Parte 22 :El

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No sé qué tenía que me hacía perderme en su mirada, pero no cedería, se había comportado durante toda su vida como un idiota, no importa que se vea increíblemente bien, es demasiado esa personalidad que tiene me saca de quicio.

-... .Ella se inclinó hacia el con deseo, miro pícaramente sus labios, se acercó a él y acaricio su nuca y aunque su corazón también se aceleró, respiro hondo y dijo. -Lo siento amor, estas en mi lista, pero no en el tope.

No iba a dejarla que hiciese lo mismo, ahora yo quería un beso de esos labios, la sujete por la cintura con fuerza pero ella hizo lo que sin importar la especie siempre surte efecto, un rodillazo en mi entrepierna que me hizo soltarla de inmediato, estaba totalmente colorada y su respiración era entrecortada, reconocía esas reacciones, ella lo quería tanto como yo pero terca y orgullosa como es jamás le daría la razón a sus instintos y eso me cabreaba; muchas veces había sido rechazado de esa manera y había conseguido lo que quería o había perdido el interés, pero había algo que me hacía calcular las situaciones, tomarlo con calma era como un alfa planeando una maldita estrategia para con ella y eso era raro, no me atrajo nunca, sin embargo ahora me tenía siguiéndola a todos lados, escuchando sus conversaciones y hasta preocuparme por ella, y luego el hecho de sentir esa nostalgia y esa sensación de olvidar algo cada vez que la veía.

No quería estar un minuto más cerca de él o me dejaría llevar, estuve a punto de hacerlo, sin embargo, no cedería, una alfa siendo el juguete de un idiota egocéntrico era demasiado y por el día de hoy ya era suficiente, creo que llamare a cierta persona que me hace relajar, y no es por qué este prestándole atención a la sugerencia de James.

Desde lo lejos, en una de las ventanas más altas del castillo, los padres de James observaban como su hijo intentaba ir tras Cordelia y de cómo esta lo evitaba.

-Es hora de que sepan, ella ya está grande y el, en él es más fuerte puedo notarlo cariño. Dijo Merisa preocupada.

-No es nuestra decisión.

-Sus padres ya no están.

-Pero si la de su tía... no funciono lo de juntarlos aquí o de comprometerlos aquella vez.

-Ya tuvimos una vez la ira de la diosa luna encima, temo lo que suceda ahora, además nada está dicho sabes bien que nos ganaremos la ira de los dos si llegan a enterarse.

-Ambas familias hicieron lo correcto para ambos, iba a suceder una tragedia. Dijo Merisa reconfortando a su alfa con un abraso.

-La tragedia sucedió hace cinco años.

-... .Ella no dijo más y con la mirada lastimosa se alejó de él, en ese momento un hombre de piel blanca algo desgarbado salió de entre los pasadizos de la pared, hizo una leve reverencia al alfa y luego se acercó.

-Me sobrepase nuevamente.

-La luna entiende su predicamento, pero entenderlo no significa que no duela.

-Lo se... quiero que sigas a James y lo protejas cuando el salga de la manada.

-Así se hará señor. Dijo retirándose.

- ¿Cuánto tiempo me castigaras por mi pecado?. Dijo dando un hondo suspiro mientras miraba hacia donde pálidamente se encontraba la luna.

Toda la mañana, toda la maldita mañana persiguiéndola sin que pudiese entablar una conversación con ella, ya más hacia la tarde logro encontrarla en la entrada, luce impaciente caminando de un lado hacia otro Aren ya se había alistado para salir con su luna y aunque me molesto que tomase mis cosas sin permiso eso paso a un segundo plano cuando por la puerta la veo salir a ella corriendo para colgarse del cuello de otro, un tipo de piel clara con un asomo de barba de ojos azules y cabello desprolijo color castaño que no paraba de sonreírle y abrazarla, conmigo no se dejaba abrazar pero con él estaba más que gustosa, casi mato a Aren cuando comenzó a reírse por mi reacción que casi salto del balcón de la sala.

-Charlie, ¿Cómo estuvo tu viaje?.

-Más que tranquilo Cordy, ¿Tu qué me dices?.

-Hmm... .

- ¿Hmm?, te conozco más que tus padres. Hubiese jurado que ese idiota elevo su voz en la última frase solo para que lo escuchase, lo siguiente que veo es que me mira de reojo la sujeta por la cintura y la alza para besarla en la mejilla. -Hmm sí que estas hermosa Cordy, ¿Salgamos a dar una vuelta?.

- ¿Acabas de llegar y ya quieres salir?. Dijo Cordelia burlonamente.

-Hmm... ¿No se puede?.

-Es por que después te quejas de que ya estas cansado.

-Y si vamos a correr al bosque, ¿Te apuesto que esta vez te gano hermosa?.

-Sabes que no. Dijo ella juguetonamente, AHhh odiaba que se comportase así con el. - Esta bien, vamos. Lo tomo de la mano y salieron caminando rápidamente hacia el bosque.

-Hermano llámame loco, pero pareces más que celoso con el que acaba de llegar.

- ¿Qué acaso no lo ves?, no deja de restregarme lo cercano que es con ella. Dije en un arrebato de ira.

- ¿Y eso que?, te recuerdo que a ti no te interesa lo que haga ella, y parece que está muyyyy a gusto con él.

- ¿Quieres ir con un ojo morado a tu cita?.

-Ok...ok tranquilo corazón celosito.

-Agggghhh ya cállate y vete de una buena vez. Dije sacándolo a empujones, no quería arruinar su cita, pero tampoco yo quería arruinar mi vida, llame a Victoria, si ella iba a salir a correr con ese idiota, por que yo no habría de hacerlo con Victoria, cuando se lo dije ella estaba más que dispuesta, aunque obvie un pequeño detallito, si ellos fueron hacia el sur de mi territorio yo también, después de todo era mi territorio y seguramente nos cruzaremos por casualidad justo para arruin... digo hacer más amena la reunión.


 Fin capitulo

Bien, espero que les haya gustado el capitulo, el siguiente ya lo estoy escribiendo y enserio me estoy divirtiendo, tal vez si llego haga un especial de  tres capítulos seguidos, pero no prometo nada; besos y no se olviden de votar y comentar.

Bloody MoonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora