crush ; j. jungkook {en edición}

capítulo v

―Hyo, ¿estás bien?―Heechul fue el primero en acercarse, se agachó a mi lado. Parpadeé, preguntándome si de verdad me estaba pasando esto... Y de repente, me dio un ataque de risa. De esos que son histéricos, que hacen que enrojezcas y que la gente se contagie o te mire como si fueras un mono de feria.

―Estoy bi... en―dije entre risas. Cada vez que siento dolor, en lugar de llorar o gritar, me rio sin parar y esa no fue la excepción.

―Pero Hyo te está sangrando la rodilla. ¡Mira! ¡Sangre, mucha!―dijo Baekhyun horrorizado, a su lado, el chico odioso con cara de pocos amigos fruncía su ceño, mirándome.

Ese era... el amigo de Jung... En ese momento recordé que Jungkook estaba ahí. Pare de reír y me mire la rodilla. ¡Santo Dios! Si que estaba sangrando, tenía la panty rota y un enorme hoyo en mi rodilla.

Mi mala suerte volvía. Todo era culpa de la rata.

―Pero que torpe eres, niña tonta ―escuche de repente del acompañante de Jungkook. Oh, no. A mi no me venia a insultar mi torpeza. ¡Solo yo misma podía insultarme! Fruncí el ceño.

―¿Cómo me llamaste?―me levanté del piso -medio cojeando- dejando a Heechul preocupado en el piso junto a Baekhyun que parecía al borde del desmayo por la sangre―No sé quien eres, ni quien te crees que eres pero creo que te golpearé y dejaré un moretón feo en tu piel blanquita de princesa―hice el gesto de arremangarme el sueter escolar, ganándome una risita irónica del tipo.

E ignore por completo al Jungkook con cara de trauma. No lo entiendo. ¿Me recuerda o esa es su cara para situaciones como estas?

―¡Ja! Yo no tengo que hacerte nada si te golpeas sola, niña torpe, te he visto antes, golpes, aquí, allá, chocas con esto y aquello y siempre te veo caerte ―Santa madre de las patatas, comencé a ponerme roja. Él había visto mis fails ―. Cada vez que pasas... ¡Pum! Al piso―Ese tipo se burlaba de mí―¿Te doy un consejo? Deberías de casarte con el suelo, si lo quieres tanto.

―Tú, niño de voz ronca y piel de muñeca, te voy a...―gruñía, él sonreía, Jungkook no se movía y cuando me iba a abalanzar para arrancarle su piel blanca y su cabello horrible, Baekhyun me detuvo, susurrándome un "sh, sh" similar al que le hacía yo a mis mascotas cuando estaban molestas o asustadas.

―Vamos, te llevaré a la enfermería. ¡Sangre, estás goteando el piso, uh!

―¡Oye! No ves que estoy peleando con este tipo―protesté.

―Ni defenderte sola puedes, chiquilla―No sé que tenía en contra de mi ese chico. ¿Y si Jungkook si me recordaba y le contó algo sobre mí?

AY no. Esto no puede estar pasando.

―Vayámonos, Yoongi-hyung ―escuche la voz de Jungkook. Ah... Jungkook aun seguía ahí. Diablos, ¿Y SI ES ASI? ¿QUÉ HARÉ? ¿Y SI RECUERDA MI PASADO PSICOPATA ESPIA?

―¿No ves que estoy peleando con la chiquilla torpe? Quedémonos un rato. Me estoy divirtiendo.

―Pero hyung, tú comenzaste a discutir sin ninguna razón.―respondió la rata―Ya, vayámonos.

Vi como Jungkook empujaba al tal Yoongi para que se fueran. Mire al blanquito y achique los ojos haciendo como que lo observaba, él hizo lo mismo, retándome. Pero que odioso era. Heechul y Baekhyun me empujaban para que me moviera en dirección a la enfermería.

Oh no, voy a encontrar al amigo de la rata, se metió con la torpe equivocada.

. . .