy, ayuda!- exclamó escabulléndose de mis brazos y corriendo hasta las piernas del rizado.

- ¡Elena basta! Mi sto arrabbiando (Me estoy enojando)- entré en la cocina a grandes zancadas y Harry la tenía en brazos mientras Elena econdía su cabezita en el cuello del oji-verde.