Capitulo 10.

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Lía...

Mateo me trajo a casa la noche del sábado..

Era la mañana del Jueves y terriblemente lo había visto en la universidad casi toda la semana...

Era totalmente incómodo, aunque ambos ignorábamos la existencia del otro en ocasiones podía observarlo mirándome e incluso siguiéndome..

Era tan extraño que en la mayoría de mis clases el estaba presente como si todo esto fuese planeado...

No habíamos hablado en lo que iba de la semana y honestamente prefería que así fuera.

Deseaba que Mateo olvidara mi existencia y jamás volviera a molestarme...
Sin embargo mi instinto me decía que Mateo estaba más cerca de lo que parecía y que yo estaba en su mira...

Pareciera que el estaba informándose sobre mi vida en la universidad, aunque era muy silencioso, no podía dejar de presentirlo.

Me sentía totalmente confundida, no estaba segura de que era lo que Mateo quería de mí y muchomenos el porque me trataba tan mal...
Todo esto me volvía loca, era tan misterioso!...

"LIAAAA!!! YA ES HORA DE IRNOS!" gritó mi madre desde abajo...

Ya era bastante tarde para tomar el autobús por lo que decidí acceder a irme con ellos aunque me fuera algo molesto...

"La amargada quiso venir wuu!" Murmuró Liam entre dientes con una sonrisa sarcástica...

"El mocoso apestoso sigue sin saber irse sólo porque es un bebé....que triste.." respondí enfadada...

"No soy un bebé!" Grito molesto...

"Pero si apestoso..." dije sonriente...

"Niños compórtense esa no es forma de hablar entre ustedes!" Dijo mi madre molesta...

Role mis ojos y espere impaciente a llegar a mi destino...

El camino fue algo abrumador pues mi madre no dejaba de preguntar por Mateo como si mereciese algún tipo de atención...

Bajo mi punto de vista era un ridículo ventajoso que pensaba que todo giraba alrededor de su ombligo...

"Lía contestame!" Dijo mi madre ansiosa... "Eres muy rara... te pierdes en tu mundo y no esuchas nada..."

"Lo siento! Esque ya me cansé de escuchar el nombre de Mateo salir de tu boca como si fuese la gran maravilla del mundo..." respondí enfadada...

"Es bastante apuesto..." murmuró picara...

"Consiguetelo tu?" Dije Rolando los ojos...

"Yo ya tengo a mi apuesto chico... tu mereces uno igual..." respondió sonriente...

Llegamos a la Universidad y me baje del coche después de despedirme de ella.

Camine hacia la entrada y noté como todos comenzaron a mirarme de una forma extraña.
Susurraban cosas a mis espaldas y se aconsejaban cosas desagradables...

Por lo general estaba acostumbrada a ese tipo de cosas pero hoy era distinto, hoy pareciera llamar más la atención de las personas que de costumbre...

Unos tipos me miraron devorando mi cuerpo con sus asquerosas miradas y guiñeron el ojo en forma de insinuación sexual...

Hice una mueca de disgusto y me preocupe al instante...

Este tipo de cosas no eran normales, no era una chica que llamase mucho la atención físicamente, No era normal que me hicieran esas caras y mucho menos que la gente que me ve a diario me observará con fervor.. como un bicho raro...

Te Encontré...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora