La Misteriosa Chica del Baño

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Había superado ya tres semanas de escuchar lamentaciones de Alexis acerca de como era todo tan difícil, y a Iñaki intentando sin éxito hacerla sentir especial por no haber muerto en su accidente y sólo haber perdido la vista.

Erick y Ángel se aburrian la mayor parte del tiempo, ya que el curso no sólo era de uso del bastón, orientación y movilidad, también los instruian en actividades de la vida diaria, como el aseo del hogar, diferenciar productos al ir a comprar y lecto escritura Braille, actividades en las que ambos ya tenían mucha experiencia por haber nacido y crecido ciegos, pasando toda su vida en el Instituto para ciegos.

Para ellos lo peor eran las sesiones de Braille, toda la vida habían tomado apuntes, leído y trabajado con este sistema, ahi ellos estaban comenzando desde cero desde explicar porque se llamaba Braille y estaba basado en una rejilla de seis puntos, por lo Erick se puso a molestar a Ángel muy ruidosamente lo suficiente para que ambos los invitaran a salir del salón. Después de un semana de haber sido expulsados a esa hora, el Sr. Francisco se les unió lo que ocasionó que su fuga ya no fuera tan divertida.

En la cafetería de la Escuela para Perros Guia, llevaban ya cómo 40min hablando de Golbol un deporte de equipo para ciegos, el Sr. Ramón sabía mucho pues en su juventud había practicado mucho.

Un tanto aburrido, Ángel se disculpó para ir al sanitario antes de la siguiente sesión de limpiar la casa, un tanto para huir de ahí otro poco porque en verdad lo necesitaba.

Justo fue al salir del sanitario que la conoció, había regresado al mal hábito de no usar bastón, guiándose por la pared y el sonido, caminando un algo rápido e intencionalmente perdido; algunos días atrás había escuchado cachorros cerca de ahí y quería conocerlos, tendria a lo mucho unos 15min, antes de la siguiente clase, estaba en este pensamiento cuando chocó fuertemente con algo... más bien con alguien, provocando la caída de ambos, en el suelo, después del gran encontronazo, estaba por salir una gran carcajada desde el centro de Ángel, cuando una voz de mujer joven le gritó -¡Ahh! ¡Pero como eres bruto!, ¿porque no te fijas por donde vas?¿a caso estas ciego?- fueron estas últimas palabras y su entonación que lo dejaron helado, su bastón se había caído de la bolsa trasera de sus jeans donde lo había colocado doblado en seis partes para salir a explorar, rápidamente se puso en su búsqueda al mismo tiempo que sólo atinaba decir -lo siento, lo siento- balbuceando nerviosamente, justo al encontrarlo, escuchó como ella se levantaba y sin decir más, continuaba su camino y nuevamente chocaba con un cesto de basura bien señalizado, Ángel se levantó e intentó seguirla lo más sigilosamente posible, hasta que desapareció tras una puerta, cuyo cartel decía en braille "sanitarios damas", decidió esperar pacientemente a que ella saliera, puso su espalda y nuca contra la pared, extendió su bastón y esperó.

No había pasado mucho tiempo cuando unos pasos con zapatos de tacón inundaron sonoramente el pasillo desde el otro lado -¡Oh!, ahí estas chico!, cuando tu madre nos dijo que eras un poco despistado y solías perderte, no creí que hablase tan en serio, ¿cuánto tiempo llevas ahi, fuera de los sanitarios?, Erick dijo que habias venido hace más de 30min, ¿no se te ocurrió intentar volver?- dijo la profesora del curso en una octava más aguda de lo normal, Ángel se puso nervioso y sorprendido de como había pasado tanto tiempo y ella no salía e intentó explicarse -No...yo...no estoy perdido, yo se que aquí está el sanitario..... sólo.... esque.... yo...- dijo Ángel balbuceando, no le salían las palabras -Está bien Ángel, no te angusties, cada quien lleva su proceso a su tiempo, ven para iniciar la sesión de cocina, Ángel no tuvo más remedio que hacer caso y dejar a la misteriosa chica dentro del baño.

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