Parte 67: Fuego y Pasión.

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-No se si lo arregle como su querías pero al menos dejaran de ignorarse. Dijo James de manera cansada desplomándose sobre la cama.

-¿Por qué tan cansado amor?. Dijo Cordelia subiéndose encima de James con una mirada picara.

-Papeleo, Trent es un gama pero menor de edad, quiere estudiar y tuve que hacer el papeleo para ser su tutor legal, los demás ya son mayores, pase el resto del día después de hablar con James haciendo eso... pero ahora me siento mejor. Dijo con una sonrisa a medida que Cordelia comenzaba a sacarle la ropa.

-Sip... oye. Dijo ella acercándose para besar su cuello antes de que James tomase su trasero con ambas manos para acercarla más.

-Tienes un lindo trasero amor... te quiero toda no.Dijo James tomando su mentón.-Quiero cada parte de tu cuerpo para mí. Dijo invirtiendo posiciones para ahora el sacarle la ropa a ella.

-Me gusta lo que veo. Decía Cordelia deslizando con suavidad y una mirada picara sus manos por el pecho esculpido de James.

-Es todo tuyo amor, disfrútalo. Dijo con una sonrisa torcida a medida que desgarraba su ropa interior.

Me mira con deseo, un deseo que me asusta, lo ayudo a sacarse su ropa quedando en una ajustada y provocadora ropa

Interior, veo su cuerpo firme y atlético desnudo, muerdo con deseos mis labios con un odioso deseo dominándome, siento una sensación extraña en mi interior, palpitaciones y una deseo inédito que nunca había sentido.

Trago saliva y tiro de sus tobillos y la acerco más hacia mí, deslizo mis manos hacia sus muslos y sus ojos no dejan de mirar mi cuerpo me reclino para delante para tomar sus manos y llevarlas por encima de su cabeza, ella ríe pícaramente mientras no deja de suspirar llena de deseo, pasa una mano sobre mi espalda hasta mi cintura para atraerme más hacia él y el placer comienza a dominarme, me hago uno con ella, pero el deseo reprimido en mi torna bruscos mis movimientos haciendo que ella arquee la espalda retorciéndose del dolor.

-Lo siento amor... .

-Esta bien James... no eres tú, las cicatrices arden, un látigo de plata retrasa la curación... pero eso no me impedirá tenerte.

Siento que todo mí interior se expande ante los avances de James, las dulces palabras que susurra a mis oídos y el hecho de que esos besos llenos de pasión y lujuria que deja desparramados por todo mi cuerpo crean en mí una sensación abrasadora de placer.

El dolor punzante que sentía poco a poco va desapareciendo, convirtiéndose en placer, uno intenso, veo a mi mate y el no deja de decir mi nombre y de cómo el solo verme hacía que él se encendiese.

Cada vez más difícil tratar de hacer caso omiso a mi instinto y marcarla y veo que a ella también le es difícil, aprieta tanto sus colmillos que la sangre se desprende de sus labios.

Escucho sus resoplidos y gruñidos de placer en mi oído y comienzo a querer seguir escuchándolos, su movimientos pasan de ser suaves y fuertes trato de mantener mis manos inmóviles y mi cuerpo no responde solo se deja guiar por el deseo de tenerlo, una voz se hace fuerte en mi cabeza y creo que no voy a poder seguir las instrucciones por mucho tiempo, "No lo marques, no es el tiempo aun".

-Eres hermosa, me fascinan esos movimientos, la clase de deseo enfermo que me provocas. Dijo él.

No sé porque, pero escucharlo me lleva a cometer un loco impulso, mando a la mierda las estúpidas reglas y lo tomo de la nuca , arqueo su cuello y veo que él no se resiste, mis colmillos se alargan pero al instante de sentir su piel, no pudiendo resistir el impulso decido morder mi propio brazo, él ha luchado por su manada, no puedo quitársela.

Bloody MoonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora