✔ 30 DAYS OF SPRIWNTRAP ✔ #FNAFHS

✔ Day 22 ✔

|va a doler, ya están advertidxs, no me hago responsable de nada bai|

¿Cuánto había pasado ya desde entonces?

¿Un día?, ¿tal vez tres?. Una semana, a lo mejor. No estaba seguro

Pero de lo que sí estaba por completo seguro era de que echaba mucho de menos a Towntrap. Y de que si seguía así, pronto moriría de depresión, hambre o incluso de sed. No quería hacer más que estar todo el día en su casa, sin ver a nadie, sin hacer nada. Sólo llorar

No hablar con él durante esos días habían y seguían siendo una total tortura. Todo por su culpa, por una estupidez. Dios, ¿cómo pudo ser tan imbécil?

{…}

Los celos son malos, sólo demuestran que no confías en tu pareja y que crees que podría a serte infiel. Ridículo. Towntrap no era esa clase de persona, era simplemente él. Dulce, amigable, perfecto

Y entonces, ¿por qué estaba tan celoso de Eak?

¿Por su cercanía?. ¿Por qué le conocía de más tiempo que él?. ¿Por qué sabía que en algún momento Towntrap sintió algo más que una amistad por él?

Decía que no le importaba cuando no eran más que apenas amigos(aún si el recelo seguía ahí), pero vaya que importó mucho cuando empezaron a ser novios

— ¡¿Por qué siempre tienes que estar con Eak?! –el ojinaranja arqueó las cejas con duda. No entendía. Nunca imagino a Springtrap como alguien celoso ni mucho menos

Toda aquella discusión se llevó a cabo en la casa del ojigris. Justo antes de salir en una cita de celebración. ¿De qué?, pues de su segundo mes como pareja

— ¿De qué hablas? –Towntrap lo miró fijamente, un poco de confusión se reflejaba en sus ojos

— Tú sabes de que hablo –le reclamó, el menor abrió sus ojos con sorpresa. Jamás, hasta ese momento, había visto de esa manera al rubio. Siempre parecía tan alegre, como si nada le preocupase en realidad

— No sé si has olvidado que Eak tiene NOVIO –recalcó la última palabra con ligero enfado. Él tampoco era de molestarse, era muy difícil que pasase, pero cuando pasaba. Sí que se ponía mal

— Eso no impidió que te siguiera gustando un tiempo, ¿verdad? –recriminó el mayor en respuesta

— ¡Springtrap! –gritó el pelinaranja. Bien, ahora ya no había retroceso, había iniciado ya la discusión de manera seria– ¡llevamos casi un año y medio de ser amigos y dos meses de ser pareja, ¿y ahora vienes con eso?!

— ¡No me había importado tanto antes!

— ¡¿Y ahora sí te importa?!

— ¡Cancelaste, no una, ni dos sino tres, de nuestras citas porque tenías que estar con él!

— ¡Había discutido con Bonnie, SU NOVIO, necesitaba mi ayuda!

Pero no paró ahí, no se detuvo por lo menos en una hora. Parecía que duraría una eternidad entera, no obstante, no fue así

Y para cuando llegaron al momento decisivo de su pelea. Dijeron las palabras de las que claramente se arrepentirían tan sólo un poco después

— ¡¿Sabes qué?! –vociferó el de coleta baja, con ya unas pequeñas lágrimas en sus ojos– ¡si no puedes confiar en mí, a lo mejor no deberíamos ser novios!

— ¡A lo mejor no! –contestó aún con la adrenalina del momento. Y para cuando se dieron cuenta de sus palabras, ya era muy tarde

Ambos quedaron en silencio, observándose. Primero de manera enojada, pero aquella expresión se fue ablandando dejando una de sorpresa y más que nada y por mucho, tristeza

— Y-Yo… –Springtrap trató de reivindicarse de inmediato. Lágrimas también corrían por sus mejillas, tantas como en las del pelinaranja

— N-No… –murmuró el otro, apretando sus ojo con fuerza y bajando la mirada– y-ya no digas nada, Springtrap

Y así como así, se había ido. No regresó y él no fue a buscarlo. Todo estaba perdido

{…}

Esa fue definitivamente la peor y a lo mejor, única pelea que tuvieron en su vida

¿Era tan tarde para siquiera pedir perdón?. Estaba más que arrepentido, definitivamente debía hacer algo

No podía perderlo, no a él. No de esa forma

Reflexionó sobre ello y tomó su decisión, debía reconciliarse con él. Era necesario. Por primera vez desde aquella terrible discusión, se levantó de su hamaca con una determinación increíble y con un solo objetivo

Disculparse por lo que había hecho