La emboscada.

Cada paso cuenta

- ¿Quién es Christopher Scott? ¿Trabaja para alguna agencia o contratista? - Preguntó Alisson luego de un instante de silencio donde estuvo dándole vueltas al nombre tratando de recordar empresas, contratistas o agencias con las que ha intercambiado.

- Interesante pregunta, pienso que cuando una persona se esconde tanto tiempo, llega un momento que hasta su verdadera identidad se pierde, en este caso, no se escondía físicamente, estaba más a la luz pública como cualquiera. Una noche del 2003, en un ronda cualquiera, un agente de la policía de Nueva York le pareció sospechoso un joven con un aro en la nariz ¿sabes? esos aretes que se colocan en diversas partes del cuerpo - Alisson asentía mientras Hall le hablaba, el por su parte, le contaba mientras miraba el camino, pero de vez en cuando, volteaba para establecer contacto con ella y ver si le seguía. - Este joven intentaba usar un cajero automático (A.T.M.), joven introducía una tarjeta y extraía cientos de dólares, luego la guardaba, sacaba otra tarjeta y extraía cientos más, así lo siguió haciendo dos veces más, aunque el joven no estaba robando autos o bancos, su actitud le pareció bastante sospechosa. Esto ocurría minutos antes de las doce de la noche, el objetivo del joven, como admitió después, era retirar lo máximo que podía diario de las cuentas correspondientes a las tarjetas y pasada la media noche, hacer lo mismo que correspondía del día siguiente. Para el momento que lo aborda el policía, se percata que el joven tiene peluca de mujer y el aro en la nariz, posteriormente se evidenció que no es su aspecto usual, evidentemente ocultaba su verdadero aspecto, se escondía de la posibilidad de ser identificado posteriormente por las imágenes de cámaras bancarias producto del reclamo de los tarjetahabientes. Aunque se supo posteriormente que el joven usaba cientos de alias en el cyberespacio, al policía preguntarle su nombre, el contestó amablemente Albert González, con la verdad. Lo cierto es que la policía, delitos financieros, medios magnéticos y no magnéticos de los bancos, etc, llevaban tiempo investigando una serie de delitos en diversas zonas sin éxito hasta que González fue capturado, con apenas 22 años, contó todo, detenidamente, detalladamente, el departamento estaba sorprendido como detalló hasta lo más mínimo. Hallaron en su apartamento en New Jersey, un computador con la base de datos de miles de usuarios, números de cuentas y tarjetas. El fraude se extendía a páginas como Ebay, Amazon y Monster, entre muchas más, el delito cibernético era gigantesco, se había hecho de millones de dólares, incluso, en casa de sus padres fue hallado, enterrado en el jardín trasero, un barril sellado lleno de dinero en efectivo. Lo cierto es que se convirtió el el colaborador más valioso que ha tenido el gobierno, para minimizar su enjuiciamiento, decide colaborar al máximo y todos sabían que aunque González es sumamente brillante, no actuaría solo .- 

Alisson sacó una botella de agua de su cartera y le ofreció a Hall, luego tomó un poco y la volvió a guardar en su cartera, la vía estaba bastante despejada, Alisson estaba bastante interesada en lo que Hall le explicaba, aunque el delito cibernético no era su campo usual, ocasionalmente debía intercambiar con agentes del departamento para atajar cabos sueltos en casos criminales.